Pues a mi no me gusta. No me va el blanco para este tiempo, tampoco es que le siente muy bien, el vestido ya lo he visto, es como otras decenas de vestidos de fiesta que ha lucido, las flores en el hombro me parecen muy catetas y horteras y los pendientes son de señorona del siglo pasado, igual que el peinado. Me gusta el clutch y los zapatos. Viejunos y rancios los dos.