Mira yo creo que todo está en el paquete del oscurantismo que va muy bien para crear expectación, suscitar el afán de ver algo que no se prodiga, que se hace así más inaccesible. Misterio. Sucedáneo de aquellos reyes que subidos a un trono impedían llegar a su altura.Extraño, tú lo has dicho. Esa es la palabra. Todo en esta familia es extraño. Tengo una sobrina que nació en agosto del mismo año que Leito, toca el piano, habla inglés, tiene una desenvoltura enorme. Hace recitales en el colegio, en el Conservatorio.... cosas típicas de niñas de esa edad. ¿Porqué a esta niña nunca, jamás, la hemos visto haciendo las cosas que dicen que hace? Y que no me vengan con la teoría de la privacidad..... Porque para eso no hay privilegios, oiga.
Si en el colegio subieron los muros para impedir toda la vista a sus patios de recreo, si ha quedado prohibido hacer fotos en fiestas y conmemoraciones y si los padres del resto de alumnos no han protestado contra esta especie de aislamiento conventual, pues ¿que queda?
Lo que hacen estas niñas ya pasa de misterio porque un ridículo posado de primavera o de verano no hace más que crearles a ellas mismas el convencimiento de diferentes, por encima de...., especiales y no contaminadas por efectos externos.
Y tienen padre y madre, dos progenitores responsables y culpables de una situación desconectada del exterior. La madre una altanera sin principios y el padre un gaznápiro elevado a Jefe de Estado por la gracia de su nacimiento.
Hay que tener mucha soberbia y muy poco caletre para persistir en esta situación, sobre todo encastillamiento y altanería.
Y cierto que me da exactamente igual, lo único realmente preocupante es el poco tiempo que falta para que Leonor cobre una sustanciosa cantidad por ¿por qué? ¿Será posible que nadie pare éste desatino?
¿Será posible que nos comportemos todos como los padres de su colegio ante el aislamiento a que someten a sus hijos?