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Estas revelaciones han levantado una auténtica polvareda, aunque según asegura a LOC un miembro del entorno de los Alba, la imagen del monstruo que pintan es exagerada. "Jesús era un intelectual brillante aunque muy prepotente y nada dotado para la paternidad, menos aún de los hijos de la aristócrata más titulada de España, criados por niñeras complacientes. Supo obnubilar a Cayetana, pero fracasó al pretender meter en cintura a sus hijos".
No sé por qué pero siempre dicen que la verdad está en la mitad y este párrafo parece muy verosimil. Porque lo que llevo leyendo sobre su "perfídia", vamos, ni Satanás lo ganaría y no resulta creible. El más culto de todos los hijos de Cayetana ha sido Jacobo y puede verse que con él tuvo empatía.
El Aguirre con la Fundación reorganizó el patrimonio y ahorró mucho dinero a los Alba. Por algo los hijos mayores colaboraron con él pese a sus "maltratos". Que los hijos de Cayetana estuviesen muy mimados, normal, porque habían perdido a su padre seis años antes y su madre no les hacía ni caso, no podían ser las niñeras ni las institutrices quienes les metiesen en cintura. Y que un padrastro quiera meterte en cintura es imperdonable para los niños mimados.
Que se tuviese creído lo del titulo de Duque, pues sí, me lo creo, pero que tenía trauma de hijo de soltera, pues también, lo que tendría que soportar desde la niñez por eso. Una experiencia que puede incitar al desquite con quienes te despreciaron una vez alcanzaste la cumbre social. Aunque al grado que cuentan me parece inverosimil.
Que Cayetana no estuviese con él a morir era su modo de afrontar la enfermedad y la muerte, que no soportaba desde la muerte de su madre. A su primer marido también le dejó morir solo en EEUU y sus hijos se lo reprocharon pero a ella le dió igual.
Cuentan cosas de tal vileza que cuesta que sean reales, normalmente unas declaraciones tan exageradas dice más del que las cuenta que del protagonista.
En fin, que es fácil hacer leña del árbol muerto y que ya no te puede responder. Pero me pregunto por qué tienen que salir de repente todos a ponerle verde.
No pongo la mano en el fuego pero me parece que hay mucha exageración en todo lo que se dice.