Sin ánimo de polemizar, a su padre ETA lo tuvo a tiro y siempre fue recibido por los lehendakaris.
Juan Carlos, siendo lo que es, jamás se puso del lado de una parte del país (se presuponía de cual estaba) pero nunca hizo manifestaciones en contra de los partidos nacionalistas.
El discurso fue una mala decisión. No estoy diciendo que los nacionalistas lo hicieran bien, pero ahora hay una parte de Cataluña (la mitad) que no está dispuesta a recibirlo con honores.
Aunque tuviera razón con la defensa de la constitución (repito, no entro ahí), leyó un discurso del PP no de todos los españoles.
Para mí fue un error de la Casa Real que no se puede solucionar por mucho que viaje a descorrer cortinitas.
El jefe de estado tiende puentes no los rompe. Y si no le gusta ese papel, el de mediador en un país como él dijo “muy difícil” pues no haber aceptado la corona. Los puestos públicos de responsabilidad exigen eso: responsabilidad e inteligencia. Para eso lo hemos estado “preparando” cincuenta años.
A los jefes de estudios de los institutos de las 3000 viviendas tampoco les hará mucha gracia su trabajo. Y ahí están. Algunos por vocación.
Muchas gracias por tu comunicación.
En absoluto puedo estar conforme con tus ideas.
Tampoco es mi intención ni discutir ni disuadir.
Cada uno es libre de hacer sus interpretaciones.
Solo repetir una vez mas, que ese discurso que tanto se menciona, no dijo absolutamente nada. Pudo decir mucho mas. No dijo nada.
