DEL AMOR Y LOS PRÉSTAMOS.Carmen Rigalt.

Registrado
4 Dic 2012
Mensajes
14.493
Calificaciones
111.228
CARMEN RIGALT

17/08/2019

DEL AMOR Y LOS PRÉSTAMOS

Descubra Orbyt
  • Disminuye el tamaño del texto
  • Aumenta el tamaño del texto
  • Imprimir documento
  • Comparte esta noticia
  • twitter
MARTES. Llegando a Madrid vuelven las bajas temperaturas y con ellas, la lumbalgia. Úrsula sale a recibirnos y se enreda entre mis piernas. Úrsula es la gata. Debí ponerle un nombre más intelectual, como el que le puso Cabrera Infante a su gato (Offenbach) o Terenci Moix al suyo (Smenkharé), en homenaje al antiguo Egipto. Los gatos castigan a sus dueños cuando los dejan solos en casa. A Úrsula le basta un día de ausencia para que luego nos reciba de uñas.

DOMINGO. Todos los días, cuando vamos o venimos del Molí del mig, pasamos bajo un cartel con el retrato de una mujer cuya fisonomía me resulta un poco familiar. Es un retrato de trazo grueso y geométrico que parece inspirado en Picasso y los muralistas mexicanos. Bajo el retrato, un lema contundente: ‘Llibertat para Dolors’. Se refiere a Dolors Bassa, que actualmente cumple prisión en el Centro Penitenciario Puig de les Basses, cerca de Figueres (Girona). No es el único cartel que Torroella i Montgrí dedica a una líder del independentismo. Dolors nació aquí y no es una vecina más. Maestra y psicopedagoga también fue concejala, sindicalista (UGT) y militante de ERC. Del gobierno de su pueblo pasó al gobierno de la Generalitat, como cabeza de la Consejería de Trabajo y Asuntos Sociales.

El Ayuntamiento se halla situado en una plaza que está recorrida por una cinta amarilla. Como la plaza es pequeña y coqueta, parece una bombonera. Bajo los arcos que flanquean el consistorio hay una mesa rectangular con faldones amarillos hasta el suelo. Detrás de la mesa, un hombre y una mujer venden pins, lazos, postales y toda clase de souvenirs independentistas. Sobre la mesa, un libro de firmas permanece abierto para que los ciudadanos muestren su adhesión. Jordana, preocupada por la mujer del cartel, coge el libro y escribe: “Ánimo Dolors, ya queda menos”.

MIÉRCOLES. Alguien se ha dejado periódicos y revistas atrasados en la cocina. Hojeo brevemente ¡Hola! y me detengo en un reportaje gráfico de Isabel Sartorius y César Alierta yendo al Teatro Real para asistir al concierto de Joan Baez.

Las fotos son el mejor testimonio de la realidad. Según el reportaje, Isabel y César siguen siendo novios, y hacen bien. Ella es una mujer hermosa pero esquiva, reacia a las fotos, y él no digamos. Cuando Isabel dejó de ser la novia de España empezó a dar muestras de un comportamiento hostil y prepotente. Se jactaba de pertenecer a una familia pomposa: Vicentón, su padre, era marqués de Mariño, y al separarse de Isabel Zorraquín, la madre de Isabel, contrajo matrimonio con Nora de Liechtestein, una acaudalada princesa que no tenía suficientes paredes para colgar los Rubens y los Rembrant de sus colecciones de arte.

La presunción de Isabel, lejos de aplacarse, fue a más. A los 23 años empezó a presumir de novios. El primero fue Felipe de Borbón, y aunque superaba a los demás en perspectivas de futuro, ellos le ganaban en finanzas. Con Javier Soto Fitz-Jamestuvo a su hija Mencía, y con el fallecido Fernando Ballvé, dueño de Campofrío y Telepizza, se convirtió en empresaria de bolsos y disfrutó del amor y los préstamos. Dicen que aún arrastra las deudas de entonces.

En su lista de novios figuran también Isak Andik, dueño de Mango, y el empresario pontevedrés Gerardo Lorenzo. El resto fueron gente de quita y pon. Amores de relleno. César Alierta es el último hombre en la candidatura de Isabel, aunque quizás deberíamos decir que es Isabel la que aspira a la candidatura de Alierta. Se conocieron durante un viaje de la Fundación Telefónica a Nigeria. Él había perdido a su mujer y pasaba una mala racha, mientras que Isabel se aferraba a su soltería manteniendo el ojo avizor. Los primeros rumores mediáticos señalaban la existencia de un serio disgusto en el entorno de Alierta, cuya familia, conservadora y de firmes convicciones religiosas, no veía bien la relación.

Cesar optó entonces por un noviazgo de perfil más bajo para no perder la confianza de los suyos, en especial de su sobrino Fernando Sáinz de Baranda, hijo de su hermana Juana Alierta, ya fallecida.

La relación de la pareja, sin embargo, se ha fortalecido. Incluso llegó a publicarse que el empresario aragonés le había comprado un piso a Isabel, circunstancia que sus íntimos desmintieron, aunque dada la pésima economía de Isabel, a nadie le sorprendería que el empresario le hubiera echado una manita(o dos). El caso es que la pareja sigue. A su manera, pero sigue. Cada uno en su casa y Dios en la de ambos.
 

Temas Similares

8 9 10
Respuestas
110
Visitas
6K
Back