Ciento once datos sorprendentes de la Segunda Guerra Mundial.

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Ciento once datos sorprendentes de la Segunda Guerra Mundial
Publicado por Jesús Hernández
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¿Sabías que hubo una batalla en Europa recién acabada la guerra, que Churchill permitió una terrible hambruna en la India o que hubo judíos en la Gestapo? ¿O que muchas de las cosas que tiene en su cocina se originaron en aquella contienda? ¿Conoces los sofisticados trucos que pergeñaron los soviéticos para engañar a los alemanes o los épicos esfuerzos norteamericanos para conseguir algo tan prosaico como suministrar libros a sus soldados?


Cuando parece que ya está todo escrito sobre el conflicto de 1939-1945, el historiador y periodista Jesús Hernández nos demuestra que no es así con Eso no estaba en mi libro de la Segunda Guerra Mundial de la editorial Almuzara. En esta amena obra, el autor acepta el reto de sorprender al lector con episodios que, a buen seguro, no encontrará en sus libros de historia y que tienen como epílogo estos ciento once datos sorprendentes de la Segunda Guerra Mundial:

1. En 1939, en la guía telefónica de Nueva York aparecían un total de 22 personas apellidadas Hitler. En 1945 ya no quedaría ninguna; probablemente optaron por cambiarse el apellido.

2. La batalla más larga de la Segunda Guerra Mundial fue la batalla del Atlántico, que discurriría ininterrumpidamente de 1939 a 1945.

3. La tasa de suicidios en Gran Bretaña cayó durante la guerra un 33 por ciento; cuando finalizó el conflicto, las cifras volvieron a las de 1939.

4. Aunque la Unión Soviética acabó imponiéndose a Finlandia en 1940, el Ejército Rojo perdió 200 000 hombres en la campaña, por solo 25 000 de las fuerzas finlandesas.

5. Antes de la campaña en el oeste, la igualdad entre las fuerzas germanas y francesas era obvia: 114 divisiones y 2800 carros de combate por parte alemana y 104 divisiones y 3000 tanques por parte francesa.

6. Para proteger los edificios de los bombardeos, los británicos utilizaron 400 millones de sacos de arena.

7. En los bombardeos aéreos sobre Gran Bretaña, una de cada 10 bombas no estallaba. En total, unas 40 000 quedaron sin explotar; 750 personas murieron en los trabajos de desactivación.

8. Un perro llamado Rip rescató a un total de 100 personas que habían quedado atrapadas bajo los edificios londinenses derruidos a consecuencia de los bombardeos.

9. En 1940, un industrial norteamericano llamado Samuel H. Church ofreció un millón de dólares a quien fuera capaz de capturar a Hitler, siendo, hasta ese momento, la recompensa más alta ofrecida nunca por un criminal.

10. En la batalla naval del cabo Matapán, librada del 27 al 29 de marzo de 1941, y que enfrentó a británicos e italianos, los primeros perdieron 3 hombres, y los segundos 2303.

11. En 1941, la aviación soviética perdió 10 000 aparatos, por 2100 de la Luftwaffe.

12. Una carnicería portátil del Ejército alemán durante la Segunda Guerra Mundial podía preparar 40 000 raciones de carne de vaca, 24 000 de cerdo o 19 000 de cordero; para ello era necesario sacrificar, respectivamente, 40 vacas, 80 cerdos o 240 corderos.

13. El 16 de septiembre de 1941 se dio la mayor captura de prisioneros en una sola jornada. En las proximidades de Kiev, el ejército alemán hizo un total de 660 000 prisioneros soviéticos.

14. Durante el sitio de Leningrado, que se prolongaría a lo largo de dos años, cuatro meses y diecinueve días, morirían más rusos, entre civiles y militares, que soldados británicos y norteamericanos a lo largo de toda la guerra.

15. El día de Navidad de 1941, 3700 habitantes de Leningrado murieron de hambre.

16. En 1941, un soldado norteamericano ganaba 21 dólares al mes. En 1942, tras la entrada de Estados Unidos en la guerra, el sueldo aumentó a 50 dólares mensuales. Los sargentos cobraban 96 dólares.

17. En solo un mes, marzo de 1942, los alemanes lanzaron un total de 275 ataques aéreos contra Malta.

18. Según una campaña de recogida de metales en Estados Unidos, 10 cubos viejos contenían acero suficiente para fabricar un mortero, 10 hornillos equivalían a un vehículo de reconocimiento y 252 cortacéspedes daban para una batería antiaérea.

19. Las fuerzas armadas alemanas tuvieron un total de 3363 generales a lo largo de la guerra, mientras que las norteamericanas solo tuvieron 1100.

20. El soldado norteamericano medio tenía una altura de 1,73 y un peso de poco más de 65 kilos.

21. Canadá produjo más camiones (815 730 unidades) que Alemania (346 000), Japón (166 000) e Italia (83 000) juntas.

22. Por cada avión derribado en combate, otro avión se perdió debido a accidentes.

23. Los soviéticos fabricaron el doble de piezas de artillería (517 000) que los norteamericanos (257 400).

24. La esperanza de vida de los soldados soviéticos que combatían en la batalla de Stalingrado era de apenas veinticuatro horas.

25. En 1943, en Birmania, de los soldados británicos que debían ser evacuados, solo el 0,8 por ciento era a causa de heridas de guerra, el resto era por enfermedad.

26. De cada 100 soldados del Mando de Bombarderos de la RAF, 51 murieron durante las operaciones, 7 fueron víctimas de accidentes, 3 fueron heridos de gravedad, 12 fueron capturados por el enemigo y uno murió de un disparo sin ser apresado. Solo 24 llegarían a completar un período de operaciones.

27. Los hombres que se alistaban en la marina norteamericana tenían solo un 1,5 por ciento de posibilidades de morir en combate. Los que servían como guardacostas, únicamente un 0,8 por ciento.

28. En la Conferencia de Casablanca, celebrada del 14 al 24 de enero de 1943, a la que asistirían Roosevelt,Churchill y De Gaulle, se consumió una caja de botellas de coñac, tres cajas de botellas de ginebra y otras tres de whisky.

29. El ejército estadounidense calculó las provisiones de papel higiénico por soldado y día en 22,5 hojas. Los soldados británicos debían conformarse con solo tres hojas diarias.

30. El bombardero pesado norteamericano Consolidated Liberator B-24 estaba construido con 1 550 000 partes diferentes.

31. Durante la Conferencia de El Cairo, celebrada del 22 al 26 de noviembre de 1943, en la que se encontraron Roosevelt, Churchill y el líder chino Chiang Kai-shek, los militares de los estados mayores reunidos allí consumieron cada día medio millar de cervezas, 34 de ginebra, 12 de brandy y 8 de whisky.

32. Los dentistas del ejército norteamericano extrajeron 15 millones de dientes, colocaron 68 millones de piezas dentales, y fabricaron 2,5 millones de dentaduras postizas.

33. Según estadísticas de la 8ª Fuerza Aérea de Estados Unidos, para derribar un caza alemán hacía falta emplear una media de 12 700 disparos.

34. Las refinerías alemanas produjeron entre 1942 y 1944, 23 millones de toneladas de combustible. En el mismo período, la producción norteamericana fue de 600 millones de toneladas.

35. En el edificio del Pentágono, inaugurado en Washington en enero de 1943, se sirvieron a lo largo de la guerra 55 000 comidas diarias, al precio de 35 centavos cada una.

36. La artillería antiaérea alemana necesitaba disparar una media de 16 000 proyectiles, de 7 kilos cada uno, para derribar un solo bombardero pesado.

37. Para una misión de dos semanas, la tripulación de un acorazado de la armada estadounidense, compuesta de unos 2000 hombres, podía consumir 15 toneladas de harina, 12 toneladas de carne de vaca, 10 toneladas de patatas, 1 tonelada y media de lechuga y otra de limones, 800 kilos de salmón ahumado, 400 kilos de pescado congelado, 200 kilos de carne de cerdo enlatada y 37 000 huevos.

38. Entre los años 1939 y 1943, en el ejército alemán se registraron unos 250 000 casos de enfermedades venéreas.

39. En total, 100 000 soldados norteamericanos decidieron desertar a lo largo de la contienda, de los que 21 049 fueron sometidos a un consejo de guerra; 49 fueron sentenciados a muerte, pero esta pena tan solo fue ejecutada en un caso.

40. En 1943, durante la campaña de Italia, el ejército británico hizo un estudio que descubrió que, de un pelotón de treinta hombres, solo tres o cuatro combatían realmente; los demás no llegaban a disparar.

41. En el ejército norteamericano se dieron un total de 929 307 casos de fatiga de combate durante la guerra. Se desconoce el número de casos entre las tropas alemanas, ya que este trastorno no estaba reconocido como una enfermedad.

42. Entre los desertores del ejército norteamericano, un 62 por ciento reconoció haber faltado habitualmente a la escuela cuando eran niños.

43. De los 39 000 tripulantes de los submarinos alemanes, 28 000 acabaron sus días en el fondo del mar, es decir, casi tres cuartas partes de la fuerza total.

44. De los 55 800 tripulantes de la marina mercante británica, más de 25 000 murieron ahogados, en un porcentaje cercano al de las unidades de infantería de primera línea.

45. El ejército más peligroso para sus propios integrantes era el soviético; un soldado ruso tenía 30 veces más posibilidades de morir en combate que uno norteamericano.

46. Una encuesta incluida en un estudio oficial sobre el rendimiento de las tropas estadounidenses en combate reveló que una cuarta parte de los soldados estadounidenses se había orinado y una octava parte admitía haberse defecado encima; entre los que experimentaron combate intenso, las proporciones ascendían a la mitad y a la cuarta parte respectivamente.

47. Los mandos aliados en el Norte de África establecieron en 1943 la siguiente tabla de indemnizaciones a la población local por los frecuentes atropellos que se producían al paso de los vehículos militares por las carreteras argelinas: 25 000 francos (unos 500 dólares) por un camello muerto, 15 000 por un niño muerto, 10 000 por un burro muerto y 500 por una niña muerta.

48. Los tribunales militares estadounidenses condenaron a muerte a 443 soldados, 255 de las cuales lo fueron por asesinato o violación, pero solo 70 hombres fueron ejecutados.

49. El 30 de julio de 1943, el submarino alemán U-461 fue hundido en aguas del golfo de Vizcaya por un hidroavión Sunderland de las Fuerzas Aéreas australianas, cuyo número de identificación era también U-461.

50. Los pilotos soviéticos derribaron más de medio millar de aparatos alemanes mediante la desesperada táctica de embestirlos en el aire.

51. Los alemanes requisaron en la Europa ocupada cerca de 4,5 millones de tijeras y más de 6 millones de almohadillas para entintar tampones.

52. Para transportar el petróleo de Texas a los puertos de la costa este, en donde era embarcado con destino al frente europeo, se construyó el que entonces fue el oleoducto más largo del mundo, de 2200 kilómetros.

53. En la Primera Guerra Mundial, aproximadamente el 95 por ciento de las bajas fueron militares y el restante 5 por ciento correspondió a civiles. En cambio, en la Segunda Guerra Mundial, tan solo un tercio de las bajas correspondió a personal militar, mientras que los otros dos tercios fueron civiles.

54. Los norteamericanos lanzaron una campaña de recogida de tubos de pasta de dientes usados; 60 tubos contenían estaño suficiente para soldar todas las conexiones eléctricas de un bombardero B-17. En 16 meses se recogieron 200 millones de tubos.

55. En el Ejército de Estados Unidos, solo uno de cada 56 soldados norteamericanos falleció en combate (un 1,8 por ciento, en total 291 557), mientras que cerca de uno de cada 25 (un 4,1 por ciento) resultó herido pero logró recuperarse. 1 de cada 143 (un 0,7 por ciento) murió a consecuencia de un accidente o de enfermedad.

56. El submarino alemán más exitoso fue el U-48, al hundir 51 barcos mercantes y un buque de guerra.

57. En la construcción de las defensas de la región de Kursk, en el verano de 1943, los soviéticos emplearon a 300 000 civiles.

58. Los Aliados dedicaron más fondos a suministrar cigarrillos a las tropas que los que se emplearon en la adquisición de balas.

59. Los soviéticos recibieron de sus aliados occidentales 15 millones de pares de botas.

60. De los 5 800 000 prisioneros de guerra soviéticos que capturaron los alemanes a lo largo de la guerra, unas dos terceras partes, 3 800 000, habían sido apresados durante los 6 primeros meses de la invasión germana.

61. Un empresario sudafricano ofreció a Eisenhower 10 000 libras si conseguía llevarle a Mussolini para mostrarlo al público en los teatros de Ciudad del Cabo.

62. Las probabilidades de un prisionero de guerra aliado de escapar de su cautiverio en Alemania y llegar a su país para combatir de nuevo eran de 1 entre 28.

63. La fuga de prisioneros de guerra más masiva de la Segunda Guerra Mundial se produjo en el campo de prisioneros de Cowra, en Australia, en agosto de 1944. Un total de 334 prisioneros japoneses lograron escapar del recinto asaltando la cerca. Todos ellos fueron apresados o morirían al cabo de pocos días.

64. En 1944, el entrenamiento de un piloto norteamericano constaba de 330 horas de vuelo, mientras que uno alemán entraba en combate con tan solo 110 horas, debido a la falta de combustible.

65. Para construir la línea de defensas costeras conocida como el Muro del Atlántico, los alemanes emplearon 11 millones de toneladas de hormigón y 1 millón de toneladas de acero.

66. A lo largo de la guerra, el ejército norteamericano encargó un total de 2,3 millones de gafas para sus efectivos.

67. En 1944, la intendencia norteamericana debía proveer a las tropas de 800 000 artículos distintos, ocho veces más de los que tenía entonces a la venta la famosa cadena de grandes almacenes Sears.

68. Entre los soldados norteamericanos, solo 1 de cada 3 tenía el graduado escolar, 1 de cada 4 el diploma de bachillerato y 1 de cada 10 había cursado al menos un semestre de estudios superiores.

69. Los soldados de las Waffen SS tenían un 34,9 por ciento de posibilidades de morir en combate.

70. Para alojar a las tropas estadounidenses en suelo británico, se montaron 400 000 barracones prefabricados y unas 279 000 tiendas de campaña.

71. 70 000 soldados estadounidenses y 47 000 canadienses destinados en Gran Bretaña para participar en el Día D aprovecharon su estancia allí para prometerse o casarse con muchachas inglesas.

72. Para la Operación Overlord, el ejército norteamericano reunió 301 000 vehículos, 1800 locomotoras, 20 000 vagones de tren, 2700 piezas de artillería y 300 000 postes telefónicos.

73. En la preparación del Día D se tomaron un millón de fotografías aéreas de las defensas costeras alemanas.

74. El peso medio de la carga que debía soportar un soldado en el desembarco de Normandía era de 31,25 kilos, cuando el peso máximo recomendado para las tropas de asalto era de 19,5 kilos.

75. El ejército norteamericano utilizó 210 millones de planos durante la campaña europea, la mayoría impresos a 5 colores. Solo para las operaciones en Normandía se distribuyeron 3000 toneladas de mapas.

76. Los expertos del Cuartel General Supremo de las Fuerzas Expedicionarias Aliadas (SHAEF) habían calculado, tras el desembarco de Normandía, un consumo diario en combate de 18 584 kilos por soldado, una cantidad que incluía el combustible, la munición e incluso la goma de mascar.

77. Los soldados aliados occidentales, en su avance por Europa, comían diariamente unas 4000 reses de vacuno y 6 millones y medio de huevos deshidratados, y se fumaban más de 1 millón de cigarrillos.

78. Las tropas norteamericanas consumieron a lo largo de la guerra 29 millones de vacas.

79. En el avance aliado tras el Día D, las municiones se gastaban a razón de más de 2 toneladas por minuto, y la gasolina se consumía a razón de cerca de 4 millones de litros al día.

80. En julio de 1944, el 35 por ciento de los soldados del ejército alemán habían resultado heridos en una ocasión, el 11 por ciento lo habían sido dos veces, el 6 por ciento en tres, el 2 por ciento en cuatro y otro 2 por ciento en más de cuatro ocasiones.

81. En el mes siguiente al Día D, los soldados norteamericanos consumieron 60 millones de raciones de combate.

82. Para abastecer de combustible a las fuerzas aliadas en el continente europeo, a partir de agosto de 1944 los norteamericanos tendieron 22 líneas de tuberías por el fondo del canal de la Mancha.

83. El ejército británico poseía en 1944 unos 600 modelos diferentes de vehículos, lo que le provocaba graves problemas para encontrar repuestos en caso de avería.

84. En la batalla por la isla de Saipán, en julio de 1944, y en la que murieron 3126 soldados norteamericanos, unos 8000 soldados japoneses prefirieron suicidarse a ser hechos prisioneros.

85. Solo 1 de cada 9 kamikazes acertó su objetivo.

86. Por cada barco de guerra de gran calado construido en los astilleros japoneses, los estadounidenses produjeron dieciséis.

87. Durante la campaña europea del ejército norteamericano, cada día se perdían 1200 armas de pequeño calibre y 5000 neumáticos.

88. Un estudio de las bajas de oficiales en dos divisiones británicas reveló que un 4 por ciento eran debidas a disparos accidentales o provocadas por centinelas del propio bando.

89. En 1944, la fuerza aérea estadounidense derribó 3706 aviones germanos solo en operaciones diurnas efectuadas sobre Alemania.

90. Para la Conferencia de Yalta, en la que se iban a reunir Churchill, Roosevelt y Stalin entre el 4 y el 11 de febrero de 1945, la lista de intendencia preparada por los proveedores británicos incluía 144 botellas de whisky, 144 botellas de jerez y 144 botellas de ginebra. Además, un buque transportó 864 botellas adicionales de whisky y ginebra, y 180 botellas de jerez. Se organizó otro envío que incluía varios centenares de botellas de vino del Rin, vermut, ginebra, whisky y champán. Por último, por si las previsiones se quedaban cortas, se encargó al embajador británico en Moscú un envío a Yalta de 48 botellas más de whisky, además de vino, coñac y cerveza.

91. Expertos norteamericanos consideraron que los soldados quedaban agotados definitivamente tras vivir de 200 a 240 días de combate.

92. Los Aliados arrojaron sobre Alemania entre 1944 y 1945 un total de 6000 millones de octavillas.

93. La Cruz Roja estadounidense se encargó de enviar paquetes de ayuda a todos los prisioneros de guerra occidentales en manos del Eje, excepto a los británicos. Suministró un total de 28 millones de paquetes a casi 1,5 millones de prisioneros, de los que solo 115 000 eran norteamericanos, conteniendo 200 000 toneladas de alimentos y medicinas. Se decía que, si los paquetes se hubieran puesto en fila, habrían llegado de Chicago a Berlín.

94. Los paquetes de la Cruz Roja que se enviaban a los prisioneros aliados en Alemania pesaban exactamente 5 kilos, para poder cumplir las normas postales germanas.

95. En una división norteamericana, aunque los fusileros constituían el 65,9 por ciento de sus integrantes, sufrían el 92 por ciento de las muertes. Por el contrario, los artilleros, que eran el 15 por ciento de la división, apenas encajaban un 2 por ciento de pérdidas.

96. Los japoneses causaron solo 6 muertos en el continente americano, todos ellos el 5 de mayo de 1945, al hacer explosión una bomba transportada por un globo.

97. El 28 por ciento de los 95 000 británicos, estadounidenses, canadienses, australianos y neozelandeses apresados por los japoneses murieron en cautividad.

98. Del total de bombas que los aliados occidentales arrojaron sobre Alemania en toda la guerra, el 60 por ciento se concentró entre septiembre de 1944 y abril de 1945.

99. A lo largo de la guerra se hicieron 15 millones de prisioneros de guerra.

100. De cada 5 soldados alemanes que murieron en la guerra, 4 de ellos cayeron en el frente oriental.

101. Si se toman en consideración los ejércitos de todos los contendientes, solo uno de cada 14 soldados participantes en la guerra resultó muerto o gravemente herido.

102. Polonia fue el país que sufrió una mayor cantidad de víctimas en relación a su población: un 17 por ciento.

103. La cantidad de chinos que murieron en la Segunda Guerra Mundial es equivalente a la suma de alemanes, británicos y franceses muertos en la Primera Guerra Mundial.

104. El 80 por ciento de los varones soviéticos nacidos en 1923 murieron en la Segunda Guerra Mundial.

105. De los más de 25 000 miembros de las SS encargados del funcionamiento de los campos de exterminio nazis, tan solo 250 tuvieron que rendir cuentas ante la justicia.

106. Del medio millar de corresponsales de guerra norteamericanos que cubrieron el conflicto, 54 murieron en el frente.

107. La guerra supuso a los contribuyentes norteamericanos un gasto de 296 000 millones de dólares, equivalente a cuatro veces el presupuesto total de Estados Unidos en 2015.

108. Con un último pago de 43 millones de libras, efectuado el 29 de diciembre de 2006, el gobierno británico saldó su deuda de guerra con Estados Unidos.

109. Cada año se encuentran y desactivan unas 5500 bombas en Alemania, a un promedio de 15 diarias.

110. De cada 100 películas bélicas que se producen, 50 están ambientadas en la Segunda Guerra Mundial. Las demás se reparten así: 12 en la Primera Guerra Mundial, 2 en Vietnam, 2 en la guerra de Corea y las 34 restantes en otros conflictos.

111. En Estados Unidos, cada día fallecen de media 1056 veteranos de la Segunda Guerra Mundial.
http://www.jotdown.es/2018/03/ciento-once-datos-sorprendentes-de-la-segunda-guerra-mundial/
 
Excelente artículo sobre tan trascendente tema, que siempre dará que hablar y despertará nuestra curiosidad y permanentes ganas de saber. La Segunda Guerra genera una fascinación y un espanto enormes. Europa bien lo sabe, a cada paso hay una huella indeleble de esta enormidad. Gracias por esto @Serendi. Con todo mi afecto pero también con absoluta imparcialidad, Miss Guerlain.
 
Excelente artículo sobre tan trascendente tema, que siempre dará que hablar y despertará nuestra curiosidad y permanentes ganas de saber. La Segunda Guerra genera una fascinación y un espanto enormes. Europa bien lo sabe, a cada paso hay una huella indeleble de esta enormidad. Gracias por esto @Serendi. Con todo mi afecto pero también con absoluta imparcialidad, Miss Guerlain.
Gracias @Miss Guerlain , siempre puntual y "al quite" en mis posteos lo cual es de agradecer por tus atenciones que colman y plasman tu fidelización, exenta de parcialidad y plena de análisis y deducción del contenido del Hilo de que se trate y que en este caso corresponde a la II G.M.: la cual después de setenta y tres años desde su finalización --el 8 de mayo de 1945-- aún genera multitud de interpretaciones y un "corpus" documental de centenares de miles de trabajos, estudios, libros de no ficción, narrativa de ficción, simulaciones de batallas, uniformes de los distintos ejércitos contendientes, así como recompensas y distintivos.
Saludos,
Serendi.
 
Como ejercicios de simulación de la II G.M. acompaño el celebrado en el 2017 (Operación "Market Garden"), en la ciudad de Murcia (España).
Saludos,
Serendi,

 
Gracias @Miss Guerlain , siempre puntual y "al quite" en mis posteos lo cual es de agradecer por tus atenciones que colman y plasman tu fidelización, exenta de parcialidad y plena de análisis y deducción del contenido del Hilo de que se trate y que en este caso corresponde a la II G.M.: la cual después de setenta y tres años desde su finalización --el 8 de mayo de 1945-- aún genera multitud de interpretaciones y un "corpus" documental de centenares de miles de trabajos, estudios, libros de no ficción, narrativa de ficción, simulaciones de batallas, uniformes de los distintos ejércitos contendientes, así como recompensas y distintivos.
Saludos,
Serendi.
Gracias por tus palabras, muy amables, bien sabes que estoy pendiente de cada uno de tus aportes y que mucho los valoro. Soy tu fan número 1.
Una de las cosas que más me impresionó de Europa, fue justamente la impronta que dejó esa Guerra. Ya sea en los bunkers de la costa de Normandía, como los cristales de la Catedral de St Paul en Londres, como las ruinas de la glorieta de los jardines del Palacio de Schönbrunn en Viena, por citar algunos ejemplos. Muchas cosas reconstruidas pero siempre reservando aunque sea a un lado, las ruinas destruidas en la guerra. Ojalá sirviera como ejemplo de lo que no debe volver a vivirse.
Saludos cordiales,
Miss Guerlain.
 
Última edición:
El manuscrito secreto de Alan Turing, el descifrador del Código Enigma
RedacciónBBC Mundo
  • 13 abril 2015
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El manuscrito data de 1942, cuando Alan Turing intentaba descifrar los códigos secretos utilizados por la Alemania nazi.

Este lunes fue subastado en más de US$1 millón un manuscrito cuya historia es tan espectacular como la del genio que lo escribió hace más de 70 años.

El documento es obra de Alan Turing, el científico británico considerado padre de la informática y visionario de la inteligencia artificial.

Turing, cuya vida fue recientemente tema de la película The Imitation Game, El Código Enigma, descifró el lenguaje secreto utilizado por los nazis y contribuyó según historiadores a nada menos que acortar la Segunda Guerra Mundial.

Pero sus contribuciones brillantes y su patriotismo no lo salvaron de la sociedad opresiva en la que vivía.

Sentenciado por "atentado contra la moral pública" por su homosexualidad, Turing recibió de las autoridades judiciales: la cárcel o la castración química con inyecciones de estrógeno.

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A pesar de sus brillantes contribuciones, Turing padeció la opresión de su época y fue condenado por homosexual. Dos años después se suicidó.

Dos años después de la condena, en 1954, el matemático fue hallado muerto junto a una manzana mordisqueada y embebida en cianuro.

La teoría más aceptada es la del su***dio, pero familiares y amigos sostuvieron una y otra vez que pudo haber sido un accidente.

Turing había dejado en su testamento documentos a su amigo y también matemático Robin Gandy, entre los que se encontraba el manuscrito.

En 1977 Gandy donó los documentos de Turing a los archivos de King's College en la Universidad de Cambridge. Pero mantuvo en su poder hasta su muerte en 1995 el cuaderno casi desconocido del genio británico que es subastado ahora en Nueva York.

La casa Bonhams que realiza la subasta dijo que el vendedor quiso permanecer anónimo.

Sueños

El cuaderno tenía hojas en blanco, e increíblemente, Gandy las usó para sus propias anotaciones. Su psiquiatra le había pedido que escribiera sus sueños y Gandy eligió hacerlo en las páginas del mismo cuaderno de Turing.

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Derechos de autor de la imagenAFP
Image captionLa casa de subastas Bonhams dijo que el vendedor del cuaderno pidió permanecer anónimo.

En el comienzo de su diario personal Gandy escribió: "Parece un camuflaje adecuado escribir entre estas notas de Alan, posiblemente es algo un tanto siniestro; es una figura paterna algunos de cuyos pensamientos he heredado completamente".

El manuscrito de Turing data de 1942, cuando el matemático había sido reclutado por los servicios de seguridad para trabajar en Bletchey Park, el centro donde se realizaban los trabajos para descifrar los códigos utilizados por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial.

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Derechos de autor de la imagenAFPImage caption
En la misma subasta se vende una máquina Enigma, con la que la marina alemana enviaba a sus submarinos mensajes para interceptar los convoyes de abastecimiento que Estados Unidos enviaba a Inglaterra.

En una de las anotaciones del cuaderno Turing reflexiona sobre una notación compleja de cálculo.

"¡Me resulta extremadamente difícil entender la notación de Leibniz, a pesar de ser la que mejor comprendí en otra oportunidad! Ciertamente implica que hay una relación entre x e y, eg. y(igual a)x2+3x"

Espía brillante

El manustricto revela como Turing "siempre estuvo comprometido y dedicado al libre pensamiento en matemática pura", según el historiador Alan Hodges, autor del libro "Alan Turing: el enigma".

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Derechos de autor de la imagenREUTERS
Image captionTuring dejó el cuaderno a su amigo Robin Gandy, que jamás lo entregó a los archivos de la Universidad de Cambridge.

Fue esa inigualable capacidad de pensamiento abstracto que permitió a Turing ser el más brillante de los espías.

Turing permitió descifrar los códigos secretos de la máquina Enigma, con la que la marina de Alemania enviaba a sus submarinos mensajes para interceptar los convoyes de abastecimiento que Estados Unidos enviaba a Inglaterra.

Turing utilizó en su trabajo conceptos de inteligencia artificial y diseñó un computador electromecánico para simular las posibles combinaciones de letras de Enigma.

Inteligencia artificial

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Derechos de autor de la imagenAP
Image caption"Me resulta extremadamente difícil entender la notación de Leibniz, a pesar de ser la que mejor comprendí en otra oportunidad", escribe Turing en un pasaje del cuaderno.

Tras la guerra, en una época sin chips ni transistores, Turing diseñó las bases de una máquina programable que podía resolver operaciones.

El matemático ideó un lenguaje de programación con el que se podía simular todos los pasos que puede ejecutar una máquina siendo el primero en dar una noción precisa de lo que es un algoritmo.

Turing fue un visionario, que estableció además el primer modelo teórico de inteligencia artificial en las máquinas.

Desarrolló el llamado test de Turing, que permite probar la existencia de inteligencia en una máquina.

"Una computadora puede ser llamada inteligente si logra engañar a una persona haciéndola creer que es un humano", escribió.

Perdón

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Derechos de autor de la imagenAFP SHERBORNE SCHOOL
Image captionAlan Turing cuando asistía al colegio Sherborne. A los 13 años recorrió 100 km en bicicleta para no faltar al primer día de clases cuando hubo huelga de trenes.

Recién en 2009, el entonces primer ministro británico Gordon Brown reconoció que Turing había sido tratado en forma "atroz".

En 2013, casi 60 años después de su su***dio, el científico recibió el perdón real de la Reina Isabel II.

Los expertos en Turing esperan que el manuscrito ahora subastado no permanezca escondido otra vez durante décadas, sino que pueda ser estudiado en busca de pistas para comprender mejor la mente y la personalidad del matemático.

La vida del hombre que tanto aportó con su brillantez y tan poco recibió a cambio sigue generando tanta admiración como interrogantes.

http://www.bbc.com/mundo/noticias/2015/04/150413_turing_manuscrito_am
 
U-977: el misterio del submarino nazi en el que Hitler «pudo escapar» en secreto de Alemania
Laureano Clavero y Pere Cardona publican «Segunda Guerra Mundial. 10 historias apasionantes», una obra en la que investigación y archivo se unen para desvelar hechos insólitos de la contienda
Entre las historias incluidas en la obra destaca la de dos sumergibles que se rindieron en Argentina y cuya carga, a día de hoy, sigue siendo un misterio. Uno de ellos, el comandado por Heinz Schäffer, se mantuvo durante años en el punto de mira acusado de haber llevado al «Führer» hasta Argentina

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Manuel P. Villatoro
@ABC_HistoriaSeguir
Actualizado:28/11/2017 15:49h

«German submarine». «Submarino alemán», vaya. Estas fueron las palabras que, el 10 de julio de 1945, recibieron las autoridades portuarias de Mar del Plata (en la costa norte de Argentina). A continuación, y en las aguas de la misma región en la que debía personarse el «ARA San Juan» hace aproximadamente una semana, se dejó ver la gigantesca silueta del U-530. Uno de los «lobos grises» del recientemente caídoTercer Reich. Con todo, esta mole de 76 metros de eslora no llegaba con la intención de plantar batalla, sino de rendirse. La razón era sencilla: el país había mantenido una buena relación con Alemania durante la contienda, y en él serían mejor considerados que en otras como la Francia de la «Resistance».

Por si aquella situación no fuera lo suficientemente llamativa, en poco más de un mes volvió a repetirse cuando se alzó desafiante sobre las aguas de Mar del Plata el U-977, un sumergible tipo VII-C comandado por Heinz Schaffër (de apenas 25 años cuando, a día de hoy y según la Comisión Europea, los españoles se independizan a los 29). En las jornadas posteriores, y al igual que su colega, el capitán germano (recordado por una característica foto en la que luce un bigotillo típico de la Primera Guerra Mundial) fue sometido a un severo interrogatorio en el que se le acusó, incluso, de haber ocultado al mismísimo «Führer» en las bodegas de su nave para salvarle del terror rojo de Stalin.

«Fui conducido ante un grupo de altos oficiales anglo-americanos que integraban una comisión investigadora especialmente enviada a Argentina para poner en claro el “misterioso caso del U-977”. Estos señores eran obstinados: “¡Usted ha ocultado a Hitler! ¡Díganos ya! ¿Dónde se encuentra?”», afirmó posteriormente el mismoSchäffer.

Segunda Guerra Mundial» explica, en declaraciones a ABC, Laureano Clavero (director de cine, autor y fundador de MIRASUD Producciones). Su colega,Pere Cardona (divulgador histórico, creador de la popular página «Historias Segunda Guerra Mundial» y coautor, junto al argentino, de «El diario de Peter Brill»), es de la misma opinión.

Estos dos fogueados autores saben de lo que hablan. No en vano la historia del U-530 y el U-977 es una de las han investigado pormenorizadamente para su nuevo libro: «Segunda Guerra Mundial. 10 historias apasionantes» (Ediciones Oblicuas, 2017). Una obra que se presentará el próximo 30 de noviembre en el Corte Inglés de Portal de l'Àngel (Barcelona) a partir de las 19:00 horas y en la que, además, recogen otros nueve hechos tan curiosos como laparticipación de la mafia del lado aliado en la contienda o los intentos de fuga del castillo de Colditz.

«Se ha especulado mucho sobre la carga que podía llevar el U-977. Se habla de piedras preciosas, jerarcas u obras de arte», añade Clavero. Lo cierto es que no sería extraño que hubiese portado desde cuadros hasta esculturas, pues -como bien señala Cardona- los germanos robaron cientos de estos objetos a partir de 1939.

Segunda Guerra Mundial. 10 historias apasionantes».

-Autores: Laureano Clavero y Pere Cardona.

-Editorial: Ediciones Oblicua.

-Precio 16 euros.

-Presentación: 30 de noviembre en el Corte Inglés de Portal de l'Àngel (Barcelona) a partir de las 19:00 horas.

-Sinopsis: Misterios, enigmas e historias de vidas reales son los elementos principales de estas diez investigaciones apasionantes sobre la Segunda Guerra Mundial. Con este libro nos adentraremos en el mundo de la mafia norteamericana y sabremos como ésta ayudó a los aliados durante la guerra. Descubriremos, con documentación y entrevistas inéditas, la actividad secreta de los espías nazis en las desoladas playas de un pueblo de la costa argentina durante los últimos días del Tercer Reich. Y es, entre otras tantas cosas.

-La portada está tomada en el derruido campanario del pueblo abandonado de Marmellar y se realizó en el marco del proyecto fotográfico de recreación histórica sobre la Segunda Guerra Mundial "Carentan, Bastogne, Normandy" dirigido por Laureano Clavero. En la imagen, un miembro de la «First Allied Airborne Catalunya».

-Dónde se puede encontrar: Página web de la editorial; librerías de España, Argentina y México.

Rendición alemana
Un 8 de mayo de 1945. Fue exactamente en ese punto en el que comenzó nuestra historia. Y es que, en esa fechaKarl Dönitz (sexto «gran almirante» y sucesor de Adolf Hitler) capituló definitivamente ante los aliados. Aquel día no solo ordenó a las tropas que combatían en tierra firme que cesaran las hostilidades, sino que también estableció que los escasos «lobos grises» que todavía permanecían bajo las aguas detuviesen su caza. Ya fuera por mandato del antiguo mandamás de la «Kriegsmarine», o porque a cada capitán le salió del periscopio, lo cierto es que, posteriormente, los capitanes de los submarinos germanos comenzaron la conocida como operación «Regenbogen» o «Arco iris».

¿En qué consistía «Regenbogen»? Extraoficialmente, en que los capitanes de los «lobos grises» saliesen de sus bases, navegasen hasta aguas profundas y, finalmente, hundiesen sus propios «U-Boot» para mantener intacto el honor de la «Kriegsmarine». De esta guisa se marcharon al fondo del mar un total de 232 submarinos (según afirman Miguel del Rey y Carlos Canales en «Una jauría de lobos. Submarinos, 1918-1945»).

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Karl Dönitz, seguido por Speer y Jodl-ABC
Todo este operativo, no obstante, se llevó a cabo desoyendo a los aliados, que habían ordenado a los germanos -según aparece recogido en la revista de divulgación argentina «Todo es historia» (número de 1972)- «subir a la superficie», izar la «bandera o pendón negro», informar de su posición en un «lenguaje claro a la estación inalámbrica más cercana» y navegar hasta el puerto más cercano con los torpedos desarmados.

Con todo, «Arco iris» fue una operación clandestina. Y es que, oficialmente Dönitz se limitó a enviar el siguiente mensaje a las tripulaciones de los «U-Boote»: «La continuación de la lucha es imposible desde las bases que nos quedan. Hombres de los submarinos, sin quebrantar vuestro marcial coraje, deponéis las armas después de una lucha heroica sin igual».

Hacia Argentina
Con esa orden se levantó el capitán Schäffer, un joven oficial que posteriormente se definió como «uno de los ignorados jóvenes sobrevivientes alemanes de la Segunda Guerra Mundial», en el U-977. Sin embargo, al «Oberleutnant» no le convenció lo de hundir su caballo de batalla submarino. Por ello, reunió a la tripulación y les explicó la idea que le rondaba la mollera: escapar hasta Argentina (a más de 10.000 kilómetros). ¿Por qué a esta región? Simplemente, por las buenas relaciones que el país había mantenido con Alemania.

En una extraña muestra de democracia no muy habitual en la «Kriegsmarine», el oficial llevó a cabo una votación entre sus compañeros para establecer el destino que debían correr tanto ellos, como el sumergible.

El resultado fue (tal y como el propio Schäffer explicó en sus memorias) de 30 votos a favor de dirigirse hasta Argentina, 2 de poner proa hacia España y 16 de regresar junto a sus familias. La decisión estaba tomada. Con todo, Schäffer volvió a demostrar un sentido democrático inusitado al permitir a aquellos que lo deseasen desembarca en Bergen (Noruega) de forma clandestina el 10 de mayo. Posteriormente, el U-977 se dirigió a aguas de Gibraltar y, desde allí, inició camino hasta el Nuevo Mundo. No había sido el único. Al fin y al cabo, poco antes había hecho algo similar Otto Wermuth, a los mandos del U-530.

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u-530, el otro submarino germano que se rindió en Argentina
Fue precisamente Wermuth quien arribó el 10 de julio de 1945 a la base del Mar del Plata para rendirse. Y todo ello, para el asombro de las autoridades portuarias argentinas, que no pudieron creerse el mensaje que, en mitad de la noche, les informó de aquella curiosa visita: «Submarino alemán, submarino alemán». La noticia pilló también por sorpresa al mundo, como bien quedó claro en una noticia publicada por el diario inglés «Star»: «El gobierno británico está perpelejo por el anuncio de que un submarino alemán se ha rendido a las autoridades argentinas en Mar del Plata, habiéndose solicitado una información detallada».

Otro tanto sucedió con Schäffer un mes después. Aunque hay que señalar que, para entonces, la armada argentina ya estaba sobre aviso de la llegada de un submarino gracias al teniente de fragata Héctor Migone, quien ya había detectado al sumergible durante una patrulla con su avión Cóndor. En todo caso, así narro el joven a los mandos del U-977 la rendición de su nave el 17 de agosto de 1945: «Ha amanecido. El sol radiante brilla en el cielo. Se puede distinguir la costa argentina a través de los prismáticos. […] La tripulación completa del submarino está reunida en el puente. Nadie tuvo la oportunidad de desembarcar secretamente durante la noche. […] Estando fue de la zona de tres millas, transmitimos señales luminosas».

Interrogatorios
Para cuando los submarinos arribaron a la costa argentina, medio mundo se preguntaba si Hitler había fallecido o no en Berlín. Así quedó claro en multitud de documentos como una conversación transcrita posteriormente entre Stalin yHarry Hopkins, enviado especial del presidente Harry Truman.

Según explica Eric Frattini en «¿Murió Hitler en el búnker?», el líder soviético llegó a desvelar al político norteamericano que, según su parecer, «Hitler no está muerto, está oculto en algún lugar». De la misma opinión era el mariscal Zhukov quien, el 9 de junio de 1945, determinó que no se había «descubierto ningún cadáver que pueda ser definitivamente identificado como el de Hitler». Y lo mismo sucedió en los medios de comunicación como el «Star», que en verano de 1945 publicó: «Siembre se expresaron dudas acerca de la suerte corrida por Hitler y son muchas personas las que se resisten a creer la información sobre su muerte».

Con estos antecedentes, a ningún miembro de la tripulación del U-530 le resultó extraño que, en el interrogatorio posterior a su llegada, las autoridades les preguntaran insistentemente por la posible llegada de Hitler a Argentina en su nave. Los marinos lo negaron. Para sustentar su respuesta señalaron que el «U-Boot» había salido de la base de Kiel el 19 de febrero, mucho antes de que el «Führer» y Eva Braun decidieran acabar con su vida en el búnker de la Cancillería. A pesar de todo, el submarino fue registrado, lo que permitió descubrir que faltaba un bote salvavidas, un hecho que avivó de nuevo la teoría de la conspiración en los diarios internacionales.

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Laureano Clavero posa junto a la portada del libro-ABC
Otro tanto ocurrió en agosto tras la llegada de Schäffer y el U-977. Con la diferencia de que, en este caso, el oficial germano dejó sobre blanco el cuestionario al que fue sometido: «Un día recibí una sorpresa. Fui conducido ante un grupo de altos oficiales anglo-americanos que integraban una comisión investigadora especialmente enviada a Argentina para poner en claro el “misterioso caso del U-977”. Estos señores eran obstinados: “¡Usted ha ocultado a Hitler! ¡Díganos ya! ¿Dónde se encuentra?”. Como yo no podía decirles nada más de lo que ya había declarado a los argentinos, se pusieron impacientes, pues el viaje de mi submarino seguía suscitando vivos comentarios y grandes titulares en los diarios».

A su vez, tanto los capitanes del U-530 como del U-977 afirmaron que no habían hecho ninguna parada en la costa argentina antes de arribar a Mar del Plata. De hecho, el mismo Schäffer destacó en su momento que le había resultado imposible.

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Pere Cardona, coator del libro y fundador de Historias Segunda Guerra Mundial-ABC
«Nadie tuvo la oportunidad de desembarcar secretamente durante la noche. La distancia era demasiado grande. Algunos tripulantes rondaban con la idea de evadirse en el caso de llegar en horas de la noche. ¿Cómo podríamos demostrar que, aparte de los miembros de la tripulación, no bajaron a tierra, ciertos personajes buscados?».

¿Desembarcos clandestinos?
En este punto es en el que comienza la investigación de Clavero y Cardona. Y es que, en base a entrevistas llevadas a cabo en las cercanías de Mar del Plata, han llegado a la conclusión de que los oficiales del U-530 y el U-977 mintieron vilmente.

«A los dos capitanes se les hizo un interrogatorio que fue publicado. Y, tras analizarlo, se puede ver que tuvieron contradicciones. La realidad es que cuando se entregaron en ambas naves faltaban botes salvavidas,tripulación, libros de bitácora... Además, tras varios años de análisis y de buscar en la zona, hemos hallado a varios supervivientes que confirman que, en esos meses, algunos germanos llegaron a las costas bajo un total secretismo», señala el autor argentino a ABC. Con todo, ambos están de acuerdo es que es casi imposible que uno de ellos fueseAdolf Hitler.

Uno de los testigos a los que los autores se refieren es Osvaldo Aramendi, a quien entrevistaron en 2007 -cuando sumaba 86 años-. En palabras de Clavero, este anciano disponía de una casa en Mar del Sud (ciudad ubicada a 70 kilómetros de Mar del Plata y, por entonces, con una escasa población). Fue precisamente en ese punto en el que vislumbró algo que se quedó grabado en su memoria allá por 1945: «Tendría unos quince años y estaba en las dunas de la playa cuando, de repente, emergió una torreta en el mar, a unos 150 metros de la costa». Según les desveló este testigo, fueron muchos los que se acercaron a la playa para fijar sus ojos en aquella mole. Pero, para su desgracia, aquel gigante de metal no volvió a dejarse ver. «Días más tarde, nos enteramos de que dos submarinos alemanes se habían rendido», les añadió.

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Declaración de Einckenberg, obtenida por Clavero y Cardona
Sin embargo, los testimonios de los que más orgullosos se encuentran son los de las hijas y la nieta de Karl Gustav Einckenberg, un empresario germano afincado en Mar del Sud que, a finales de la contienda, se convirtió en una de las piedras angulares de la red que permitió hacer llegar hombres y diferentes materiales desde la Alemania nazi hasta Argentina mediante los «lobos grises».

Este germano contrató, en palabras de los autores, un velero que recibía a los submarinos en las cercanías de la costa, recogía la carga destinada a los nazis ubicados en la zona y, finalmente, volvía a su hogar. Posteriormente, y gracias a una serie de camiones, los soldados y las mercancías eran llevadas hasta la hacienda de nuestro protagonista, llamada «El Porvenir».

Según el investigador, las hijas y la nieta de Einckenberg les corroboraron las andanzas del colaboracionista. «La leyenda siempre existió. Pensamos que tenía que haber algo de verdad en ella y nos dedicamos a entrevistar a testigos directos o indirectos de la llegada de submarinos. El investigador Julio Mutti también nos ofreció muchísima documentación de primera mano sobre ello», añade.

A su vez, han tenido acceso a antiguos trabajadores de la hacienda que les han señalado que, en ella, se escondieron germanos al final de la Segunda Guerra Mundial. «Hemos podido entrevistar a un testigo que entonces tenía diez años. Nos ha desvelado que, en varias ocasiones, su prima Charra llevó comida a unas dependencias de la hacienda en la que había unos “hombres extranjeros” que no le permitieron ver. Solo pudo saber que eran alemanes», añade Clavero a ABC.

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U-977, el submarino que se rindió a Argentina-ABC
En palabras de Clavero y Cardona, este testigo les contó que uno de esos extraños viajes a la hacienda se sucedió en los días previos a que el U-530 y el U-977 arribaran a las costas argentinas. «Está claro que hubo desembarcos, pero a día de hoy todavía no se sabe qué, o a quién, llevaron a tierra. Posteriormente Einckenberg fue traicionado por uno de sus colaboradores y estuvo un año en prisión. Según los testimonios, para encubrir una gran operación... ¿Cuál era? De momento, es imposible saberlo», completa el argentino a este diario.

Con todo, el también director de documentales es tajante: «Si me preguntas mi opinión personal, te diré que no creo que trajeran a Hitler. Pero sí pudieron llevar a algún jerarca. Según nos han desvelado, se cree que su cargamento pudo ser hasta de piedras preciosas».

¿Arte?
¿Qué diantres llevaban el U-530 y el U-977 en su interior? Si es que portaban algo... Las respuestas se acumulan por decenas. De hecho, Clavero afirma que los comandantes incluso podían atesorar obras de arte. Algo que no resultaría raro pues, como bien explica Cardona a ABC, los nazis se hicieron con cientos de ellas en su avance inexorable a través de Europa.

«Aunque compraron algunas con la venta de objetos como sellos con la efigie de Hitler, la mayoría las saquearon directamente. El mayor ladrón fue Hermann Göring, que engrosó su colección personal durante la Segunda Guerra Mundial siguiendo al ejército y dando indicaciones a los nazis de qué museos debían robar», completa el fundador de «Historias Segunda Guerra Mundial».

Después de que los aliados iniciasen su avance a través de Europa, los alemanes se encontraron de golpe con dos problemas: cubrir aquellos tesoros de los bombardeos enemigos y llevarlos de vuelta a Alemania para que no fuesen recuperados. «Al final, terminaron escondiéndolas en emplazamiento como las minas de sal de Altaussee. Allí se hallaron, tras la contienda, cuadros de pintores como Picasso, Miguel Ángel... Sucedió lo mismo en otros emplazamientos como el castillo de Neuschwanstein», completa el divulgador histórico.
http://www.abc.es/historia/abci-u-9...ar-secreto-alemania-201711280142_noticia.html
 
Sobre el tema de la huida de Hitler a Argentina, pongo este video.
Carlos Perciavale, actor uruguayo-argentino, de reconocida trayectoria, relata en primera persona una anécdota vivida con la desaparecida y también prestigiosa actriz urugauayo-aregntina China Zorrilla, en la que dice haber vistoa Hitler y Eva Braun en Bariloche, hace muchos años atrás.
Comienza en 1:12
Aclaración para una mejor comprensión del relato: Bariloche es desde hace muchos años la ciudad a la cual van los estudiantes en su viaje de egresados, por eso hace referencia a que en aquella época no había tantos chicos como ahora. Evidentemente era una ciudad más solitaria, en la Patagonia argentina, bastante remota, a 1400 km de la ciudad de Buenos Aires.

 
Bariloche Pacto de silencio - Erich Priebke


A @Miss Guerlain , impulsora y "alma mater" de este Hilo,
Con mi afecto y reconocimiento,
Tu Serendi

Gracias enormes por tamaño regalo, Serendi. Tan solo soy tu compañera, tu co-equiper, tu cómplice, tu musa, aquí y en la vida. Juntos transcurrimos el enorme placer de compartir los intereses comunes y el buen vivir. Qué más pedirle a la vida?
La creatividad de este hilo: tuya. Mi aporte: la compañía hoy y siempre.
Tuya, Miss Guerlain.
 
Gracias enormes por tamaño regalo, Serendi. Tan solo soy tu compañera, tu co-equiper, tu cómplice, tu musa, aquí y en la vida. Juntos transcurrimos el enorme placer de compartir los intereses comunes y el buen vivir. Qué más pedirle a la vida?
La creatividad de este hilo: tuya. Mi aporte: la compañía hoy y siempre.
Tuya, Miss Guerlain.

Para regalo que estés en mi vida,
que tengamos la dicha
de compartir sueños
sembrar ilusiones
y unir proyectos,
todos juntos
a modo de contrapunto;
de la pantalla a la vida..
la que contigo quiero vivir,
Serendi, a su @Miss Guerlain, sueño y sustancia, rompiendo distancias; acercando vidas.
 
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