Creo sinceramente que el único político español que ha dado la talla, al menos mínimamente, desde las pasadas generales hasta hoy ha sido Naranjito. Al menos ha movido ficha: ha cambiado de opinión en el buen sentido de la palabra, es decir, no se empecinó en el no a Rajoy a pesar de llevar dicho no como promesa electoral. Cambió porque vio que España se encuentra en una situación sin salida y que por ello mejor dejar de lado una de sus promesas electorales estrella por el bien de una negociación que pueda llevar a que España cuente con un gobierno de una vez. Otra cosa son los cambios de opinión de Kemaiglesias, que tan pronto se declara revolusionario, como sociademócrata, como le regala un piso a todo el mundo, como le regala una paga mensual a todo el mundo. Kemaiglesias es un kantamañanas konká, lo mismo que Podemos es Kasta konká. Pero Naranjito, no, Naranjito no actúo esta semana como un kantamañanas, sino como un hombre de estado y como un patriota. A Pedro ya le llaman Pilatos desde hace tiempo, desde el metafórico día aquel en que se lavó la mano después de habérsela estrechado a un negro. Ahora, más Pilatos que nunca, Pilatos en estado puro, se lava las manos más que nunca. Lo de Mariano, por otro lado, reviste tanta gravedad o más que lo de Pilatos. Mariano ya no es que se lave las manos, sino que espera a ver si se las lava alguien o incluso a ver si se le lavan solas. Si a Pedro no hay quien le gane a Pilatismo, a Rajoy no hay quien le gane a dontancredismo. Rajoy es un tarugo. Rajoy es el tarugo mayor del Reino. Naranjito le ofreció salir del estancamiento y Mariano dice que hasta el miércoles, que nada, que no puede ser, que hay que esperar a que se reúnan no sé cuántos del PP para estudiar la iniciativa de Ciudadanos. Mariano se fue de puente. Mariano es un indecente, en eso le doy la razón a Pilatos, pero Mariano no es el político indecente por antonomasia, habida cuenta de que la indecencia es endémica entre los políticos españoles, Mariano es un indecente, pero tanto o más que él lo es Pilatos y lo son la inmensa mayoría de políticos españoles; si de algo ha de calificarse por antonomasia a Mariano es de Dontancredo. Naranjito me ha sorprendido gratamente, ha mostrado un mínimo de decencia. A ver si no me decepciona dentro de cuatro días.
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