Opino lo mismo, guapa! Pobre chico...
Creo que los guardaespaldas tienen que estar en todos los detalles,
pero lo más seguro es que su prioridad sea prestar atención a la multitud.
Vamos que puede aparecer un loco/a y hacer un desastre!!!
La verdad es que a mí me provoca temor cuando la gente se lanza
a vitorear y estos personajes se acercan a estrechar las manos.
En el mundo de hoy puede suceder cualquier cosa.
Debe ser un sufrimiento estar atentos a todas las circunstancias.
Claro que estas personas están entrenadas para trabajar de ello,
pero no les envidio el stress al que se ven sometidos.
Y además Letizia debería haber esperado a estar en privado para
regañarle.
Todo mal: le monta un pollo frente a todo el mundo, lo tutea y
encima lo coge del brazo...