Mejor que no abra su boquita de piñón y nos obsequie con fotos a caballo o con su novio, es lo suyo. Y no es crítica, es la pura realidad A mi no me molesta que sea una niña mimada y hasta me hacen gracia sus idas y venidas sentimentales, pero que se nos ponga intelectual, no Charlotte, hija, eso ya es demasiado.