Entrevista en la prensa portuguesa de la duquesa de Braganza. Isabel de Heredia, nacida en 1966, pasó su infancia en Angola, donde, según ella, era muy atrevida, trepaba árboles y caía cinco veces hasta que se dio cuenta de que no podía volar. Se fue a Brasil, donde se reunió por primera vez a la edad de 16 años Dom Duarte, duque de Braganza, jefe de la Casa Real de Portugal.
Durante una cena en Heredia, el duque de Braganza se posiciona sobre un tema y la joven Isabel se levanta ante el miedo de su madre. Dom Duarte aprecia, explicándole a la chica que generalmente uno nunca lo molesta y que él lo aprecia aún más porque ella ha desarrollado su punto de vista. Nace una amistad.
En 1995, se casan en Lisboa. 21 años los separan, pero esto no es un problema para la duquesa que acaba de tomar la decisión de casarse con la persona con quien le gusta estar en una relación. No preparada para entrar en Gotha, Isabel de Heredia recuerda estar molesta cuando llegó al monasterio de Los Jerónimos por la cálida bienvenida del público. Ella decide espontáneamente levantar su velo para que la multitud pueda verlo mejor, un gesto que será reprochado por algunos.
El duque y la duquesa tuvieron tres hijos. El infante de más edad, Afonso, es el que más se parece en su carácter a su padre, según la duquesa. Sí, sus hijos ya han tenido relaciones amorosas. Para la duquesa de Braganza, no importa si las futuras esposas de sus hijos no son nobles. La duquesa gestiona una inmobiliaria
