LA ORDEN ‘DISCRETA’ PROTEGIDA POR EL REY JUAN CARLOS.

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El Mundo Orbyt.

POR JAIME LÁZARO

01/05/2016

LA ORDEN ‘DISCRETA’ PROTEGIDA POR EL REY JUAN CARLOS
Son 350 caballeros en todo el mundo, sus símbolos son los mismos que la bebida de moda Jägermeister, se reúnen para cazar desde el siglo XVII… El que fuera gran maestre de San Huberto hasta 2013, un archiduque austriaco, cuenta por vez primera quiénes son y su vinculación con el juez “azote” de Obama que apareció muerto en un rancho de Texas. “No somos una organización secreta”, se defiende

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Cuando el pasado 13 de febrero apareció muerto Antonin Scalia, juez conservador de la Corte Suprema de EEUU, saltaron todas las alarmas: su fallecimiento podía suponer el cambio de rumbo de la política estadounidense durante los próximos años. Demócratas y republicanos tomaron posiciones instantes después de que saltara la noticia. Todo se precipitó. Enseguida se supo que se encontraba en un lujoso rancho tejano. Pero también que el magistrado, de 79 años, no estaba allí de relax. La ¿extraña? muerte del que fuera azote de las políticas más progresistas de Obama ocurrió en el transcurso de una cacería organizada por la Orden Internacional de San Huberto (IOSH, en sus siglas en inglés). Una «discreta» hermandad que hunde sus raíces en la Austria Imperial del siglo XVII, cuyo Protector mundial es el Rey Juan Carlos I y de la que a penas se conocen datos.

¿Qué es y quiénes forman la Orden de San Huberto, cuyo escudo, con un ciervo y una cruz, es la marca de una de las bebidas alemanas más de moda, Jägermeister? Quien fuera Gran Maestre de la IOSH desde 1991 hasta 2013, que se presenta como Su Alteza Imperial y Real, el Archiduque Andrés Salvador de Habsburgo-Lorena y Salm-Salm, nos hace de cicerone para adentrarnos en el pasado y el presente de San Huberto. Es la primera vez que un miembro habla para un medio. Y no sólo de la muerte de Scalia. «No somos una organización secreta, tan sólo somos discretos. Una más de las tantas ONG, con unos estatutos y una constitución por los cuales nos regimos. No nos gusta estar en la palestra como a los políticos», cuenta a Crónica quien es también príncipe de la Toscana, de Hungría y de Baviera. «Conozco bien el trasfondo de la historia [la muerte del juez Scalia]», relata desde su castillo austriaco, recién llegado de Estados Unidos, donde ha sido informado en primera persona de los hechos.

LOS HECHOS

Aquel sábado por la mañana, amaneció como una jornada más de caza en Cibola Creek, el lujoso rancho de 12.000 hectáreas con resort de lujo frecuentado por actores de Hollywood y grandes fortunas. No en vano, no era la primera vez que los miembros de San Huberto elegían este destino, entre ellos Andrés Salvador de Austria. En 2010 los periódicos locales recogían con detalle el despliegue de jets privados que habían transportado a personalidades llegadas desde EEUU, México y Europa; los exquisitos menús tras las batidas de perdices y faisanes, incluso de la ropa «al viejo modo europeo» utilizada para los ojeos.

A los compañeros de armas del magistrado les extrañó que no apareciera a la hora del desayuno. Solía ser extremadamente puntual en los almuerzos y las cenas de gala que se celebraban después de la caza. John Poindexter, el multimillonario dueño de Cibola, se dirigió a la habitación de Antonin Scalia, donde descubriría el cuerpo sin vida de su amigo: «Encontramos a Scalia con una almohada sobre su cabeza y la ropa de cama intacta», declaró a la prensa. Comentario que cobraría más fuerza cuando Donad Trump se hizo eco de él en una entrevista.

Con el paso de las horas se iban conociendo nuevos datos. Se supo que el levantamiento del cadáver se había hecho vía telefónica, sin la asistencia de la juez Guevara, que era quien estaba de guardia. Esta actuación puede parecer extraña, pero es legal en el estado de Texas. El nerviosismo que suponía ser el centro de los comentarios de la prensa y la clase política estadounidense desembocó en una cascada de desmentidos y rectificaciones, comenzando por la propia jueza, que primero dijo que había sido un ataque al corazón y después una muerte natural. El dueño del hotel también cambió su versión y afirmó a la CNN que había sido un malentendido y que lo que él había dicho es que la almohada estaba entre el cabecero y la cabeza del desafortunado Scalia. Ante la confusión, muchas voces se levantaron para pedir una autopsia que confirmara la ausencia de violencia en la muerte de Scalia, pero la numerosa familia del magistrado católico —nueve hijos y 33 nietos— se negó en rotundo, pues querían que sus restos regresaran a su Virginia natal para ser enterrado cuanto antes.

La versión del archiduque, alejada de conspiraciones, coincide con la de la familia Scalia: «Texas es un estado muy grande; el rancho Cibolo, que conozco bien, está muy al sur. Llegar a un sitio tan remoto es un gran esfuerzo físico y el señor Scalia era mayor y tenía problemas coronarios. Ha muerto allí por casualidad. Sí que había miembros presentes en la cacería pero él no perteneció nunca a la Orden». El Gran Maestre Emérito nunca conoció al magistrado, pero admira su firmeza: «Scalia tenía un elevado sentido del honor. Profundizaba mucho en sus argumentos, lo cual es destacable. Tenía posturas maduras y de relieve, me recuerda al rey Balduino de los belgas, cuando se aprobó el aborto y renunció momentáneamente para no tener que rubricar la ley. Hoy en día las personas que defienden una profunda postura moral resultan incómodas».

Y es que el fallecimiento del que fuera azote de Obama dejaba empatados a conservadores y progresistas en el más alto tribunal estadounidense, que tiene la última palabra en cuestiones como el aborto, el derecho a sufragio de los inmigrantes o el matrimonio homosexual, a los que el magistrado se oponía frontalmente y cuyo voto inclinaba la balanza del lado conservador. A mediados de marzo el presidente norteamericano anunciaba que designaría al sucesor de Scalia en pocas semanas, a lo que se niegan los republicanos, que creen que hay que esperar a que se celebren elecciones en noviembre para tomar una decisión tan trascendente.

La historia de la Venerable Orden de San Huberto trasciende en mucho la política interna de EEUU. Nació lejos de allí, en Europa, auspiciada por el conde Anton von Spork en 1695 —con San Huberto como patrón—, tras un viaje a Francia, donde se inició en tradiciones venatorias mucho más refinadas y con elementos culturales. El conde quiso trasladar estas costumbres a sus dominios y al resto del Imperio Austro-Húngaro. Deum diligite, animalia diligentes, «Honra a Dios, honrando a sus criaturas», reza su divisa.

PIONEROS DEL ECOLOGISMO

Los principios de los caballeros deben mostrar un total respeto por el medio ambiente, exaltando los valores de la vida en armonía con la naturaleza y considerando la caza como uno de los motores de la evolución humana. «Para nosotros la caza es un reto contra la naturaleza, ver quién es más inteligente: el animal que conoce el entorno o el cazador que conoce los vientos, que sabe evaluar la situación y cobrar la pieza», cuenta el archiduque. «Nosotros, al igual que los inuits, no cazamos; son los animales los que se ofrecen al cazador como sacrificio».

La Orden llevó una existencia pacífica hasta que la Alemania nazi anexionó Austria en 1938, año en el que fue disuelta, como el resto de asociaciones. La web de la hermandad cuenta cómo Hermann Göring, lugarteniente de Hitler y presidente de la Asociación de Cazadores del III Reich, intentó ser caballero infructuosamente, de ahí su prohibición y el asesinato del Gran Maestre y sus Senescales. «El deseo de Göring era reunir 300.000 hectáreas en Austria como su coto de caza privado. Las expropiaciones de los israelíes no dieron para tanto como él anhelaba, Austria está muy dividida en parcelas pequeñas. Que intentara ingresar es más fruto de la leyenda, en mi opinión», apostilla el aristócrata.

En 1950, el recién llegado canciller Leopold Figl quería premiar a los aliados que habían respetado el patrimonio cultural austriaco. Al estar prohibidas todas la órdenes y las condecoraciones tradicionales austriacas, Figl reactivó la orden del conde Spork con tal fin, que «tiene que ver con el Imperio Austro-Húngaro pero no con la Familia Imperial», señala quien ocupa el número 48 en el orden sucesorio al trono. La IOSH también ayudó a paliar el hambre de la población en aquellos años duros: fueron los únicos a los que se les permitió el uso de armas y gracias a la caza mucha gente pudo obtener alimento.

«La palabra elitista no la acepto. El conocimiento del respeto a la naturaleza en los años 50 no estaba en boca de nadie, era un grupo pequeño que entendió que la naturaleza tenía una limitaciones y había que protegerla. Es elitista en el sentido de los conocimientos, no de separarse del resto», defiende el archiduque. No da nombres de los integrantes, pero sí revela que son unos 350 miembros a nivel mundial, vinculados a profesiones liberales: abogados, banqueros, propietarios de fincas, empleados de seguros. No sólo aristócratas. Y son ellos quienes sostienen económicamente a la Orden. Andrés Salvador de Austria ingresó en 1985 y en 1991 fue elegido Gran Maestre. Durante su mandato, San Huberto se activa en países de lengua latina. El ingreso de un nuevo miembro viene respaldado por dos caballeros. Tras un periodo de prueba, son investidos en una solemne ceremonia que tiene lugar en enclaves como El Escorial o la Catedral de Granada. Internacionalmente se dividen en Grandes Prioratos: Portugal, México, Italia, Luxemburgo, Escocia, Estados Unidos y España.

Cuando el archiduque fue nombrado Gran Maestre, invitó al rey Juan Carlos, gran cazador, para que fuera Protector de la Orden, un puesto sólo representativo que antiguamente siempre desempeñaba un soberano o el papa, y que daba respaldo a las ordenes. Su majestad, que todavía desempeña el cargo, aceptó de buen grado, aunque no participa en las ceremonias: «No le hemos dado la lata con ninguna de nuestras actividades», bromea, «pero sí que le hemos dado grandes alegrías en cuestiones de caza».

Además del rey emérito Juan Carlos, Crónica ha sabido que hay y ha habido otros españoles en San Huberto, entre ellos su primo el fallecido Carlos de Borbón-Dos Sicilias, Ma- nuel Gil de Santibáñez (Gran Prior en España) o Antonio Sánchez de León y Cotoner.

«Ha sido mucha la tarea que hemos realizado en estos años y estoy muy orgulloso de la gente a la que he podido conocer. Algunos consideran a San Huberto como los precursores del ecologismo y el conservacionismo», comenta orgulloso de sus logros.

La IOSH recopiló los conocimientos cinegéticos de cada zona: «En España tradicionalmente no se caza con nieve porque es darle ventaja al hombre, mientras que en Austria se caza con la nieve para poder encontrar las reses. Uno no llega y le pega un tiro a un animal por el placer de matar, tiene que haber una motivación más elevada, y todos estos estudios se han plasmado en casi una veintena de libros», señala.

¿Y sobre el emblema de la Orden y el licor Jägermeister? «No se sabe quién fue el autor del símbolo [el ciervo blanco con la cruz entre las astas], pero la bebida no tiene nada que ver con la Orden. Cualquiera pudo haberlo usado con valor crematístico», aclara resignado ante «el sensacionalismo», dice, del que han sido objeto en los últimos meses.

m
 
Vamos, algo así como "La Escopeta Nacional" pero en interneishonal. Se hacen favores entre ellos y van llenando sus cajitas de galletas. Luego se tiran al monte a matar animales, pero nada de pegar tiros a lo loco, sino con "motivaciones elevadas" (citando al fulano del artículo). Me pregunto cuánto les cobra JC por poner su nombre.
 
Negocios y 'relaciones' a golpe de escopeta
Gema Fernández

Soitu. es 17 de Febrero de 2009
  • Cazando suelen establecerse contactos, estrecharse relaciones o cerrarse negocios
  • A falta de heráldica, muchos poderosos se lanzaron al monte "a completar su carrera"
  • La caza es el segundo deporte con más personas federadas en España después del fútbol
http://www.unidadcivicaporlarepublica.es/opinion 2009/negocios y relaciones.htm
 
Pioneros del ecologismo, matando animales...???
En que quedamos?... se respeta la vida y la naturaleza o no...???
Eso lo dicen todos los cazadores. Es habitual que se declaren amantes y protectores de la naturaleza.
 
Eso lo dicen todos los cazadores. Es habitual que se declaren amantes y protectores de la naturaleza.

Pero, desde mi punto de vista, si uno es amante y protector de la naturaleza, también es amante y protector de todos los seres vivos que habitan en ella, incluídos los animales que matan.
 
JuanCar ya no puede cazar con escopeta ahora caza con los huevos de Casa Lucio.

22/11/2016

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Juan Carlos I vuelve a Casa Lucio
El rey emérito cenó el domingo junto a un grupo de conocidos entre los que estaba la diseñadora Carolina Herrera
Liberado de las obligaciones que tenía como Jefe de Estado, el rey Juan Carlos aprovecha para salir más a menos a comer y a cenar a sus restaurantes preferidos, tanto en distintos lugares de España como incluso en el extranjero. Uno de los que más visita es Casa Lucio, en la Cava Baja de Madrid.

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El rey Juan Carlos saluda al vidente Rappel en Casa Lucio (Madrid).

MonarquiaConfidencial

Este ya típico restaurante del casco histórico de Madrid es uno de los preferidos del rey emérito. Don Juan Carlos comenzó a acudir a comer en los años 70, atraído por su solomillo.

A lo largo de los años incluso ha ido forjando una buena amistad con el dueño, Lucio Blázquez. Juan Carlos I ha asistido a este local en momentos señalados: desde una visita del presidente de Estados Unidos Bill Clinton hasta la “cena homenaje” que le tributaron un año después de abdicar el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y los ex presidentes Felipe González, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero.

Monarquía Confidencial ha podido saber que el padre de Felipe VI ha vuelto recientemente a Casa Lucio. Lo hizo para cenar este pasado domingo por la noche.

Según testigos presenciales, Juan Carlos I tomó asiento en una mesa con varios amigos y conocidos. Entre sus compañeros de mesa estaban la diseñadora venezolana Carolina Herrera y el marido de ésta, Reinaldo Herrera.

El rey emérito se dejó ver con un traje azul oscuro, camisa blanca y corbata azul intenso con puntos azules. Se apoyaba en el bastón que utiliza habitualmente en público, y los presentes aseguran que se movía “bastante bien”. Además, se mostró muy simpático y cariñoso con los comensales y el personal.

En Casa Lucio don Juan Carlos se encontró con el famoso vidente Rappel. Se saludaron y estuvieron charlando un momento: “Estuvo muy amable y simpático, todo un señor”, asegura a MC Rappel

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