Hola.
Sobre Leti.
Lo acabo de decir.
(Disculpas, tu respuesta me ha inspirado decir algo parecido a esto).
Mucho de su comportamiento absurdo, grosero e inexplicable, le viene dado por el idioma.
Cuando le hablan en inglés no entiende a nadie.
Tiene pánico de quedarse sola junto a alguien que no hable español.
Ella lleva sus frases preparadas, pero claro, muy limitadas, las suelta para que quede constancia y se vea en las fotos que habla.
El problema le viene cuando le hablan.
Todo por orgullo.
Podría hablar con tranquilidad con todos si aceptara que Felipe y cualquiera de todos los que saben inglés-español le hicieran de traductores. Ella no lo acepta. No sabe que no se trata de hablar mucho, se trata de hablar con el corazón.
Es incapaz de actuar honestamente y con humildad y de ahí sus cosas absurdas.
Adhiero palabra por palabra, querida Kasi.
Mira me voy a remitir a mi persona porque creo que aplica para explicar lo que afirmo.
Empecé a aprender inglés a los 6 años. Fue un aprendizaje casi simultáneo con mi lengua de origen.
He tenido y tengo la oportunidad de viajar y siempre ha sido una herramienta estupenda.
Es muy reconfortante saber que uno se puede comunicar sin problemas.
De más adulta se me antojó (la abuela de mi padre era francesa y creo que lo intenté para darle
el gusto a él) y empecé a estudiar francés. Está demás decir que me va fatal con ese idioma y que
si bien lo puedo hablar de manera correcta, cuando he viajado a Francia la he pasado fatal.
Me pongo muy nerviosa y no puedo entender nada. Recurro a mis frases armadas y me defiendo
pero me es imposible mantener una conversación duradera con otra persona.
Es ver a Letizia y veo mis propias actitudes cuando debo utilizar el francés. Quedo muy mortificada.
Por eso subscribo tu comentario de principio a fin. Y adhiero a tu opinión: si se dejase ayudar
todo fluiría de una manera simple y la pasaría mucho mejor.
Sospecho que su orgullo (mal entendido) siempre le juega malas pasadas.
Saludos, guapa!