Jaime Peñafiel: "Juan Carlos I fue el mejor rey que ha habido en España" Libro “Los reyes también lloran' (Grijalbo)

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Jaime Peñafiel: "Juan Carlos I fue el mejor rey que ha habido en España"​

Viernes, 5 marzo 2021 - 01:23
Jaime Peñafiel (Granada, 1932).

Jaime Peñafiel (Granada, 1932). ÁNGEL NAVARRETE
Jaime Peñafiel (Granada, 1932), vuelve a la carga con'Los reyes también lloran' (Grijalbo), un libro centrado en la figura de Don Juan Carlos, el Rey Padre, hoy ensombrecida por oscuros 'affaires' monetarios que han desembocado en su 'exilio' en Emiratos Árabes Unidos. Un ensayo sobre las circunstancias que han llevado al padre de Felipe VI a ser como es y una anticipación del futuro de nuestro país, que Peñafiel ve claramente como republicano.
 
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Actualizado Viernes, 5 marzo 2021 - 01:23
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Jaime Peñafiel (Granada, 1932), vuelve a la carga con'Los reyes también lloran' (Grijalbo), un libro centrado en la figura de Don Juan Carlos, el Rey Padre, hoy ensombrecida por oscuros 'affaires' monetarios que han desembocado en su 'exilio' en Emiratos Árabes Unidos. Un ensayo sobre las circunstancias que han llevado al padre de Felipe VI a ser como es y una anticipación del futuro de nuestro país, que Peñafiel ve claramente como republicano.

"La democracia y la monarquía están en contradicción. No se sabe que va a durar la monarquía aquí, pero si Pedro Sánchez y Pablo Iglesias lo quieren al final esto acabará en República. Tiempo al tiempo", vaticina.

"Tenía mucho más apoyo Don Juan Carlos, que era una persona más entrañable y con más empatía, que Felipe, que no tiene ninguna", dice sobre el actual monarca. Y explica el comportamiento de su progenitor: "Él lo ha pasado mal y de ahí viene la pasión por no querer ser pobre, como lo era su padre y como lo fue él mismo. Siempre ha vivido mal, escaso de dinero, escaso de cariño"

"Hay una cosa que me sorprende ahora, con motivo del exilio", prosigue, "y es que no ha habido nadie que le haya ofrecido ni una casa ni un palacio ni una finca. En cambio, cuando él vino a España con 11 años, los duques de Montellano, que tenían el mejor palacio que había en la Castellana, se lo cedieron. Hace poco, antes de morir Fernando Falcó, me contaba: 'Mis padres se lo cedieron todo a aquel niño, un palacio con 15 servicios y nosotros nos fuimos a un piso'. Pero ahora, ni el duque de Alba, ni los grandes títulos de la aristocracia. Nadie. ¿Dónde va a vivir ya?"

¿Volverá Juan Carlos? "Es que tiene que volver. Es que expulsar un español de su país es ilegal. ¿Qué impide que vuelva? Felipe lloraría lágrimas de sangre si su padre muriera en el exilio y tuvieran que repatriar el cadáver. Sería una maldición". E insiste: "Volverá. Le guste o no le guste a Sánchez, le guste o no le guste a Iglesias, le guste o no le guste a su hijo, le guste o no le guste a Letizia... Volverá porque tiene que volver".
Y se explica: "Don Juan Carlos no ha cometido ningún delito fiscal como Messi o como Ronaldo o como Neymar. Aceptar donaciones no es un delito. Aceptar comisiones tampoco lo es. Lo es no declararlo. ¿Qué es lo que ha hecho? Lo está regularizando para regresar. El último ingreso de dinero que ha hecho a la Hacienda Pública de cuatro millones y pico es por la utilización de aviones privados. ¿Y la utilización de aviones privados por Pedro Sánchez? ¿Tendrá también que pagar por ir a la boda de su cuñado y a La Mareta cuando va de vacaciones?". No hay, subraya, "una causa pendiente contra él. Hay gente que está empeñada en que sí, pero la justicia todavía no le ha llamado. Con lo cual no hay nada que le impida que vuelva".

LÁGRIMAS REALES​

El libro arranca con el funeral en 1993 de Don Juan, Conde de Barcelona, en el que los españoles vieron a Juan Carlos I llorar por su padre. Por la pérdida de aquel hombre que renunció al trono, pero también por más cosas: "Hacía balance de cuál había sido su vida con su padre. Por todo lo que él le había hecho sufrir. Por la traición cuando aceptó ser el heredero de Franco por encima de su padre. Pero éste también le hizo sufrir muchísimo. Y cuando mató a su hermano, ya ni te cuento. Al día siguiente le mandó a la Academia General Militar". Durante el franquismo, además, "le insultaban. En mi tierra, Granada, le tiraban tomates y huevos".

"Pero él fue educado desde el pueblo y ha tenido una empatía muy grande. Y después, un gran olfato político. Él se llevaba muy bien con la izquierda, mejor que con la derecha. Mejor con Felipe González que con Aznar", explica Peñafiel.

Más datos: "Cuando el rey Felipe rindió homenaje y mencionó a su padre en el aniversario del 23-F, Don Juan Carlos estaba en el exilio. Y cuando éste juró de rodillas ante Franco, su padre estaba en el exilio. Son vidas paralelas en muchos aspectos".

Éstas y otras muchas experiencias a lo largo de cinco décadas siguiendo la vida de la familia real española le llevan a otra frase lapidaria: "Este país ha demostrado que no es monárquico. Sí que fue 'juancarlista'".

Y, como en una tragedia 'shakespeariana', apunta los nudos del drama. "Felipe ha sufrido muchísimo; piensa que es el único hijo que se queda con unos padres mal avenidos", formula. Y luego se pregunta: "Lo que nunca he entendido, y ahora menos que nunca, es cómo doña Sofía no se ha divorciado. Cuando el divorcio es algo normal para casi todos los españoles: su hija está divorciada, su nuera es divorciada. ¿Por qué aguanta?".

Todos los problemas, sostiene Peñafiel, están interconectados. Por ejemplo: "Felipe cometió un error cuando dijo que renunciaba a la herencia de su padre. Pero hay un artículo del Código Civi. el 911, que dice que nadie puede aceptar o rechazar una herencia sin que el dueño ese dinero viva. Está prohibido, es ilegal. Pero Felipe renuncia y le retira la asignación que su padre recibía: la mayor crueldad del mundo".

Antes de eso, "Don Juan Carlos había puesto a Letizia en la proa y lo mejor que decía de ella es que es 'una chica muy lista', con toda la carga peyorativa que tiene" esa expresión. "Nunca ha habido empatía entre ellos", dice sobre padre e hijo. Éste "siempre ha apoyado a su madre y su madre le ha apoyado a él como compensación".

EL VERDADERO DIQUE FRENTE AL 23-F​

Además de todos estos asuntos, el libro se acerca a la figura de Sabino Fernández Campo, secretario y jefe de la casa del Rey, por quien Peñafiel sintió (y siente todavía) una gran admiración. "No fue el Rey quien salvó el 23-F, sino Sabino Fernández Campo", proclama. "Después del discurso, el rey se desmorona, se pone a llorar y le dice a Sabino: '¿Te habrás equivocado?' Y Sabino: 'Si es así, mis compañeros me fusilarán al amanecer'". Una sinceridad que le terminó trayendo problemas. "Como en aquella ocasión que el Rey había estado esquiando en los Alpes y vino en un avión medicalizado, le bajaron en camilla.Y Sabino le espetó: 'Señor: un rey solamente puede volver así de una guerra'. Decía las verdades y al final era incómodo para Juan Carlos".

Que era lo contrario a lo que estaba acostumbrado el monarca. "La prensa española ha sido muy cortesana y muy cómplice, y yo me incluyo también. Todos sabíamos todo", reconoce el periodista. Pero es que la 'campechanía' tiraba mucho, apunta. "Felipe no tiene carisma ni empatía. Es imposible. Además, se ha echado en brazos de Sánchez para protegerse cuando no se da cuenta de que Sánchez se carga así a la monarquía. Felipe VI es un apéndice de Pedro Sánchez", deja caer.

"Juan Carlos I fue el mejor rey que ha habido en la Historia de España. Hasta que lo estropeó. La edad, las enfermedades, las mujeres..." enumera. "Las mujeres siempre han sido terriblemente perniciosas para los Borbones. Al menos Juan Carlos no tiene hijos fuera del matrimonio, como su abuelo. Pero la alemana es la que le ha hundido. Las fotos haciendo la barbacoa son demoledoras". Un furor que, apunta el autor del libro es una condena de sangre. "Mira, la reina Victoria Eugenia me concedió una entrevista antes de morir y me dijo: 'Son genéticamente Borbones, no nos olvidemos'. Y Juan Carlos es un Borbón genéticamente puro". No así su sucesor: "Felipe engaña a Letizia y ella lo capa, no le permitiría una infidelidad así".

¿Y qué le queda por contar a Jaime Peñafiel? "Tengo un mueble lleno de de todo, de cintas, fotos, cartas... Le he dicho a Carmen, mi mujer: 'El día que me muera, quémalo'. Y ella: 'No, quémalo tú'", rememora él. "Yo tengo mucho respeto por la intimidad, así como pienso que los personajes públicos no tienen vida privada, ni mucho menos, pero vida íntima sí. ¿Dónde la coloco? Digamos que en las relaciones sexuales, en la puerta del dormitorio que yo nunca traspaso... aunque haya traspasado muchas veces, pero nunca lo voy a contar". Y concluye: "Es que estoy en una edad muy peligrosa, de decir todas las cosas. Pero valgo más por lo que callo que por lo que cuento". Conciliador, remata: "Soy pacífico no, me meto con nadie, pero soy crítico con todo el mundo".
 
Qué ambivalencia, 1 dice: "Felipe lloraría lágrimas de sangre si su padre muriera en el exilio" y luego dice"volverá le guste o no le guste a su hijo" no entender
 
Sobre el escritor... pues que chochea. Pertenece a los cortesano del reino.... sabía lo que ocurría y callaba.
 
Que mal me suenan esos dos tiempos verbales en la misma frase...
 
AMBERS dijo:
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Jaime Peñafiel (Granada, 1932), vuelve a la carga con'Los reyes también lloran' (Grijalbo), un libro centrado en la figura de Don Juan Carlos, el Rey Padre, hoy ensombrecida por oscuros 'affaires' monetarios que han desembocado en su 'exilio' en Emiratos Árabes Unidos. Un ensayo sobre las circunstancias que han llevado al padre de Felipe VI a ser como es y una anticipación del futuro de nuestro país, que Peñafiel ve claramente como republicano.

"La democracia y la monarquía están en contradicción. No se sabe que va a durar la monarquía aquí, pero si Pedro Sánchez y Pablo Iglesias lo quieren al final esto acabará en República. Tiempo al tiempo", vaticina.

"Tenía mucho más apoyo Don Juan Carlos, que era una persona más entrañable y con más empatía, que Felipe, que no tiene ninguna", dice sobre el actual monarca. Y explica el comportamiento de su progenitor: "Él lo ha pasado mal y de ahí viene la pasión por no querer ser pobre, como lo era su padre y como lo fue él mismo. Siempre ha vivido mal, escaso de dinero, escaso de cariño"

"Hay una cosa que me sorprende ahora, con motivo del exilio", prosigue, "y es que no ha habido nadie que le haya ofrecido ni una casa ni un palacio ni una finca. En cambio, cuando él vino a España con 11 años, los duques de Montellano, que tenían el mejor palacio que había en la Castellana, se lo cedieron. Hace poco, antes de morir Fernando Falcó, me contaba: 'Mis padres se lo cedieron todo a aquel niño, un palacio con 15 servicios y nosotros nos fuimos a un piso'. Pero ahora, ni el duque de Alba, ni los grandes títulos de la aristocracia. Nadie. ¿Dónde va a vivir ya?"

¿Volverá Juan Carlos? "Es que tiene que volver. Es que expulsar un español de su país es ilegal. ¿Qué impide que vuelva? Felipe lloraría lágrimas de sangre si su padre muriera en el exilio y tuvieran que repatriar el cadáver. Sería una maldición". E insiste: "Volverá. Le guste o no le guste a Sánchez, le guste o no le guste a Iglesias, le guste o no le guste a su hijo, le guste o no le guste a Letizia... Volverá porque tiene que volver".
Y se explica: "Don Juan Carlos no ha cometido ningún delito fiscal como Messi o como Ronaldo o como Neymar. Aceptar donaciones no es un delito. Aceptar comisiones tampoco lo es. Lo es no declararlo. ¿Qué es lo que ha hecho? Lo está regularizando para regresar. El último ingreso de dinero que ha hecho a la Hacienda Pública de cuatro millones y pico es por la utilización de aviones privados. ¿Y la utilización de aviones privados por Pedro Sánchez? ¿Tendrá también que pagar por ir a la boda de su cuñado y a La Mareta cuando va de vacaciones?". No hay, subraya, "una causa pendiente contra él. Hay gente que está empeñada en que sí, pero la justicia todavía no le ha llamado. Con lo cual no hay nada que le impida que vuelva".

LÁGRIMAS REALES​

El libro arranca con el funeral en 1993 de Don Juan, Conde de Barcelona, en el que los españoles vieron a Juan Carlos I llorar por su padre. Por la pérdida de aquel hombre que renunció al trono, pero también por más cosas: "Hacía balance de cuál había sido su vida con su padre. Por todo lo que él le había hecho sufrir. Por la traición cuando aceptó ser el heredero de Franco por encima de su padre. Pero éste también le hizo sufrir muchísimo. Y cuando mató a su hermano, ya ni te cuento. Al día siguiente le mandó a la Academia General Militar". Durante el franquismo, además, "le insultaban. En mi tierra, Granada, le tiraban tomates y huevos".

"Pero él fue educado desde el pueblo y ha tenido una empatía muy grande. Y después, un gran olfato político. Él se llevaba muy bien con la izquierda, mejor que con la derecha. Mejor con Felipe González que con Aznar", explica Peñafiel.

Más datos: "Cuando el rey Felipe rindió homenaje y mencionó a su padre en el aniversario del 23-F, Don Juan Carlos estaba en el exilio. Y cuando éste juró de rodillas ante Franco, su padre estaba en el exilio. Son vidas paralelas en muchos aspectos".

Éstas y otras muchas experiencias a lo largo de cinco décadas siguiendo la vida de la familia real española le llevan a otra frase lapidaria: "Este país ha demostrado que no es monárquico. Sí que fue 'juancarlista'".

Y, como en una tragedia 'shakespeariana', apunta los nudos del drama. "Felipe ha sufrido muchísimo; piensa que es el único hijo que se queda con unos padres mal avenidos", formula. Y luego se pregunta: "Lo que nunca he entendido, y ahora menos que nunca, es cómo doña Sofía no se ha divorciado. Cuando el divorcio es algo normal para casi todos los españoles: su hija está divorciada, su nuera es divorciada. ¿Por qué aguanta?".

Todos los problemas, sostiene Peñafiel, están interconectados. Por ejemplo: "Felipe cometió un error cuando dijo que renunciaba a la herencia de su padre. Pero hay un artículo del Código Civi. el 911, que dice que nadie puede aceptar o rechazar una herencia sin que el dueño ese dinero viva. Está prohibido, es ilegal. Pero Felipe renuncia y le retira la asignación que su padre recibía: la mayor crueldad del mundo".

Antes de eso, "Don Juan Carlos había puesto a Letizia en la proa y lo mejor que decía de ella es que es 'una chica muy lista', con toda la carga peyorativa que tiene" esa expresión. "Nunca ha habido empatía entre ellos", dice sobre padre e hijo. Éste "siempre ha apoyado a su madre y su madre le ha apoyado a él como compensación".

EL VERDADERO DIQUE FRENTE AL 23-F​

Además de todos estos asuntos, el libro se acerca a la figura de Sabino Fernández Campo, secretario y jefe de la casa del Rey, por quien Peñafiel sintió (y siente todavía) una gran admiración. "No fue el Rey quien salvó el 23-F, sino Sabino Fernández Campo", proclama. "Después del discurso, el rey se desmorona, se pone a llorar y le dice a Sabino: '¿Te habrás equivocado?' Y Sabino: 'Si es así, mis compañeros me fusilarán al amanecer'". Una sinceridad que le terminó trayendo problemas. "Como en aquella ocasión que el Rey había estado esquiando en los Alpes y vino en un avión medicalizado, le bajaron en camilla.Y Sabino le espetó: 'Señor: un rey solamente puede volver así de una guerra'. Decía las verdades y al final era incómodo para Juan Carlos".

Que era lo contrario a lo que estaba acostumbrado el monarca. "La prensa española ha sido muy cortesana y muy cómplice, y yo me incluyo también. Todos sabíamos todo", reconoce el periodista. Pero es que la 'campechanía' tiraba mucho, apunta. "Felipe no tiene carisma ni empatía. Es imposible. Además, se ha echado en brazos de Sánchez para protegerse cuando no se da cuenta de que Sánchez se carga así a la monarquía. Felipe VI es un apéndice de Pedro Sánchez", deja caer.

"Juan Carlos I fue el mejor rey que ha habido en la Historia de España. Hasta que lo estropeó. La edad, las enfermedades, las mujeres..." enumera. "Las mujeres siempre han sido terriblemente perniciosas para los Borbones. Al menos Juan Carlos no tiene hijos fuera del matrimonio, como su abuelo. Pero la alemana es la que le ha hundido. Las fotos haciendo la barbacoa son demoledoras". Un furor que, apunta el autor del libro es una condena de sangre. "Mira, la reina Victoria Eugenia me concedió una entrevista antes de morir y me dijo: 'Son genéticamente Borbones, no nos olvidemos'. Y Juan Carlos es un Borbón genéticamente puro". No así su sucesor: "Felipe engaña a Letizia y ella lo capa, no le permitiría una infidelidad así".

¿Y qué le queda por contar a Jaime Peñafiel? "Tengo un mueble lleno de de todo, de cintas, fotos, cartas... Le he dicho a Carmen, mi mujer: 'El día que me muera, quémalo'. Y ella: 'No, quémalo tú'", rememora él. "Yo tengo mucho respeto por la intimidad, así como pienso que los personajes públicos no tienen vida privada, ni mucho menos, pero vida íntima sí. ¿Dónde la coloco? Digamos que en las relaciones sexuales, en la puerta del dormitorio que yo nunca traspaso... aunque haya traspasado muchas veces, pero nunca lo voy a contar". Y concluye: "Es que estoy en una edad muy peligrosa, de decir todas las cosas. Pero valgo más por lo que callo que por lo que cuento". Conciliador, remata: "Soy pacífico no, me meto con nadie, pero soy crítico con todo el mundo".
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Y dice que es republicano :ROFLMAO::ROFLMAO::ROFLMAO::ROFLMAO::ROFLMAO::ROFLMAO::ROFLMAO:Para desviar. A veces me da por pensar que su gran amor fué el Juan Car porque menudo republicano besandole los pies y excusandole de todo
 
Ha hecho mucho.
Para eso se le pagaba para que hiciese mucho.
Acaso no es su trabajo?
No es su obligación?
Si no cual es su función.?

Me da la sensación que es mucho más lo que reciben que lo que aportan.
No tiene nada que ver con el libro,
.Hago el comentario porque acabo de ver a Peñafiel en cuatro diciendo"ha hecho mucho"
 
Última edición:
emma_1971 dijo:
Sobre el escritor... pues que chochea. Pertenece a los cortesano del reino.... sabía lo que ocurría y callaba.
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Pues como todos, pero¿ quien podía decir algo?
Que los eméritos estaban separados lo dijo él.
Que el Yayo cobraba comisiones por el petróleo lo dijo F.González por la tele, gobernando el.
Que no habían regularizado el dinero de Suiza de la herencia de Don Juan también se dijo.
Lo de los millones de los árabes lo dijo Correina.
Lo de las amigas entrañables hace mucho que se sabe.
Es verdad que hace unos años se callaba todo, pero ya se cuenta todo.
Vaya familia.
 
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