Por otro lado en Suiza (pais neutral) y por lo tanto, no condentiente durante la Segunda Gran Guerra, vivían Don Juan y Doña María, Condes de Barcelona, con sus 4 hijos; la infanta Pilar, el infante Juanito, la infanta Margarita y el infante Alfonso (apodado "Senequita" pues era un chico de gran inteligencia y muy listo).
Esos años en los que el infante Juanito vivió con su familia en Suiza fueron de mucha alegría para el niño. El momento más duro que Juanito tuvo que soportar fue cuando a los 4 años le pusieron un uniforme militar que había sido confeccionado a su medida. Lo que no estuvo a su medida fueron las botas que le quedaban pequeñas. El niño sentía tanto olor en sus pies al punto que se puso a llorar. Fué entonces cuando su padre, don Juan, le gritó que los hombres no lloraban. Ante estas palabras, Juanito aguantó la sesión fotográfica con las botas puestas.
Pero por otra parte, fueron muchos los momentos en que pudo ser un niño como cualquier otro hasta poco después de que la Segunda Guerra Mundial terminase el 2 de septiembre de 1945.
Esos años en los que el infante Juanito vivió con su familia en Suiza fueron de mucha alegría para el niño. El momento más duro que Juanito tuvo que soportar fue cuando a los 4 años le pusieron un uniforme militar que había sido confeccionado a su medida. Lo que no estuvo a su medida fueron las botas que le quedaban pequeñas. El niño sentía tanto olor en sus pies al punto que se puso a llorar. Fué entonces cuando su padre, don Juan, le gritó que los hombres no lloraban. Ante estas palabras, Juanito aguantó la sesión fotográfica con las botas puestas.
Pero por otra parte, fueron muchos los momentos en que pudo ser un niño como cualquier otro hasta poco después de que la Segunda Guerra Mundial terminase el 2 de septiembre de 1945.