La otra reina Sofia

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Victoria Salvador será la Reina emérita, la soberana y la princesa griega

Está en el Palacio de la Zarzuela. Allí, en un espacio que ha hecho suyo, lejos de ojos ajenos, hace su vida Doña Sofía, la Reina emérita. Allí pasa lo días. Es base de operaciones. En 2014 dejó el trono y hoy su actividad se ha reducido considerablemente, incluso llama la atención la escasa actividad que tiene. Sus salidas a actos públicos son menos frecuente cada vez; sin embargo, sigue conservando ese fervor popular que la ha hecho uno de los miembros más queridos de la Familia Real. Sobre la soberana, sobre sus gustos, sus silencios, pocos, muy pocos saben de verdad. Con ella sucede que estamos acostumbrados a verla, pero poco, muy poco sabemos de Doña Sofía. Varias biografías se han encargado de retratarla desde su cuna, cómo fue su vida en Grecia, su relación con sus hermanos, sus estudios, pero quienes la conocen bien aseguran que apenas es una fachada que oculta los sentimientos de una mujer real.

Cuando Juan Carlos Pérez de la Fuente tomó el mando del Teatro Español tenía claro que entre sus objetivos estaba el dedicar un espacio teatral a mujeres que han sido importantes en la historia de España. ¿Por qué no empezar con la soberana, hoy emérita? El encargo al dramaturgo Ignacio García May no se hizo esperar y se decidió que ella fuera la primera mujer de ese ciclo en subir a escena. Distintas obras teatrales sobre la Familia Real –con mejor o peor fortuna– se han podido ver en teatro, pero ninguna que se centre en esta mujer y que la mire de frente, que la deje hablar.

Grandes féminas
El texto, que durará unas tres horas, está programado para verse entre el 31 de mayo y el 26 de junio en la Sala Margarita Xirgu de El Español. Con ella dirá adiós a su corto periodo como director del coliseo Pérez de la Fuente. Con Doña Sofía se inauguraba un capítulo dedicado a las grandes féminas que empieza y acaba con ella. El silencio del coliseo sobre el montaje es total. La selección ha llevado su tiempo y la disyuntiva era entre elegir a una actriz de nombre y cara o a una intérprete menos conocida del gran público pero de incuestionable solidez sobre las tablas. Algunos nombres se apuntaron en su momento, pero no resultaron más que dardos fallidos sobre una diana. Ha habido reuniones del equipo de producción y todo está ya en marcha, pues los ensayos está previsto que comiencen la próxima semana. La tarea de enfrentarse al personaje tenía la dificultad añadida de que estamos ante una mujer que vive y continúa realizando sus actividad, es decir, que el autor y director no puede apelar a la perspectiva histórica. No será esta «Sofía» una biografía al uso ni se desarrollará en un tiempo concreto. Sobre el escenario de El Español se verán escenas, momentos de su vida. Al levantarse el telón vemos a una mujer que está leyendo, abstraida, sola con un libro sobre las manos. En ese momento alguien le comunica que el Rey, Don Juan Carlos, ha muerto, tal y como adelantó LA RAZÓN el pasado mes de diciembre. A partir de ese momento una cascada de recuerdos se agolpan en la cabeza de la soberana, dolores, momentos de felicidad. La noticia será la llama que prenda la mecha de los recuerdos. Por su memoria y por el escenario desfilará su vida. Ella será la soberana emérita y también Sofía, princesa de Grecia, y también una joven estudiante. Y junto a ella un grupo de actores que encarnarán a personajes importantes en su vida con el objetivo, aseguran quienes conocen el texto, «De dar forma al puzzle, a una figura poliédrica de la que apenas sabemos nada». Su madre, su hijo, sus hijas, su querida hermana Irene. Doña Letizia, también. Ellos subirán a escena según el momento con un sentido concreto. Y dentro de esta catarata de recuerdos cobrará especial importancia, por ejemplo, la muerte de su madre, la reina Federica de Hannover, una mujer de enorme importancia en su vida. Todos ellos entran y salen, hablan, dialogan. Y, mientras, ella será la Reina emérita, la soberana, la princesa, la joven griega que vivía con sus padres. Está siempre en escena pero no siempre como Reina. Y los momentos de luz se alternarán con otros menos luminosos, más grises, incluso oscuros. Habrá momentos divertidos y lágrimas también.

Ya lo adelantó el propio García May, que «no se trata de un monólogo al uso, sino de un personaje que también habla por boca de otros, todos ellos encarnados por la misma actriz». La pregunta es quién es esa actriz, quién será Sofía joven, madura, reina esposa y madre.La actriz que dará vida a esta singular mujer es Victoria Salvador, una intérprete bien conocida en los circuitos teatrales valencianos, una mujer de bella sonrisa, ojos verdes y cabello castaño. Su nombre quizá no nos diga demasiado pero su trayectoria es sólida. Licenciada en Arte Dramático por la ESAD (Escuela de Arte Dramático) de Valencia, es diplomada por la Scuola di Teatro Dirett da Giorgio Strehler del Piccolo Teatro de Milán. Empezó a estudiar Filología Hispánica en la Universidad de Valencia y habla castellano, valenciano, francés e italiano.

Excelente crítica
Su experiencia profesional arranca en 1984 con una versión de «El enfermo imaginario», de Moliere, dirigida por Carles Alfaro. A ella le seguiría «Hotel temporal», de Rafael Calatayud con La Pavana, y que recibió el premio de la Diputación de Valencia. Su trayectoria ha estado ligada a este director y actor. Precisamente con él ha girado por España (además de la Comunidad Valenciana, la obra se ha visto en Málaga o Palma de Mallorca, entre otras ciudades) con «Una hora y media de retraso», de Gerald Sibleyras, con la que celebrará el 30º aniversario de la compañía La Pavana con la que concluyó gira el pasado 10 de abril, una pieza que habla de la crisis de una pareja y que ha recibido excelentes críticas, aunque es con «Naggi i Nell» con la que opta al galardón como mejor actriz que otorga la AAPV (Asociación de Actores y Actrices Profesionales de Valencia) y que se entregarán el próximo mes de mayo. Con La Pavana ha trabajo, además, en «Hotel temporal» (1985), «Pánico contenido» (1993), «Hedda Gabler» (2004), «Bebé» (2006), «Una jornada particular» (2011).

La obra de García May, uno de los dramaturgos más notables de nuestra escena teatral, trata de poner en primer plano al personaje que hay detrás, a la mujer que no vemos y en ese sentido guarda cierta relación con el filme «The Queen», según quienes conocen la ejecución del proyecto, uno de los más esperados, sin duda de la temporada teatral. Sobre la escena van a aflorar los sentimientos de una mujer, pero no de una manera gratuita sino con un sentido y con un porqué. Faltará saber si, gran aficionada como es la soberana emérita a la cultura, tendrá curiosidad por ver cómo han sido algunos de los momentos más relevantes de su vida sobre las tablas. No sería de extrañar que acudiera como una espectadora más al El Español. «Sofía» es la letra pequeña de una Reina a la que todos creemos conocer y que realmente muy pocos conocen.
 
Ni idea de quien esta actriz, si alguien sabe mas que lo diga.
 
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