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La Guardia Civil localizó ayer al hijo de Mercedes, a quien se le perdió el rastro el mismo día que a su madre
REDACCIÓN, BARCELONA
03/10/2019 11:17Actualizado a03/10/2019 12:53
El paradero de Mercedes Márquez, de 84 años, sigue siendo un misterio desde que desapareciera el pasado domingo junto con su hijo de 54 años, Juan Antonio. Lo más desconcertante es que él apareció ayer miércoles sano y salvo en su casa de Carmona, en Sevilla, pero de la mujer no hay ni rastro a pesar de las batidas que se han organizado para localizarla. La desaparecida mide 1,50 metros, es de complexión gruesa y tiene el pelo castaño y los ojos negros.
Los vecinos dieron aviso ayer por la mañana de que Juan Antonio estaba en su casa. Acto seguido, la Guardia Civil lo llevó al cuartel para interrogarlo, en calidad de testigo. No quedó detenido ni se le imputa ningún cargo, y la Benemérita aclara que está colaborando con los investigadores y que se encuentra “muy afectado” por la desaparición de su madre. Además, han interrogado al entorno familiar y a varios vecinos para encontrar alguna pista que les lleve hasta Mercedes.
Sin noticias de Mercedes desde el domingo
En las últimas horas se han puesto en marcha varias batidas por la zona conocida como Huerta Nueva, situada muy cerca del domicilio en el que residía la desaparecida, un punto donde hay mucha vegetación y varios pozos. Esta mañana está prevista otra batida por la zona. Las fuentes no han confirmado si el rastreo es consecuencia de la declaración ante la Guardia Civil del hijo de la mujer.
Mercedes Márquez, de 84 años, desapareció el domingo, cuando se marchó junto con uno de sus hijos, Juan Antonio de la Ossa Márquez, de 54 años. La última vez que ambos fueron vistos juntos fue el pasado sábado, y la Guardia Civil cuenta con testimonios como el conductor del autobús que llevó a ambos a la estación de Santa Justa de Sevilla.
La mujer no padece alzheimer, según el alcalde de Carmona
REDACCIÓN, BARCELONA
03/10/2019 11:17Actualizado a03/10/2019 12:53
El paradero de Mercedes Márquez, de 84 años, sigue siendo un misterio desde que desapareciera el pasado domingo junto con su hijo de 54 años, Juan Antonio. Lo más desconcertante es que él apareció ayer miércoles sano y salvo en su casa de Carmona, en Sevilla, pero de la mujer no hay ni rastro a pesar de las batidas que se han organizado para localizarla. La desaparecida mide 1,50 metros, es de complexión gruesa y tiene el pelo castaño y los ojos negros.
Los vecinos dieron aviso ayer por la mañana de que Juan Antonio estaba en su casa. Acto seguido, la Guardia Civil lo llevó al cuartel para interrogarlo, en calidad de testigo. No quedó detenido ni se le imputa ningún cargo, y la Benemérita aclara que está colaborando con los investigadores y que se encuentra “muy afectado” por la desaparición de su madre. Además, han interrogado al entorno familiar y a varios vecinos para encontrar alguna pista que les lleve hasta Mercedes.
Sin noticias de Mercedes desde el domingo
En las últimas horas se han puesto en marcha varias batidas por la zona conocida como Huerta Nueva, situada muy cerca del domicilio en el que residía la desaparecida, un punto donde hay mucha vegetación y varios pozos. Esta mañana está prevista otra batida por la zona. Las fuentes no han confirmado si el rastreo es consecuencia de la declaración ante la Guardia Civil del hijo de la mujer.
Mercedes Márquez, de 84 años, desapareció el domingo, cuando se marchó junto con uno de sus hijos, Juan Antonio de la Ossa Márquez, de 54 años. La última vez que ambos fueron vistos juntos fue el pasado sábado, y la Guardia Civil cuenta con testimonios como el conductor del autobús que llevó a ambos a la estación de Santa Justa de Sevilla.
La mujer no padece alzheimer, según el alcalde de Carmona
