Lo de no volver a TV1 tras anunciar el desastre, le fastidió mucho. Se moria de ganas de poder entrar en TV1, cuando todos supieran que era la novia del principe. No pudo disfrutar ese placer.
JC en cuanto vio a toda la panda el día de la pedida y a la Insigne braceando como un torero y mandando callar al hijo la cogió por el pescuezo y la encerró en Zarzuela a ver si la desasnaban un poco. Tarea imposible por lo que se ve, pero lo intentaron, entonces le propondrían clases de inglés, de protocolo, de historia de España, una señora de confianza bien educada y acostumbrada que la acompañara en plan amiga y asesora los primeros tiempos, una estilista de verdad no del Cosmopolitan, en fin, todo lo necesario ya que habían aceptado a la virginal novia y tenían que civilizarla. Como para haberla dejado suelta a su aire y con un micro delante, Dios, no me quiero ni imaginar el panorama!!! El mismo que la metio en TVE la sacó a toda pastilla.