El conocido blogger de moda, el asturiano Pelayo Díaz (www.katelovesme.net), se ha liado con el diseñador francés Nicolas Ghesquière (que fue director creativo de Balenciaga durante 15 años y ahora es director creativo de Louis Vuitton).
Una conquista de alta costura para Prince Pelayo
A.L. JIMENEZABC_ES / MADRID
Día 25/05/2014 - 02.40h
El exnovio del diseñador David Delfín ha sido visto con Nicolas Ghesquière, director creativo de Vuitton. Otro español que triunfa
BELÉN DÍAZ
Pelayo Díaz
Del uno al otro confín de esta «Alemania del Sur», que diría Pons, no se habla de otra cosa. Y en los mentideros fashionistas, hará correr ríos de tinta y satén: al niño prodigio del diseño europeo, Nicolas Ghesquière(43 años) y al ex—compañero y colaborador— de David Delfín (44), Pelayo Díaz (27), se les vio el fin de semana pasado muy acaramelados en el Palacio de Cristal del madrileño parque de El Retiro... ¡Hasta el pájaro de Twitter está pensando en pedirse la baja por estrés que se le avecina! Puede ser mentira, verdad, un aquí te pillo aquí te hago una jareta, o mera duda como Costa para el Atleti de la final de Lisboa, pero... ¿Qué, si no, haría en la Villa y Corte el excreativo de Balenciaga, con lo que adora Nueva York? Y ¿qué pintaba hace unos días el bloggero en el desfile de Vuitton, donde el francés presentaba su Colección Crucero? Instagram aún está «petada» por el subidón de imágenes monegascas de «Prince Pelayo».
Desde que el rey de la blogosfera se fuera del delfinario de David y sin definir muy bien los términos, el diseñador de cabecera de la after-post-movida madrileña aseguraba no tener palabras de reproche para su ex, pero lo cierto es que no cesó de subir a las redes imágenes de su estupenda anatomía torácica, como aviso para navegantes: «Observa lo que te estás perdiendo»... Pero Pé, el asiduo a las primeras filas de las pasarelas internacionales estaba demasiado ocupado, primero no desmintiendo su presunta relación con un desconocido y, después, no negando verse con Eduardo Rivera —el broker entre costuras que tiene entre sus clientes a Amenábar, Lomana y la mismísima «vice del Gobierno»—. Al final han tenido que ser los zahoríes de tendencias quienes localizaran a su nuevo Hércules: Ghesquière, amante de las novelas de Balzac y las pinturas de Zurbarán que ha epatado con sus diseños tanto en Balenciaga como ahora en Vuitton.
Lo cierto es que el muchacho bien merece un scroll intelectual y ocular, de arriba abajo, pero el joven blogosférico, ¿quién es? Para algunos es un ejemplo de «it-boy» patrio, pero para una nutrida legión se trata del Ramoncín de la moda —aunque aseguran que recibió clases en el Central Saint Martins—, que se nutre de contactos que son la envida de los wannabes de su generación y que gasta amigas muy guestlis que se llaman Brianda, Miranda o Gala, todas con nombres de Princesas de Disney y muy megacool. Pero ahí parecen terminar sus méritos Mientras que sus dos hombres —consecutivos— de cabecera, son reputados diseñadores con muchos éxitos y mucha tela cortada a la espalda.
Exitoso
Pese a todo –incluso obviando el blog repelusero que se gasta, www.katelovesme.net—, ¿puede haber algún tipo de venganza Tarantinera o asistiremos al un silencio sepulcral por parte de las tres esquinas de este triángulo? Me decanto por lo segundo, al menos en lo concerniente al genio francés y a Diego David Domínguez (Delfín, para la moda), a quien solo le hemos oído decir de su ex, que son muy «civiliza2», por lo que continúan «trabajando juntos»... Sus incondicionales como Bimba, Juan Gatti, Alaska o Vaquerizo, por más gatitos que puedan tener en la barriga, tampoco dirán ni «mu», ni «Mahou». Antes muertos que delatores de «luxe». La gran incógnita es Pelayo, ¿podrá soportar el peso del silencio o intentará hacerse un World Tour de pasarelas junto a Ghesquière? ¿Cuánto tardará en tuitear —vamos, lo que siempre ha sido arañar la puerta de un cuarto de baño— que se la ligado al «creator» fetiche del mundo mundial? ¿Soportará no gritarle al universo que tiene derecho a pespunte con un tipo que está como para sacarlo en procesión? Y siendo malísimos, ¿no sentirá en su megalomanía que ha cambiado a Marta Sánchez por Beyonce? ¡Erroooooor! Es como pensar que los cromos del mundial de Brasil son los más eruditos porque sale Sócrates...
No sabemos si un abrazo hace relación pero de ser cierto, esta vez el defín no podrá justificar los medios, ni siquiera con delfina ironía... Uno de los tres —e imaginamos cuál— se irá en silencio a diseñar al «Cabo Delfín» del Mundo, mientras —siempre bajo la mera especulación— los otros dos se contarán secretos (de moda) a la boca. Sólo resta saber, como en cualquier historia de amor: ¿para cuándo el musical? Pronto, en las principales pasarelas.
Esta noticia la ha publicado el diario ABC: http://www.abc.es/estilo/gente/20140525/abci-conquista-alta-costura-pelayo-201405231720.html
Una conquista de alta costura para Prince Pelayo
A.L. JIMENEZABC_ES / MADRID
Día 25/05/2014 - 02.40h
El exnovio del diseñador David Delfín ha sido visto con Nicolas Ghesquière, director creativo de Vuitton. Otro español que triunfa
BELÉN DÍAZ
Pelayo Díaz
Del uno al otro confín de esta «Alemania del Sur», que diría Pons, no se habla de otra cosa. Y en los mentideros fashionistas, hará correr ríos de tinta y satén: al niño prodigio del diseño europeo, Nicolas Ghesquière(43 años) y al ex—compañero y colaborador— de David Delfín (44), Pelayo Díaz (27), se les vio el fin de semana pasado muy acaramelados en el Palacio de Cristal del madrileño parque de El Retiro... ¡Hasta el pájaro de Twitter está pensando en pedirse la baja por estrés que se le avecina! Puede ser mentira, verdad, un aquí te pillo aquí te hago una jareta, o mera duda como Costa para el Atleti de la final de Lisboa, pero... ¿Qué, si no, haría en la Villa y Corte el excreativo de Balenciaga, con lo que adora Nueva York? Y ¿qué pintaba hace unos días el bloggero en el desfile de Vuitton, donde el francés presentaba su Colección Crucero? Instagram aún está «petada» por el subidón de imágenes monegascas de «Prince Pelayo».
Desde que el rey de la blogosfera se fuera del delfinario de David y sin definir muy bien los términos, el diseñador de cabecera de la after-post-movida madrileña aseguraba no tener palabras de reproche para su ex, pero lo cierto es que no cesó de subir a las redes imágenes de su estupenda anatomía torácica, como aviso para navegantes: «Observa lo que te estás perdiendo»... Pero Pé, el asiduo a las primeras filas de las pasarelas internacionales estaba demasiado ocupado, primero no desmintiendo su presunta relación con un desconocido y, después, no negando verse con Eduardo Rivera —el broker entre costuras que tiene entre sus clientes a Amenábar, Lomana y la mismísima «vice del Gobierno»—. Al final han tenido que ser los zahoríes de tendencias quienes localizaran a su nuevo Hércules: Ghesquière, amante de las novelas de Balzac y las pinturas de Zurbarán que ha epatado con sus diseños tanto en Balenciaga como ahora en Vuitton.
Lo cierto es que el muchacho bien merece un scroll intelectual y ocular, de arriba abajo, pero el joven blogosférico, ¿quién es? Para algunos es un ejemplo de «it-boy» patrio, pero para una nutrida legión se trata del Ramoncín de la moda —aunque aseguran que recibió clases en el Central Saint Martins—, que se nutre de contactos que son la envida de los wannabes de su generación y que gasta amigas muy guestlis que se llaman Brianda, Miranda o Gala, todas con nombres de Princesas de Disney y muy megacool. Pero ahí parecen terminar sus méritos Mientras que sus dos hombres —consecutivos— de cabecera, son reputados diseñadores con muchos éxitos y mucha tela cortada a la espalda.
Exitoso
Pese a todo –incluso obviando el blog repelusero que se gasta, www.katelovesme.net—, ¿puede haber algún tipo de venganza Tarantinera o asistiremos al un silencio sepulcral por parte de las tres esquinas de este triángulo? Me decanto por lo segundo, al menos en lo concerniente al genio francés y a Diego David Domínguez (Delfín, para la moda), a quien solo le hemos oído decir de su ex, que son muy «civiliza2», por lo que continúan «trabajando juntos»... Sus incondicionales como Bimba, Juan Gatti, Alaska o Vaquerizo, por más gatitos que puedan tener en la barriga, tampoco dirán ni «mu», ni «Mahou». Antes muertos que delatores de «luxe». La gran incógnita es Pelayo, ¿podrá soportar el peso del silencio o intentará hacerse un World Tour de pasarelas junto a Ghesquière? ¿Cuánto tardará en tuitear —vamos, lo que siempre ha sido arañar la puerta de un cuarto de baño— que se la ligado al «creator» fetiche del mundo mundial? ¿Soportará no gritarle al universo que tiene derecho a pespunte con un tipo que está como para sacarlo en procesión? Y siendo malísimos, ¿no sentirá en su megalomanía que ha cambiado a Marta Sánchez por Beyonce? ¡Erroooooor! Es como pensar que los cromos del mundial de Brasil son los más eruditos porque sale Sócrates...
No sabemos si un abrazo hace relación pero de ser cierto, esta vez el defín no podrá justificar los medios, ni siquiera con delfina ironía... Uno de los tres —e imaginamos cuál— se irá en silencio a diseñar al «Cabo Delfín» del Mundo, mientras —siempre bajo la mera especulación— los otros dos se contarán secretos (de moda) a la boca. Sólo resta saber, como en cualquier historia de amor: ¿para cuándo el musical? Pronto, en las principales pasarelas.
Esta noticia la ha publicado el diario ABC: http://www.abc.es/estilo/gente/20140525/abci-conquista-alta-costura-pelayo-201405231720.html
Adjuntos
Última edición por un moderador: