Letizia, la reina perfecta

[Anti-Letizia]

Ella y él, que no podemos dejar de darle algun merito, que lo tiene eh....
El tío lo está ganando con mucho esmero...jajajaja

Ya hizo suficiente meritos al comprometerse y casarse con ella.
Pero después de 14 años de despropositos y no pararle los pies, uuuuffff.

 

[NUEVA SIERRA]

¿Dice perfecta?....jajajajaja buen chiste.

 

[phneutro]

¿Es perfecta quién necesita constantes retoques estéticos, quien se operó de todo para estar más aparente? ¿Es perfecta quien hasta se lleva mal con su familia política? ¿Es perfecta quien cae mal a muchísima gente (por no decir a casi todos)? ¿Es perfecta una reina que a pesar de tener miles de asesores, pone mala cara o es maleducada o comete fallos de protocolo?... Si eso es perfección, que viva lo imperfecto!

 

[Patrizia]

MIENTE.
De tanta mentira, da una gran tristeza.

Más que tristeza, es desperante. Aunque el que ha escrito esto es más cursi que un repollo con lazos. Menudo hortera. Lo malo es que es El País. En fin.

 

[Vanessa CP]

 

[Sheki]

Ya hizo suficiente meritos al comprometerse y casarse con ella.
Pero después de 14 años de despropositos y no pararle los pies, uuuuffff.

Tanto protocolo para luego salir en todos los programas del corazon dejando claro la mala relación que tiene con la suegra

 

[marikuki]

Una mentira mil veces repetida puede parecer una verdad.

 

[Taconez Lejanoz]

Letizia, la reina perfecta
Impresiona que el perfeccionismo de Letizia haya llegado al extremo de consolidarla como la heredera de una milenaria dinastía


RUBÉN AMÓN
21 JUL 2017 - 00:00 CEST

Impresiona que el perfeccionismo de Letizia haya llegado al extremo de consolidarla no ya como una reina, sino como la heredera de una milenaria dinastía. Delgada, hierática, de tez albina. Y como escribía Valle Inclán en Sonata de Estío,consciente del desdén patricio de los criollos.

No se refería a ella, obviamente, pero el pasaje ilustra la disciplina mental y corporal con que Letizia ha conseguido que el consorte parezca el rey titular. Ocurre con Rania en el reino de Jordania, pero no puede decirse que Abdalá II, a diferencia de Felipe VI, parezca precisamente un monarca esbelto ni distinguido.

Por eso tiene más mérito la metamorfosis de Letizia. Ninguna reina de Europa eleva la barbilla mejor que ella. Ninguna plebeya se habría sofisticado tanto para lucirse ingrávida, a cámara lenta, en la gran alfombra roja de Londres. Que era una pasarela.

No podría sospecharse que fue becaria en el periódico La Nueva España ni podría reconocerse el menor atisbo de su antiguo vasallaje, pero semejante bagaje patrimonial y biográfico representa una ventaja para la reina: viene del otro lado, conoce el otro lado.

Y, por idénticos motivos, sabe lo que esperamos los españoles y los espectadores. Es decir, la abdicación de cualquier liturgia opulenta —un buen ejemplo fue la comunión colegial de Leonor— y una telegenia profesional que Letizia estimula para mirar a la cámara como si la sedujera y robar el plano con sus guantes blancos.

Imaginamos que debe frustrarle el silencio y el papel gregario que delimitan su cargo, sus funciones, pero Letizia ha logrado sofisticar su imagen etérea para romper en añicos el florero y ocupar en solitario la portada del Times. Es la meta reina. Su presencia da que hablar como un remedio al mutismo protocolario y como una reivindicación. Le ocurría a Jackie Kennedy con el presidente. Y le ocurrió a Victoria Beckahm con Beck hasta que decidió ella quedarse con el cetro.

Lo hemos comprobado en Londres con ocasión de la visita de Estado a Reino Unido. Necesita Letizia un vestuario enciclopédico, una vitalidad escénica, teatral, casi como una réplica a la imagen inmutable de la reina Sofía. Por eso cambia de aspecto y de peinado. A Letizia no habría forma de fijarla en un sello ni de acuñarla en una moneda. Y esa personalidad, y esa tenacidad, no sé si hacen de ella una mujer feliz, pero sí la convierten en una reina perfecta.

La prensa británica la ha tratado como tal. Le ha reconocido el mérito de haber superado el desafío que suponía contrastarse y reconocerse delante de la reina de todas las reinas. Que es Isabel II y que ocupa un peldaño superior porque presume de su noción metafísica y porque ha demostrado que la mejor manera de estar cerca del pueblo es alejarse de él con el boato, la liturgia, la dimensión sagrada.

https://elpais.com/elpais/2017/07/20/opinion/1500572069_456559.html

quien es el hijo de su madre que escribio este articulo? como que no sea en chiste se merece que lo saquen de una patada en el culo del diario

 

[extra-brut]

Qué manera tan burda de mentir .

 

[gg_]

Yo creo que está hecho con reconchineo. Que está obligado a escribir un artículo de super peloteo a la kkkuin y ha dicho "ah si? pues os váis a cagar". Titular "letizia: la reina perfecta" es de cachondeo. Aún en un país como Holanda, donde maxima goza de una popularidad tremenda, un artículo titulado: "Máxima: la reina perfecta" sonaría a broma. Aún pensando que es una maravilla de reina, nadie titularía ni escribiría así de una reina. Está hecho a modo de crónicas del NODO hablando de Franco y familia o de kim-jon un en corea del norte. Pero en un país democrático, es pura coña.

El tío no es tonto, ha escrito lo que le han dicho, ha peloteado y sólo habla maravillas de ella. Pero lo hace con tanta exageración y taaaaaan azucarado que roza lo esperpéntico.

 

[hastaelgorrodepreparaos]

Pues yo creo que hay un sector de periodistas que les da por escribir maravillas de la Ortiz para fastidiar al pueblo vulgo que la desprecia cada día más, y que ellos creen que son de perfil ultra conservador que no la acepta por ser nieta de taxista. Y se ponen a lamerle el culo como si no hubiera un mañana. No es artículo de peloteo, es un zasca a todos nosotros que la criticamos sin ser dignos. Hay más de esos: un imbécil que decía que si la grasa era mala, que lo mejor era no comer nada como ella y no tener un ápice de grasa en el cuerpo. Aquel era de el mundo, sección salud para más inri. Al juzgado lo hubiera llevado yo por la mala influencia escribiendo sandeces