¡Por el amor de Dios, que no pise ese lugar nunca más! A tomar por saco el curso porque lo importante es que tu amiga esté bien. Seguro que por ahí hay otros cursos, estudios... mejores para ella. Espero que se encuentre bien y que se cuide❤
Ahora está genial, pero como piense en el examen se le tuerce el gesto.
La verdad es que tiene dudas sobre si regresar a hacer el examen.
Y también es verdad que lleva como dos años que le pasan cosas muy raras y no muy agradables en ese sitio, cuando antes de eso se lo pasaba genial. Hubo un momento hace dos años que pareció ser determinante. De ahí en adelante solo pasan movidas y yo creo que es la señal para que se largue de allí.
Cuando se puso mala pensé que era una respuesta física a que algo allí no iba bien, como si tuviera que "apartarse" forzosamente del lugar y la enfermedad le vino al pelo. Luego hablando con sus compañeros resultó que lo pasaron fatal dando clase y ella se libró por estar mala, se libró por eso mismo, yo creo que fue un aviso y que tenía algo "acumulado".
Ayer me dijo que cuando piensa en hacer el examen se empieza a poner nerviosa y no se encuentra bien aunque físicamente no le pasa nada, me lo describe como un sensación como de no encontrarse bien, no es buena vibración, gracias a Dios está bien de salud. Que cuando piensa en no ir al examen se encuentra muchísimo mejory es como si se quedara más tranquila.
Yo no sé qué decirle, porque no me gustaría sugestionarla a que haga una cosa u otra. La verdad, le queda un paso (duro, la verdad), de poder culminar unos años de estudio que han sido cuanto menos "trepidantes" y ya terminarlos y no regresar más, podría darle una última oportunidad a ese examen y quitárselo de encima apruebe o suspenda (examen que no es de una importancia importante, es que es muy de disciplinas y tiene así como mucho sentido del deber), pero es que de verdad le cambia la expresión de la cara en cuanto sale el tema. Si aprueba puede por fin decir que ha completado esos estudios, si suspende encima creo que lo va a pasar peor y va a terminar con peor sensación de ese sitio.
A mi me recuerda a cuando en cierta ocasión me presenté a un examen para unas oposiciones y me caí en el edificio donde se convocaba el examen. Me pegué un hostión considerable delante de todo el mundo antes de empezar, vamos nada más llegar al aula, no me lastimé no me hice nada, pero la caída sí que influyó en el examen porque en ese momento sí que me dolió, y el dolor influyó también en la concentración y en todo el examen. Fue salir del edificio y se me pasó el dolor y todo, como si no me hubiera pasado nada, de forma mágica y de repente, suspendí. Me iba a presentar en años siguientes a esa oposición, pero era ver una foto del edificio o vinculada al examen o que tuviera que ver con el tema, y empezaba el malestar.
Luego tiempo después, descubrí, que en efecto aquel no era mi sitio, y me alegré incluso de no haber aprobado.
Un tiempo más tarde, cuando ya tenía clarísimo que no quería opositar a eso, pase por la puerta del edificio y me empecé a reír relajada, como si me hubiera quitado un peso de encima.
El tiempo me demostró que no me equivoqué en abandonar ese propósito.
A mi amiga le ha pasado lo mismo pero con ataques de tos, que le provocaron vomitar, y al regresar a ese sitio, otra vez la tos que menos mal no ha ido a más.
Lo que la sacó de aquel lugar hace un año fue un ataque de tos, vino la pandemia y se cortó todo, y al regresar a retomarlo, empieza la tos de repente.