Yo creo que Charlene se dio cuenta a última hora de que en realidad no quería casarse...
Pero ya era muy tarde para arrepentirse. Cuando una persona se casa con un hijo de vecino se puede arrepentir hasta en el altar mismo. Pero con un royal, no... he ahí el problema.
Las lágrimas de la boda no me parecen de "emoción" sino de desesperación y tristeza.
Pero ya era muy tarde para arrepentirse. Cuando una persona se casa con un hijo de vecino se puede arrepentir hasta en el altar mismo. Pero con un royal, no... he ahí el problema.
Las lágrimas de la boda no me parecen de "emoción" sino de desesperación y tristeza.