La reina Máxima habla sobre la salud financiera durante un seminario web. Marzo 26, 2021

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Comunicado de prensa | 24/03/2021 | 14:18

Su Majestad la Reina Máxima participará en un webinar privado sobre salud financiera en el contexto de las finanzas inclusivas, organizado por la oficina de UNSGSA el viernes 26 de marzo. Ella está dando un discurso allí. Los participantes son representantes del sector privado y del Grupo de Trabajo de Salud Financiera . Este grupo de trabajo se estableció en diciembre de 2020 por iniciativa de la Reina Máxima en su calidad de defensora especial del Secretario General de las Naciones Unidas para las Finanzas Inclusivas (UNSGSA).

 

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La salud financiera es un concepto global, pero ¿qué significa esto exactamente? Varios estudios han demostrado que la pobreza, las preocupaciones económicas y las deudas tienen un impacto negativo en la salud física y mental de las personas. El Grupo de Trabajo de Salud Financiera'está trabajando con representantes de organizaciones del sector financiero y de desarrollo en una visión compartida sobre la salud financiera. Por ejemplo, ¿cómo mide si la situación financiera de alguien es saludable? ¿Qué políticas se necesitan para hacer una contribución positiva a la salud financiera de las personas? Desde 2009, la Reina Máxima se ha comprometido como UNSGSA a un buen acceso y uso seguro de un banco o cuenta de ahorro, préstamos, seguros, pensiones y banca digital, para que las personas pobres en particular tengan más oportunidades de desarrollo económico y social.

Las personas que utilizan los servicios financieros deben poder hacerlo de una manera que contribuya a su salud financiera y su capacidad de recuperación. Por ejemplo, mediante educación financiera e informándoles adecuadamente sobre productos financieros. Además, la pandemia de Covid deja en claro lo importante que es la salud financiera para poder hacer frente a las consecuencias económicas negativas, por ejemplo, con un colchón financiero. Las Perspectivas Económicas Globales 2021 del Grupo del Banco Mundial (BM) esperan que 163 millones de personas terminen en extrema pobreza como resultado de las consecuencias económicas de la pandemia.

Los miembros del Grupo de Trabajo de Salud Financiera son: Aspen Institute, Bankable Frontier Associates, Commonwealth Bank of Australia, Consultative Group to Assist the Poor, Development Bank of Latin America, Financial Health Network, ING Global, Mastercard Center for Inclusive Growth, MetLife Foundation, Fondo de las Naciones Unidas para el Desarrollo de la Capitalización y el BM.

En los Países Bajos, la reina Máxima también está comprometida con la salud financiera de las personas. La atención se centra en cuestiones como la aptitud financiera, la educación financiera, la protección del consumidor y el asesoramiento sobre deudas. La reina Máxima ha sido presidenta honoraria de la plataforma Money Wise desde 2010 y trabaja junto con SchuldenlabNL.

 

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Maxima lleva una falda de cuero ecológico vegetal derivado del cactus by Natan

 

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H.M. Reina Máxima, Defensora Especial del Secretario General de las Naciones Unidas para las Finanzas Inclusivas para el Desarrollo (UNSGSA), declaraciones en el seminario web del sector privado del Grupo de trabajo de salud financiera de UNSGSA | 26 de marzo de 2021 | 8:30 - 10:00 am EST
Damas y caballeros,

Es un placer unirme a este seminario web. Doy la bienvenida a esta iniciativa de nuestro Grupo de Trabajo de Salud Financiera que lanzamos el año pasado para priorizar y colocar la salud financiera en la agenda de políticas globales. La salud financiera afecta la calidad de vida de las personas, las familias, las comunidades y la economía en general. Este tema se ha vuelto más importante con la crisis de COVID-19 que expone las vulnerabilidades financieras en las economías desarrolladas y en desarrollo.

El Findex del Banco Mundial informa que, en el mundo en desarrollo, solo la mitad de los adultos pueden acceder a una suma global de fondos ante una crisis económica o una emergencia. La encuesta de alfabetización financiera de la OCDE de 2020 incluyó elementos de resiliencia financiera y salud financiera. Descubrieron que casi la mitad de los encuestados, incluidos los de los países de la OCDE, estaban de acuerdo con la afirmación: “No me queda dinero al final del mes”. Además, el rango limitado de puntajes en la muestra puede sugerir que el estrés y las preocupaciones financieras son una preocupación a nivel mundial, incluso en las economías de altos ingresos. Las personas en todas partes carecen de resiliencia.

Se estima que la pandemia podría empujar a 163 millones de personas a la pobreza extrema. De manera devastadora, desde el inicio de la crisis, ONU Mujeres estima que 47 millones más de mujeres y niñas ya han caído en la pobreza. Ahora, este aumento sin precedentes subraya la importancia de la salud financiera en el contexto de la promoción de la inclusión financiera y la urgencia de que todas las partes interesadas actúen.

Los formuladores de políticas están tomando cada vez más medidas para medir, evaluar y abordar la salud financiera. Sin embargo, estos esfuerzos son insuficientes sin la acción del sector privado, principalmente, pero no exclusivamente, los proveedores de servicios financieros.

La salud financiera de empleados y clientes debe ser fundamental para su negocio. Y, por tanto, un componente importante de su estrategia empresarial. Hay investigaciones que apoyan esto. Un estudio examinó nueve empresas que incorporaron la salud financiera en su estrategia corporativa, frente a las empresas del S&P 500. El grupo superó al S&P 500 con un rendimiento para los accionistas del 150% en comparación con el 14% en el mismo período. También vieron un aumento promedio del 134% en el crecimiento de las ventas en comparación con el 53%.

Los clientes financieramente saludables son más rentables. Pueden pagar sus obligaciones; presentar más oportunidades de venta cruzada; y cuesta menos servir. Los clientes que sienten que sus proveedores financieros se preocupan por su salud financiera tienen cinco veces más probabilidades de comprar productos adicionales más allá de las ofertas básicas. El valor a largo plazo se basa en responder a las necesidades del cliente de una manera que respalde la resiliencia, garantice la lealtad del cliente y aumente el valor compartido. Esto conducirá a mercados expandidos, relevancia institucional y resiliencia en un entorno cada vez más dinámico y competitivo.

Al igual que con los clientes, garantizar la salud financiera de los empleados es una inversión en su recurso más valioso. El estrés financiero grava fuertemente la productividad. Obstaculiza la capacidad cognitiva; por ejemplo, algunos estudios aproximan su impacto a la pérdida de 13 puntos de CI. Y afecta la toma de decisiones, ya que 1 de cada 3 empleados informan que los problemas financieros los distraen en el trabajo.

También existe una fuerte correlación entre la salud financiera y la salud física. Los empleados con alto estrés financiero tienen el doble de probabilidades de reportar problemas de salud en general. Y cuatro veces más probabilidades de sufrir fatiga, dolor de cabeza, depresión u otras dolencias. Por lo tanto, invertir en la salud financiera de los empleados puede impulsar la productividad, mejorar el compromiso y la lealtad de los empleados, así como mejorar la reputación de la empresa.

El viaje hacia la salud financiera adecuada comienza con la medición. Pero es clave hacer las preguntas correctas: ¿Cómo se ve el éxito? ¿Cómo medirá el progreso desde donde se encuentra ahora? Y, ¿cómo utilizará estos conocimientos para tomar decisiones y diseñar mejor los productos? Con las preguntas adecuadas, la tecnología y el acceso a los datos facilitan el análisis de la información.

Abordar la salud financiera requiere un compromiso a largo plazo y una participación seria en todos los niveles de una empresa. La buena noticia es que no partimos de cero. Hay muchos ejemplos, evidencias e incluso herramientas que se pueden utilizar.

Por ejemplo, el Commonwealth Bank of Australia creó un equipo de datos multidisciplinario para recopilar y analizar datos e información de transacciones de una encuesta a clientes de cinco preguntas. Ayudó al banco a comprender mejor a sus clientes y desarrollar soluciones a escala. Una de esas soluciones es un rastreador de objetivos digital que desarrolló el banco y que impulsó al 20% de los no ahorradores a comenzar a ahorrar de manera constante.

Otro buen ejemplo es PayPal, que encuestó la situación financiera de sus trabajadores y utilizó los resultados para diseñar un programa para mejorar la salud financiera de los empleados. El programa incluía primas de salud más bajas, aumentos salariales, opciones de equidad y educación sobre bienestar financiero. Los resultados mostraron que los empleados estaban cuatro veces más comprometidos y tres veces menos propensos a dejar la empresa.

En el futuro, es fundamental elevar la discusión sobre la salud financiera como un tema de vital importancia, especialmente a la luz de la pandemia. Si bien la discusión ha comenzado con las grandes empresas, también debemos considerar hacer de la salud financiera una prioridad entre las pymes, tanto para sus empleados como para sus clientes. Realmente necesitamos compartir nuestra experiencia y conocimiento, y aprender unos de otros.

Creo que este es un grupo muy bueno para empezar y estoy feliz de que todos puedan unirse hoy. Mi mayor deseo es realmente iniciar un movimiento en el que la salud financiera se convierta en un elemento obvio en todos sus esfuerzos diarios. Muchas gracias y espero con ansias toda la discusión.