El Ministerio de Defensa despide efectivos mientras gasta cientos de millones de dinero público en subcontratas

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El Ministerio de Defensa despide efectivos mientras gasta cientos de millones de euros de dinero público en subcontratas​

Entre el 1 de enero de 2018 y el 30 de septiembre de 2019, el departamento que dirige Margarita Robles gastó 23,4 millones de euros sólo en vigilantes de seguridad subcontratados a empresas, según informes a los que ha tenido acceso LUH.

Por
Javier Lezaola.

2 de marzo de 2021 22:30

El Ministerio de Defensa despide efectivos mientras gasta cientos de millones de euros de dinero público en subcontratas

Detalle de una de las resoluciones del Ministerio de Defensa a las que ha tenido acceso LUH

El Ministerio de Defensa del Gobierno español gasta cientos de millones de euros de dinero público –decenas de millones de euros cada año– en empresas subcontratadas de mantenimiento –de vehículos, de instalaciones y edificios o de jardines– o de catering –es decir servicio de suministro de comidas y bebidas–, según consta en una resolución oficial del departamento que dirige Margarita Robles, fechada en abril de 2019 y a la que LUH ha tenido acceso en exclusiva. Y Defensa lo hace mientras despide efectivos que podrían llevar a cabo ese tipo de trabajos y que en muchas ocasiones, tras ser despedidos de las Fuerzas Armadas al cumplir 45 años, encuentran trabajo en esas mismas empresas subcontratadas por Defensa, según ha denunciado en declaraciones a este diario Cristina Valdearcos, miembro de amred45+ (Asociación de Reservistas de Especial Disponibilidad 45+).


“Es indignante que desde Defensa se subcontraten servicios y empresas, gastándose mucho dinero público, para realizar trabajos que pueden realizar nuestros soldados, esos soldados a los que a los 45 años les finalizan el compromiso con una pensión no contributiva de 642 euros que posteriormente les limita a la hora de pedir ayudas”, ha añadido Valdearcos.


Según consta en la resolución –emitida por la Dirección General de Asuntos Económicos de la Secretaría de Estado de Defensa del Ministerio de Defensa–, entre los años 2010 y 2018 el Ministerio de Defensa gastó un total de 654,1 millones de euros en mantenimiento de vehículos, 91,6 millones en mantenimiento de instalaciones y edificios, 27,5 millones en mantenimiento de jardines y 343,9 millones en catering. El informe advierte de que sólo son “fiables” los datos de los cuatro últimos años –es decir de 2015 a 2018–, pues los datos de los años anteriores resultan de la unificación de sistemas informáticos, bases de datos y órganos de contratación algunos de los cuales ya están extintos, por lo que es “imposible” acceder a ellos. En cualquier caso, llaman la atención cifras como los 112,9 millones de euros gastados en 2018 en mantenimiento de vehículos o los 24,0 millones de euros gastados también en 2018 en catering.

“¿Por qué Defensa está despidiendo a cocineros mientras está subcontratando servicios de catering?”, se preguntan desde amred45+. Y es sólo un ejemplo más, pues entre los despedidos “los hay de todas las ramas: mecánicos, electricistas, fontaneros, de parques y jardines, chapistas, electrónicos, de telecomunicaciones…”.

Especialmente llamativa, tratándose precisamente del Ejército, es la subcontratación de vigilantes de seguridad. Y es que, según otras dos resoluciones a las que este diario también ha tenido acceso, el Ministerio de Defensa gastó en vigilantes de seguridad subcontratados a empresas 9,1 millones de euros en 2014; 7,6 millones en 2015; 6,6 millones en 2016; 16,9 millones en 2017, y 23,4 millones entre el 1 de enero de 2018 y el 30 de septiembre de 2019. Según el segundo informe, vigilantes de seguridad de empresas subcontratadas por Defensa prestan sus servicios en un total de 186 instalaciones militares, aunque el departamento que dirige Margarita Robles, que a fecha de hoy sigue llevando a cabo todas estas subcontratas, no especifica cuántas de esas instalaciones cuentan con personal de tropa.


Porque sencillamente hay que abrir negocios a amiguetes y la cantinerita accede, no quiere problemas con los militares.
 

Margarita Robles comprará aviones de guerra valorados en más de 10.000 millones de euros​

España pertenece a un programa militar con un presupuesto no oficial de entre 50.000 y 80.000 millones de euros que cuenta con la involucración de Indra, uno de los ‘lobbies’ de la corrupción armamentística de la UE

Por
Carmen Asenjo.

24 de agosto de 2022 23:00

Margarita Robles comprará aviones de guerra valorados en más de 10.000M de euros

La respuesta sobre el dinero total que España gasta anualmente en Defensa es más difícil de calcular de lo que debería, ya que existen numerosas cifras asociadas al coste militar español y todas son, de alguna manera, ciertas. La realidad es que no existe una cifra consensuada y clara de todas las partidas que existen dedicadas al tema militar y defensivo, algo, que hace que muchos se pregunten si esto se trata entonces de una ambigüedad calculada, “para poder sacar músculo militar en tiempos como el actual, de guerra, o ante los socios de la OTAN, y para minimizar el dato en tiempos de paz”.

Tomando como referencia las cifras oficiales publicadas por las instituciones, en los últimos 10 años, su dotación ha subido un 60,7%: de los 6.316,4 millones de euros de 2012 a los 10.155,2 millones de este mismo año. Y eso que después de 2012 hubo dos descensos consecutivos –hasta los 5.745,7 millones de 2014–. Por tanto, si contabilizamos a partir de ese año, el aumento de la partida de Defensa es de un 76,7%. De todos estos años, el ejercicio que ha sufrido un mayor incremento fue el de 2017, con Mariano Rajoy al frente del Ejecutivo, cuando se pasó de 5.787,8 a 7.638,5 millones de euros. Sin embargo, a pesar de que estos sean los cálculos presentados por el Ministerio de Defensa, finalmente el gasto sería de una cantidad mucho mayor.

A los 10.155,2 millones de euros invertidos este año, habría que sumar, entre otros muchos conceptos, lo que se destina a los conocidos como ‘Organismos Autónomos’: en el caso de Defensa, son el Instituto Social de las Fuerzas Armadas (ISFAS), al que se entregan 832 millones de euros; el Instituto de Vivienda, Infraestructuras y Equipamiento de Defensa (205 millones de euros), y el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) Esteban Terradas (196 millones de euros). A esto también habría que sumar los 3.665 millones de euros para “pensiones a funcionarios de carácter militar” que tampoco aparecen en las cifras finales.

De esta manera, este año 2022 ha hecho que el Ministerio de Defensa, con 3.647,32 millones de euros, se convierta en la cartera con más cantidad dedicada a inversiones. Cifras que chocan directamente si las comparamos con las destinadas en este ámbito a Sanidad (104,12 millones de euros), Educación (68,82 millones de euros); Trabajo (16,8 millones de euros), o Derechos Sociales y Agenda 2030 (4,91 millones de euros).

UNA COMPRA DE 10.000 MILLONES DE EUROS

España se encuentra actualmente embarcada junto con Francia y Alemania en el programa NGWS/FCAS (Sistema de Armas de Nueva Generación o Futuro Sistema Aéreo de Combate), con un presupuesto no oficial de entre 50.000 y 80.000 millones de euros que además, cuenta con la involucración de un amplio conglomerado de empresas europeas entre las que hay varias españolas, como Indraconsiderado uno de los 'lobbies' de la corrupción o la opacidad que rodean la “carrera armamentista” de la UE– siendo esta iniciativa controvertida hasta el momento por sus múltiples retrasos y las crecientes dudas sobre su viabilidad.
Ahora, la aparición de una nueva noticia ha vuelto a atraer la atención sobre el proyecto y su intención de comprar aviones de guerra F-35, lo que implicaría retroceder cuatro décadas y encargar a la industria estadunidense, no a la europea, un pedido de hasta 80 aviones de combate valorado en más de 10.000 millones de euros.

El problema radica en que adquirir a estas alturas un avión de combate estadounidense es volver a los años ochenta del siglo pasado, cuando el Gobierno de Felipe González decidió comprar el F-18. Además, estos aviones norteamericanos son “una caja negra”, según comentan algunos, en la que Estados Unidos no deja que otros países metan la mano. España se estaría cuestionando así gastar más de 10.000 millones (coste estimado) en un programa del que no se beneficiará en absoluto y que además, presenta únicamente inconvenientes y perjuicios a la industria europea y española, con el argumento de que los Eurofighter -utilizados actualmente y cuya fabricación y diseño se lleva a cabo también a nivel nacional- no están homologados para portar las armas nucleares que exige el compromiso de Berlín con la OTAN.


La pregunta del millón.. ¿De verdad nos podemos creer que toda esa cantidad de millones van a comparas de armamento o.... a los bolsillos de algunos?

¿Quién lo controla? La cantinerita seguro que no.
 

Margarita Robles comprará aviones de guerra valorados en más de 10.000 millones de euros​

España pertenece a un programa militar con un presupuesto no oficial de entre 50.000 y 80.000 millones de euros que cuenta con la involucración de Indra, uno de los ‘lobbies’ de la corrupción armamentística de la UE

Por
Carmen Asenjo.

24 de agosto de 2022 23:00

Margarita Robles comprará aviones de guerra valorados en más de 10.000M de euros

La respuesta sobre el dinero total que España gasta anualmente en Defensa es más difícil de calcular de lo que debería, ya que existen numerosas cifras asociadas al coste militar español y todas son, de alguna manera, ciertas. La realidad es que no existe una cifra consensuada y clara de todas las partidas que existen dedicadas al tema militar y defensivo, algo, que hace que muchos se pregunten si esto se trata entonces de una ambigüedad calculada, “para poder sacar músculo militar en tiempos como el actual, de guerra, o ante los socios de la OTAN, y para minimizar el dato en tiempos de paz”.

Tomando como referencia las cifras oficiales publicadas por las instituciones, en los últimos 10 años, su dotación ha subido un 60,7%: de los 6.316,4 millones de euros de 2012 a los 10.155,2 millones de este mismo año. Y eso que después de 2012 hubo dos descensos consecutivos –hasta los 5.745,7 millones de 2014–. Por tanto, si contabilizamos a partir de ese año, el aumento de la partida de Defensa es de un 76,7%. De todos estos años, el ejercicio que ha sufrido un mayor incremento fue el de 2017, con Mariano Rajoy al frente del Ejecutivo, cuando se pasó de 5.787,8 a 7.638,5 millones de euros. Sin embargo, a pesar de que estos sean los cálculos presentados por el Ministerio de Defensa, finalmente el gasto sería de una cantidad mucho mayor.

A los 10.155,2 millones de euros invertidos este año, habría que sumar, entre otros muchos conceptos, lo que se destina a los conocidos como ‘Organismos Autónomos’: en el caso de Defensa, son el Instituto Social de las Fuerzas Armadas (ISFAS), al que se entregan 832 millones de euros; el Instituto de Vivienda, Infraestructuras y Equipamiento de Defensa (205 millones de euros), y el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) Esteban Terradas (196 millones de euros). A esto también habría que sumar los 3.665 millones de euros para “pensiones a funcionarios de carácter militar” que tampoco aparecen en las cifras finales.

De esta manera, este año 2022 ha hecho que el Ministerio de Defensa, con 3.647,32 millones de euros, se convierta en la cartera con más cantidad dedicada a inversiones. Cifras que chocan directamente si las comparamos con las destinadas en este ámbito a Sanidad (104,12 millones de euros), Educación (68,82 millones de euros); Trabajo (16,8 millones de euros), o Derechos Sociales y Agenda 2030 (4,91 millones de euros).

UNA COMPRA DE 10.000 MILLONES DE EUROS

España se encuentra actualmente embarcada junto con Francia y Alemania en el programa NGWS/FCAS (Sistema de Armas de Nueva Generación o Futuro Sistema Aéreo de Combate), con un presupuesto no oficial de entre 50.000 y 80.000 millones de euros que además, cuenta con la involucración de un amplio conglomerado de empresas europeas entre las que hay varias españolas, como Indraconsiderado uno de los 'lobbies' de la corrupción o la opacidad que rodean la “carrera armamentista” de la UE– siendo esta iniciativa controvertida hasta el momento por sus múltiples retrasos y las crecientes dudas sobre su viabilidad.
Ahora, la aparición de una nueva noticia ha vuelto a atraer la atención sobre el proyecto y su intención de comprar aviones de guerra F-35, lo que implicaría retroceder cuatro décadas y encargar a la industria estadunidense, no a la europea, un pedido de hasta 80 aviones de combate valorado en más de 10.000 millones de euros.

El problema radica en que adquirir a estas alturas un avión de combate estadounidense es volver a los años ochenta del siglo pasado, cuando el Gobierno de Felipe González decidió comprar el F-18. Además, estos aviones norteamericanos son “una caja negra”, según comentan algunos, en la que Estados Unidos no deja que otros países metan la mano. España se estaría cuestionando así gastar más de 10.000 millones (coste estimado) en un programa del que no se beneficiará en absoluto y que además, presenta únicamente inconvenientes y perjuicios a la industria europea y española, con el argumento de que los Eurofighter -utilizados actualmente y cuya fabricación y diseño se lleva a cabo también a nivel nacional- no están homologados para portar las armas nucleares que exige el compromiso de Berlín con la OTAN.


La pregunta del millón.. ¿De verdad nos podemos creer que toda esa cantidad de millones van a comparas de armamento o.... a los bolsillos de algunos?

¿Quién lo controla? La cantinerita seguro que no.

Lo de la cantinerita te sobra. Huele a machismo que apesta. Nada nuevo.....

Y si no os gusta donde se gasta el dinero el Gobierno. Largaos de una vez, estais tardando.
Seguir en el Gobierno solo para cobrar el dinero de los ciudadanos, es muy comunista si.... Ladrones
 
Podemos sigue en el Gobierno, cobrando un pastizal de nuestros impuestos.

Muchos millones.....
 
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