Sí, te puede pasar a cualquier edad, pero cuanta más tienes, más posibilidades.
La médica gallega embarazada a los 62 años: «Me siento como una de 30, feliz»
- AutorApple & Eve
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Sí, te puede pasar a cualquier edad, pero cuanta más tienes, más posibilidades.
Cuánto mejor hubiera sido, para la criatura que nacera y la que ya tiene, que el dinero que ha invertido esta "medico" en inseminarse se lo hubiera gastado hace años en un buen psiquiatra.
Y no lo digo con acritud, es que pienso que nadie en su sano juicio se pone a tener hijos a esas edades.
Lo siento por esos niños.
Y no lo digo con acritud, es que pienso que nadie en su sano juicio se pone a tener hijos a esas edades.
Lo siento por esos niños.
D
Deleted member 14019
Guest
podria entender lo del niño que tuvo a los 52, pero este ùltimo ya me suena a capricho o locura, ademàs de egoismo, porque por mucho que ella lo diga nadie le asegura que viva hasta los 90!! me recuerda a otro caso de una mujer que hizo lo mismo y tuvo creo que mellizas y luego de tres años se muriò de un càncer fulminante o algo asi...nadie tiene la vida comprada, lo sè, pero estas cosas a una cierta edad...es como forzar a la naturaleza...
Coincido plenamente con la opinión de @Mrs. Muir. Además en este caso me cuestiono también qué clase de profesional médico es el que realiza tal práctica en el caso de una mujer de 62 años y con la situación familiar que tiene esta señora.
Su caso ha salido a la luz porque antes de ayer se hizo pública la futura paternidad del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, de 55 años. Su pareja es una mujer de 51 años que tiene una hija adolescente.
En La Voz de Galicia hablan del caso de un matrimonio de Foz (Lugo) que hace 17 años volvieron a ser padres con más de 50 años después de perder a su única hija y con tratamiento de fertilidad.
Este caso, a mi parecer, también me parece cuestionable, pero al menos se trata de una pareja unida y sin grandes conflictos, lo cual no sucede con Lina Alvarez.
Lo que me llama la atención en el caso de Lina son detalles que ella misma revela: ha estado inhabilitada profesionalmente (según ella, la enfermedad que le diagnosticaron y que no especifica cuál es, era inexistente), su sueldo embargado por lo menos desde 2008, la narración de su batalla legal por demostrar que la parálisis cerebral de su hijo mayor está originada por múltiples negligencias médicas está repleta de paranoia y conspiraciones ocultas, con su hijo Samuel (10 años) cuenta para que ahora y en un futuro cuide de su hermano mayor discapacitado (hablamos de un niño concebido de la misma manera que la niña que nacerá el mes próximo), a la niña que va a nacer la llamará Lina, como ella y como su difunta madre (según ella, muerta muy joven también por una negligencia médica). Sólo le ha faltado decir que estos niños nacerán para cuidarla a ella y a su hijo mayor.
Me parece una muestra de egoísmo aberrante que la pequeña Lina nacerá como recompensa al sufrimiento de su madre. Y del sufrimiento del hijo mayor no dice nada? Y del padre de su hijo mayor?
Ante sus hechos y sus palabras me planteo el estado de la salud mental de esta mujer y su motivación para ser madre. Desde aquí toda mi solidaridad a los profesionales del hospital Lucus Augusti que tengan que atender al nacimiento de Lina.
A Exiquio, Samuel y a la aún no nacida Lina les deseo una vida feliz y plena y que haya personas buenas y cariñosas que los amen y los cuiden.
Su caso ha salido a la luz porque antes de ayer se hizo pública la futura paternidad del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, de 55 años. Su pareja es una mujer de 51 años que tiene una hija adolescente.
En La Voz de Galicia hablan del caso de un matrimonio de Foz (Lugo) que hace 17 años volvieron a ser padres con más de 50 años después de perder a su única hija y con tratamiento de fertilidad.
Este caso, a mi parecer, también me parece cuestionable, pero al menos se trata de una pareja unida y sin grandes conflictos, lo cual no sucede con Lina Alvarez.
Lo que me llama la atención en el caso de Lina son detalles que ella misma revela: ha estado inhabilitada profesionalmente (según ella, la enfermedad que le diagnosticaron y que no especifica cuál es, era inexistente), su sueldo embargado por lo menos desde 2008, la narración de su batalla legal por demostrar que la parálisis cerebral de su hijo mayor está originada por múltiples negligencias médicas está repleta de paranoia y conspiraciones ocultas, con su hijo Samuel (10 años) cuenta para que ahora y en un futuro cuide de su hermano mayor discapacitado (hablamos de un niño concebido de la misma manera que la niña que nacerá el mes próximo), a la niña que va a nacer la llamará Lina, como ella y como su difunta madre (según ella, muerta muy joven también por una negligencia médica). Sólo le ha faltado decir que estos niños nacerán para cuidarla a ella y a su hijo mayor.
Me parece una muestra de egoísmo aberrante que la pequeña Lina nacerá como recompensa al sufrimiento de su madre. Y del sufrimiento del hijo mayor no dice nada? Y del padre de su hijo mayor?
Ante sus hechos y sus palabras me planteo el estado de la salud mental de esta mujer y su motivación para ser madre. Desde aquí toda mi solidaridad a los profesionales del hospital Lucus Augusti que tengan que atender al nacimiento de Lina.
A Exiquio, Samuel y a la aún no nacida Lina les deseo una vida feliz y plena y que haya personas buenas y cariñosas que los amen y los cuiden.
Copio el contenido de una noticia publicada en La Opinión de A Coruña en 2009. En negrita he resaltado lo que me parecen indicios de paranoia y egocentrismo.
ALBA CRUZ | A CORUÑA "Mi casa, mis cuentas bancarias, la salud de mi hijo... Es mi vida y sólo tengo una, jamás le he hecho daño a nadie. Sólo me he dedicado a trabajar, a estudiar y a cuidar de mis dos niños". Éste es el mensaje que, a través de una pancarta, Lina Álvarez -una médico de Lugo-, quiso lanzar, ayer, frente a la Audiencia Provincial de A Coruña.
"Ahora ya no me callo. Me da igual que los medios de comunicación lo veten porque se van a enterar los políticos uno a uno. De eso me voy a encargar yo", asegura, desesperada, la mujer.
La historia de esta madre coraje comenzó hace ahora 20 años, cuando su hijo mayor, Exiquio, nació con una parálisis cerebral y una minusvalía del 85%, de la cual Lina culpa a los médicos que le practicaron una amniocentesis -una prueba que se realiza en el segundo trimestre de gestación en la cual se extrae una pequeña muestra del líquido amniótico que rodea al feto para analizarla y que sólo se realiza para descartar anomalías, en el caso de que el médico así lo considere oportuno-.
Por si todo esto no fuera suficiente, esta mujer se ha visto envuelta en una cadena de lo que ella considera "estafas y resoluciones judiciales injustas".
"El contratista al que compré el piso me estafó tres millones y medio de las antiguas pesetas, pero como se declaró insolvente, no tuve nada que hacer. Después el banco se quedó con mi piso y 25.000 euros; la abogada que me llevó el caso del piso, con 20.000; me inhabilitaron como médico...", relata indignada
Lina confiesa que lo que peor lleva es el embargo de sus dos cuentas bancarias debido a que una aseguradora le cobra 68.000 euros por un trámite que realizó en el proceso para estudiar la posible negligencia de su hijo, y que le ha costado la retención de su sueldo para pagarlo. "Un niño así supone muchos gastos y me está costando mucho esfuerzo seguir a delante. Necesita cuidados todo el día y me vi obligada a reducir las horas de trabajo de la persona que le atiende mientras yo trabajo porque no podía pagarle", lamenta, y añade. "No entiendo, porque la que tiene que criar a un niño paralítico cerebral soy yo, y no ellos. Me parece increíble que todos cobren y se estén enriqueciendo a costa de la parálisis de mi hijo", denuncia con firmeza.
Lina, separada desde hace 17 años, tiene que hacerse cargo, a sus 55 años, de sus dos hijos, ya que hace tres años tuvo por inseminación in vitro a Samuel, que ella considera como una futura ayuda para poder repartir su carga.
"Lo único que quiero es que me ayuden porque tengo que sacar adelante a mi hijo mayor. Él requiere un cuidado las 24 horas del día y necesita estar en un centro especializado. Yo es por lo que estoy gritando, aunque parece que nadie me escucha. ¡Qué estoy yo sola con dos niños, por Dios!", así de rotunda se muestra esta mujer, que confiesa estar empezando a perder la esperanza. "El poder ciega a las personas. Muchos saben lo que pasa y no hacen nada", concluye.
ALBA CRUZ | A CORUÑA "Mi casa, mis cuentas bancarias, la salud de mi hijo... Es mi vida y sólo tengo una, jamás le he hecho daño a nadie. Sólo me he dedicado a trabajar, a estudiar y a cuidar de mis dos niños". Éste es el mensaje que, a través de una pancarta, Lina Álvarez -una médico de Lugo-, quiso lanzar, ayer, frente a la Audiencia Provincial de A Coruña.
"Ahora ya no me callo. Me da igual que los medios de comunicación lo veten porque se van a enterar los políticos uno a uno. De eso me voy a encargar yo", asegura, desesperada, la mujer.
La historia de esta madre coraje comenzó hace ahora 20 años, cuando su hijo mayor, Exiquio, nació con una parálisis cerebral y una minusvalía del 85%, de la cual Lina culpa a los médicos que le practicaron una amniocentesis -una prueba que se realiza en el segundo trimestre de gestación en la cual se extrae una pequeña muestra del líquido amniótico que rodea al feto para analizarla y que sólo se realiza para descartar anomalías, en el caso de que el médico así lo considere oportuno-.
Por si todo esto no fuera suficiente, esta mujer se ha visto envuelta en una cadena de lo que ella considera "estafas y resoluciones judiciales injustas".
"El contratista al que compré el piso me estafó tres millones y medio de las antiguas pesetas, pero como se declaró insolvente, no tuve nada que hacer. Después el banco se quedó con mi piso y 25.000 euros; la abogada que me llevó el caso del piso, con 20.000; me inhabilitaron como médico...", relata indignada
Lina confiesa que lo que peor lleva es el embargo de sus dos cuentas bancarias debido a que una aseguradora le cobra 68.000 euros por un trámite que realizó en el proceso para estudiar la posible negligencia de su hijo, y que le ha costado la retención de su sueldo para pagarlo. "Un niño así supone muchos gastos y me está costando mucho esfuerzo seguir a delante. Necesita cuidados todo el día y me vi obligada a reducir las horas de trabajo de la persona que le atiende mientras yo trabajo porque no podía pagarle", lamenta, y añade. "No entiendo, porque la que tiene que criar a un niño paralítico cerebral soy yo, y no ellos. Me parece increíble que todos cobren y se estén enriqueciendo a costa de la parálisis de mi hijo", denuncia con firmeza.
Lina, separada desde hace 17 años, tiene que hacerse cargo, a sus 55 años, de sus dos hijos, ya que hace tres años tuvo por inseminación in vitro a Samuel, que ella considera como una futura ayuda para poder repartir su carga.
"Lo único que quiero es que me ayuden porque tengo que sacar adelante a mi hijo mayor. Él requiere un cuidado las 24 horas del día y necesita estar en un centro especializado. Yo es por lo que estoy gritando, aunque parece que nadie me escucha. ¡Qué estoy yo sola con dos niños, por Dios!", así de rotunda se muestra esta mujer, que confiesa estar empezando a perder la esperanza. "El poder ciega a las personas. Muchos saben lo que pasa y no hacen nada", concluye.
Que despropósito...tiene 62 años...se supone problemas económicos???,un hijo paralítico, un muchacho de 10 años que da y dará trabajo mental a la larga y ahora un bebé????
Cuando hacen estos tratamientos debería haber un tope de edad 50 años por decir algo y unos informes psíquicos de un par de de médicos diferentes y externos..
Cuando hacen estos tratamientos debería haber un tope de edad 50 años por decir algo y unos informes psíquicos de un par de de médicos diferentes y externos..
Si es que además toda la narración de esta mujer está repleta de contradicciones, medias verdades e infinidad de disparates.
Qué clase de médico arriesgaría la salud y el futuro de un niño y de una madre de 62 años? Alguien a quien solo le interesa el dinero, con nulos escrúpulos y tal vez con problemas mentales similares a los de esta mujer.
La megalomanía de Lina Alvarez acabará volviéndose en su contra.
Qué clase de médico arriesgaría la salud y el futuro de un niño y de una madre de 62 años? Alguien a quien solo le interesa el dinero, con nulos escrúpulos y tal vez con problemas mentales similares a los de esta mujer.
La megalomanía de Lina Alvarez acabará volviéndose en su contra.
