Tuve un ligue (porque aquello me duró lo que un caramelo en la puerta de un colegio) , hace tiempo que no sé si adjudicarle el adjetivo tacaño porque era pagador en plazo y participaba de su parte en los viajes y todo eso..... Era más bien "arreglao". En su casa no se tiraba nada, pero nada. Ni un trozo de monda de naranja que llevase algo de naranja. Los platos iban a lavar lamidos casi, en casa y cuando salíamos se comía lo de él y lo de mi plato si dejaba algo, la basura estaba clasificada por material y tamaño. El grifo de agua, duchas y lavadoras estaban cronometrados, el control de lo que había en el frigo era absoluto y monopolizado por él.... Una tortura. Eso si, como era un bebedor en vinos y cervezas en esto no escatimaba nada....