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ETERNITY
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PERO LOS BOLSAZOS Y LOS RELOJES SON TODOS ROBADOS.
HACE POCO DETUVIERON A UNA BANDA DE ALUCINEROS DE MADRID QUE ROBO 20 MILLONES DE EUROS EN RELOJES DE LUJO, LOS REVENDIAN A CIUDADANOS CHINOS POR LOTES, Y ESTOS DESGRACIADOS LOS VENDIAN luego EN CHINA, PERO LOS DE LA ADUANA EN ESPAÑA LOS PILLARON.
La Policía Nacional ha detenido a diecisiete personas en una operación que ha permitido aclarar uno de los mayores robos de joyería de la historia de España, perpetrado en diciembre de 2012 en una empresa de alta relojería de Madrid y en el que los ladrones se llevaron un botín valorado en más de 23 millones de euros. El más barato cuesta 2.000 y el más caro, 270.000.
Los hechos sucedieron el pasado 1 de diciembre, cuando, a plena luz del día, "con total limpieza y la mejor de las artes", según el jefe superior de Policía de Madrid, Alfonso Fernández Díez, el grupo liderado por Ismael Arriero Valcarce, alias "Troll", logró acceder a una empresa taller de alta relojería ubicada en el distrito de Ciudad Lineal de Madrid. Lo hicieron usando las más sofisticadas herramientas -lanza térmica y oxicorte- para colarse en la cámara acorazada, dotada de modernos sistemas de seguridad, para apropiarse de los relojes. Y sin dejar rastro, porque se preocuparon de que los vigilantes no los detectaran, a pesar de permanecer en el interior cuatro horas, y de llevarse las grabaciones de las cámaras de seguridad.
Además, sabían la combinación de la caja fuerte. Precisamente éste es uno de los flecos de la investigación que queda pendiente de resolver, puesto que no se ha podido averiguar cómo la consiguieron ni quién se la pudo facilitar, si bien la Policía descarta que el responsable haya sido alguien desde dentro de la empresa asaltada.
Creen los investigadores que el propio "Troll" participó en el robo, así como su hermano, pero la acción no acabó en Ciudad Lineal y su ideólogo ya había contactado con otros dos grupos delictivos: uno de intermediarios integrado por españoles y otro de receptadores. Este último estaba integrado por ciudadanos chinos con comercios en Madrid para dar una apariencia de legalidad. Eran los encargados de adquirir los relojes y darles salida en su país.
De hecho, la Policía logró interceptar este verano en el aeropuerto de Barajas varias piezas que ciudadanos chinos ocultaban en sus maletas entre la ropa; entre ellas uno de los relojes valorados en 270.000 euros.
La vigilancia a los chinos permitió detener en Shanghai a varios de los miembros de la red gracias a la colaboración de Interpol.
Mientras, el grupo de españoles aprovechaba el verano para disfrutar de unas vacaciones a todo lujo en urbanizaciones de "alto standing" de las costas ibicenca y marroquí. Tampoco los chinos se privaban de nada. Incluso, uno de ellos se compró un Porsche valorado en 100.000 euros.
Una vez identificados y localizados los españoles, la Policía procedió a su detención, así como a la de otros miembros de la red, y pudo recuperar más de 130 relojes, así como hachís, 75.000 euros en efectivo, armas de fuego, las herramientas que usaron y aparatos electrónicos.
Hasta ahora la operación policial, que permanece abierta, ha permitido recuperar 321 de los relojes sustraídos, valorados aproximadamente en cuatro millones de euros. De los diecisiete detenidos, once son extranjeros, seis chinos y cuatro españoles de origen magrebí.
En suma, uno de los golpes al sector joyero mejor planificado y ejecutado. Pero no hay crimen perfecto y el "Troll", que ha "trabajado" en alguna ocasión con otro famoso delincuente, "el Niño Sáez", ya está otra vez entre rejas.
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