Esther Doña. Viuda del marqués de Griñón.

CONSUELO TRAS LA MUERTE DE CARLOS FALCÓ
Los días más oscuros de Tamara: dónde y con quién está pasando el luto por su padre
La hija del marqués de Griñón ha apagado el teléfono y se encuentra recluida en Miraflores junto a algunos familiares que no quieren despegarse de ella ni un momento



Foto: Tamara Falcó, con Bertín Osborne en 'Mi casa es la tuya'. (Telecinco)


Tamara Falcó, con Bertín Osborne en 'Mi casa es la tuya'. (Telecinco)



AUTOR
P. IZQUIERDO
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24/03/2020



Hace poco más de una semana, nos pusimos en contacto con Tamara Falcó para saber cómo estaba pasando la cuarentena que acababa de empezar, qué había sido de sus proyectos a corto plazo y cómo y dónde se encontraba de cara a superar de la mejor manera posible los días de encierro que nos quedaban por delante.

Siempre positiva y alegre, nos contaba en primera persona las medidas estrictas que había impuesto su madre sobre todo para evitar el contagio de su abuela, la persona que corría más riesgo intramuros de Miraflores, la espectacular mansión que Preysler tiene en la madrileña urbanización de Puerta de Hierro.

Quién nos iba a decir que apenas unos días más tarde, todo esa positividad y buenas energías iban a tornarse en las jornadas más oscuras en la vida de Tamara. Su padre fallecía el pasado viernes a consecuencia de las complicaciones respiratorias derivadas del coronavirus sin que ni su mujer ni ninguno de sus cinco hijos pudiera despedirse.

“Los hijos cumplieron el protocolo a rajatabla y lo cumplirán en lo que se refiere al tratamiento de los restos mortales de su padre”, aseguraba una fuente cercana a la familia consultada por Vanitatis. Unos protocolos que impiden estar presentes en el entierro y que en caso de Covid-19 recomiendan la incineración. Como decía Fernando Sanz, hijo de Lorenzo Sanz, también fallecido por esta causa, “es un duelo atroz y terrorífico” que, por suerte o por desgracia, la hija mediana del marqués de Griñón no pasará sola.


El apoyo de su hermana Ana
Afortunadamente, Tamara Falcó volvió hace años a instalarse en casa de su madre. Si no, dada su situación sentimental, podría haber pasado sola estos días tan terribles. Sin embargo, con el inicio de la cuarentena, Isabel Preysleractuó como la matriarca que es y acogió en su casa a un buen número de familiares que sin duda se han convertido durante las últimas horas en la mejor tabla de salvamento para ella.



Isabel Preysler y Tamara Falcó, en 2014.  (Cordon Press)




Junto a Mario Vargas-Llosa y la madre de Isabel, su abuela, la nonagenaria Beatriz Arrastia (Betty para los amigos, Beba para sus nietos y bisnietos), están viviendo el encierro bajo el mismo techo Ana Boyer, que entiende a la perfección por lo que está pasando su hermana ahora mismo, y su marido, Fernando Verdasco, y su hijo Miguel, ahijado de Tamara y uno de sus principales motivos de alegría estos días, según nos han desvelado las mismas fuentes.

Sin duda, su hermana, como decíamos, será su gran apoyo durante estos terribles días que ella misma pasó hace apenas cinco años cuando falleció su padre, Miguel Boyer, a causa de una embolia pulmonar. Unos duros momentos en los que Ana se refugió en Tamara y que ahora le devolverá en forma de consuelo y cariño.


El duelo de sus cuatro hermanos
La hija de Isabel Preysler y Carlos Falcó aún no ha podido abrazar a ninguno de sus cuatro hermanos por parte de padre por el mismo motivo que no pudo despedirse de él: los estrictos protocolos del Gobierno.

Manuel está en Londres, donde trabaja y vive desde hace años junto a su esposa, Amparo Corsini, y sus tres hijos, Carlos, Manuela y Mariana, y Xandraen su casa con sus tres hijas, Isabela, Camila y Blanca, y su marido, Jaime de Carvajal y Hoyos.

Desconocemos si sus dos hermanos pequeños, Duarte y Aldara, hijos de Fátima de la Cierva, estarán pasando juntos estos días tan duros para ellos.

Con quien sabemos que no están es con la marquesa viuda, Esther Doña, en El Rincón, donde estaba confinada pasando la cuarentena cuando ingresaron a su difunto esposo.

 
PATRIMONIOS
El Palacio El Rincón, la gran herencia (económica) de Carlos Falcó a sus hijos
El marqués de Griñón, fallecido la semana pasada víctima del Covid-19, estaba al frente de varias empresas y contaba con una fabulosa finca en Aldea del Fresno de 123 hectáreas



Foto: Carlos Falcó, en una imagen de archivo. (Getty)


Carlos Falcó, en una imagen de archivo. (Getty)


AUTOR
C. VILLAR
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CARLOS FALCÓ
24/03/2020



No es habitual entre la aristocracia hacer público el dolor, así que es poco probable que ninguno de los cinco hijos del marqués de Griñón comparta con el vulgo los sentimientos provocados por el triste fallecimiento de su padre. Se ha ido un noble, sí, pero también un emprendedor, un gran conocedor del campo (como ingeniero agrónomo que era), un hombre culto, de exquisita educación, un disfrutón de la vida, una buena persona. Los recuerdos, el ejemplo del padre, es el legado esencial que quedará a sus hijos. El Palacio El Rincón, la propiedad más valiosa de cuantas tenía, es también un buen resumen de todo eso.

Con su aire medieval y su estructura imponente, el edificio se encuentra situado en el término municipal de Aldea del Fresno. Fue construido en 1862 por orden del marqués de Manzanedo y duque de Santoña, aunque fue su hija y heredera quien lo amplió en 1909 y lo dejó tal y como está hoy. Desde el principio, tal y como rezan las páginas turísticas de Madrid, "fue lugar de reunión para grandes personalidades influyentes de la sociedad española, tales como los reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia de Battemberg, de cuyas visitas queda constancia a través de las cadenas con flor de lis o las inscripciones talladas en granito en las puertas principales".

Durante el primer cuarto del siglo XX vivió su época de esplendor, el rey y su primer ministro, el conde de Romanones, acudían con frecuencia a cazar. Como una broma del destino, en la Guerra Civil el palacio fue requisado por el Gobierno republicano y convertido en hospital. Franco lo recuperó y lo convirtió en su cuartel general durante la batalla de Brunete. En 1949 el palacio volvió a manos del marqués de Manzanedo, que cedió la propiedad en 1967 a su mujer, Paloma Falcó Escandón, "quien restaurará y acondicionará el palacio y sus jardines". Carlos Falcó lo heredó en 1994 de su tía Paloma, y decidió convertirlo en su residencia habitual en 1999. Actualmente explotan parte de sus instalaciones para celebrar eventos.



Fachada del Palacio El Rincón, en Aldea del Fresno.




¿Cuánto puede valer un monumento de estas características, un pedazo de historia? En las 123 hectáreas con las que cuentan el palacio y su finca (según los documentos oficiales), hay restos de una ermita del siglo XIII, viñedos, una plantación de bambú que da de comer a los osos pandas del Zoo de Madrid, varios jardines de diseño para los eventos y hasta cuelgan de una chimenea los restos de un avión ruso que cayó sobre la finca en plena Guerra Mundial. Aunque dispone de más de 30 habitaciones, solo se usan las pocas que están en la 'zona privada'. Tal y como ha podido comprobar Vanitatis, en 2012 la finca se tasó para solicitar una hipoteca, y el precio que estipuló el tasador fue de cinco millones de euros.


Palacio extremeño
Sin duda es la propiedad más importante del patrimonio personal del marqués, pero no la única. Carlos Falcó poseía también un 33% del Palacio de Mirabel, en Plasencia (Extremadura). Más de 6.000 metros cuadrados de estilo renacentista que constituyen uno de los monumentos civiles más importantes de la ciudad extremeña. En 2010 los Falcó decidieron abrirlo al público y mostrar su magnífico patio, el salón de trofeos de caza, la antigua cocina palaciega y toda su planta noble con los salones y el oratorio.

Además, el marqués poseía parte de otra finca en Navalmoral de la Mata, La Barquilla. Tuvo que vender parte de esta finca para solventar algunos problemas económicos a mediados de los años 80, pero aún conservaba un 66%.



El marqués de Griñón y Esther Doña, su cuarta esposa. (EFE)




Carlos Falcó era un hombre netamente emprendedor. Se ha repetido estos días en sus perfiles y obituarios. Introdujo numerosas innovaciones en el mundo del vino, desde el riego por goteo hasta el cultiuvo de variedades de uva nunca vistas por aquí; montó un safari con ayuda de Félix Rodríguez de la Fuente; fue, en suma, un hombre de otro calibre. A sus 83 años se había ido desvinculando de los negocios poco a poco. Actualmente su nombre seguía vinculado a varias empresas en el Registro Mercantil, aunque la más representativa, Marqués de Griñón Family Estates, ya no era netamente suya. La sociedad que agrupaba buena parte de la actividad vinícola desarrollada por las bodegas de Carlos Falcó estaba administrada al 50% por dos sociedades, The Haciendas-Company Limited y Cotos del Valle del Pusa SL.

Esta segunda empresa es propiedad al 100% del hijo mayor del marqués, Manuel Falcó Girod, uno de los banqueros más infuyentes de la City londinense y quien parece que ha estado echando una mano a su padre en los negocios. La otra gran finca de la familia, la Quinta Casa de Vacas, donde los viñedos conviven con campos de lavanda y que Carlos Falcó consideró siempre su refugio, es propiedad de la citada Marqués de Griñón Family Estates. Allí cuentan con casi 300 hectáreas de tierras regadas por el río Tajo y otra casa palacio, la bodega y la almazara.
Pero sobre todo están los recuerdos, los sueños y las lecciones, el verdadero legado de cualquier padre.

 
Off topic:

Me pone enferma el baboserío y estulticia de los periodistas

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La hija del marqués de Griñón ha apagado el teléfono y se encuentra recluida en Miraflores junto a algunos familiares que no quieren despegarse de ella ni un momento"

"Siempre positiva y alegre, nos contaba en primera persona las medidas estrictas que había impuesto su madre sobre todo para evitar el contagio de su abuela, la persona que corría más riesgo intramuros de Miraflores, la espectacular mansión que Preysler tiene en la madrileña urbanización de Puerta de Hierro. "


Vamos a ver, Miraflores no es el palacio de Pochabel, es el nombre de la calle (en realidad Avenida), donde se encuentra Villa Meona.
PUNTO.
 
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