La verdad es que ninguna de las asistentes al acto me gustan como van, ni Elena Cué que es tan guapa, la veo tan favorecida como otras veces. Letizia o se pasa o no llega. El mono me gusta pero no le queda bien, el maquillaje excesivo, el bolso vulgar y los brazos un espanto que otra taparía pero ella se empeña en enseñar. No por ser más musculosos son más bonitos. El conjunto muestra lo de siempre: Quiere destacar pero la elegancia está en la sencillez, la naturalidad y el encanto que a ella le falta.