Caso Susana Ruiz, 1993, sin resolver

Encontré este artículo, pero no se dan nombres:

Susana Ruíz Llorente tenía 16 años y era la hija de una pareja de Palacios de la Sierra, Burgos, emigrada a Madrid. Vivían en el instituto donde su padre era conserje. Desapareció la madrugada del 9 de enero de 1993, cuando volvía, atravesando un descampado entre Coslada y Vícalvaro, de la fiesta a la que había acudido en una casa abandonada. Su cadáver fue encontrado mes y medio después en esa zona mil veces rastreada, con los pantalones bajados, la cabeza destrozada y la nuez y un diente rotos, en estado ya de descomposición.

A pesar de ello, se dio el tema por muerte natural, pero pasado un tiempo, dos ex neonazis de Bases Autónomas, uno desde la cárcel y el otro a través de una cinta grabada antes de escapar de las posibles consecuencias, culparon a varios de sus antiguos compañeros de andanzas, asegurando que si no se resolvía el caso, era por las poderosas e influyentes familias a las que pertenecían los sospechosos. Sus nombres acabaron saliendo, pero para cuando fueron llamados a declarar, de los 4, uno se había suicidado, otro había muerto en accidente de coche… Finalmente se archivó el caso una vez más.
 
Por otro lado esta noticia publicada en El Mundo hace casi veinte años:

La esposa del sospechoso del crimen de Susana Ruiz declara que su marido mató a tres chicas

La mujer asegura que el acusado asesinó a Beatriz Agredano y Rosana Maroto


Angela Martínez Gómez, la esposa del principal sospechoso por el crimen de Susana Ruiz, ha declarado ante el ante el juez de instrucción de la Sección 16 de Madrid, José Emilio Coronado, que su marido Angel Antonio Belinchón fue el autor de las muertes de Susana Ruiz, en 1993; de Beatriz Agredano, en 1997; y de Rosana Maroto, la joven desaparecida en Valdepeñas (Ciudad Real) en 1998.

Angela Martínez afirmó que en diferentes visitas a la cárcel, donde se encuentra su esposo en régimen preventivo como presunto autor de la muerte de Beatriz Agredano, él mismo le confesó haber matado a las tres chicas.

"De lo de Beatriz me enteré el día 18 de julio de 1999 y lo de Susana me lo contó en noviembre del año 2000, mi marido me lo confesó porque confiaba en mí, pero hay que hacer Justicia y yo se lo he dicho todo a la Policía y al Juez", añadió.

Martínez describió el modo en el que su esposo y un amigo de éste, de nombre Juan, supuestamente abordaron a Susana Ruiz en un descampado de Vicálvaro en el año 1993, abusaron de ella, la mataron y la enterraron, o el modo en el que pudieron haber asesinado también a Beatriz Agredano cuatro años después. "Yo hice la llamada anónima que permitió a la Policía detener a mi marido", aseveró.

Rosana Maroto

De acuerdo con las confesiones de su marido, él y su amigo Juan también habrían abordado a la joven Rosana Maroto cuando ésta paseaba en junio de 1998 con su bicicleta por un descampado de Valdepeñas, en Ciudad Real, la habrían matado y enterrado en una cueva.
La mochila de Rosana Maroto apareció en el mismo descampado y su bicicleta fue hallada oculta en un pozo, aunque el cuerpo todavía continúa desaparecido.

Angela Martínez aseguró haber manifestado ante el Juez "toda la verdad". "Yo le he contado al juez de instrucción todo lo que mi marido me confesó, he sido valiente y sincera, y la Justicia está ahí para investigarlo", concluyó.

Cuarta reapertura del caso

La reapertura del caso de Susana Ruiz el pasado 24 de septiembre se produjo después de que la Sala del Juzgado de Instrucción número 28 de Madrid dedujese el testimonio prestado el 7 de noviembre de 2000 por Angela Martínez, en el que ésta acusaba a su marido de los crímenes de Suasana Ruiz y Beatriz Agredano. Se trata de la cuarta vez en que la autoridad judicial decreta la reapertura del caso.

Según manifestó el letrado que representa a los padres de Susana Ruiz, Hermenegildo Pérez Bolaños, en noviembre del pasado año Angela Martínez acusó a su marido de ser el autor de los crímenes de las dos chicas.

Por este motivo, la Sala del Juzgado número 28 dedujo testimonio de las declaraciones de la mujer y lo remitió al Juzgado número 16, que tramita el esclarecimiento del crimen de Susana Ruiz, por si la Sala estimaba necesaria la reapertura del caso.
 
No.

Tiempo después apareció en las noticias que un ex miembro de Bases Autónomas había señalado a dos integrantes como autores de la muerte, pero no se llegó a nada.

Según se comentó eran hijos de dos cargos políticos importantes.
Hubo en total dos ex miembros de Bases Autónomas que señalaron a los posibles asesinos de Susana.

El primer acusador surge unos pocos meses después de que el caso se cierre por la juez por primera vez. La madre del acusador dice tener una cinta grabada por su hijo, en la que acusa a 4 miembros de Bases Autónomas, 2 de ellos fallecidos recientemente en extrañas circunstancias. El acusador tarda bastantes meses en ser localizado, y cuando es interrogado no responde ninguna pregunta ni ninguna cuestión acerca del caso.

Posteriormente, el caso vuelve a ser cerrado por la juez, y casualmente, a los poquitos meses, el director de la prisión de Guadalajara dice que unos de sus presos ha estado "aireando" en repetidas ocasiones que conoce a los implicados en la muerte de Susana. Este acusador además testifica que fue testigo pasivo del asesinato. Centra las miradas en varios cabecillas de Bases Autónomas, ya que él también fue un miembro de esta organización ultraderechista, pero por desgracia, es interrogado y no da ningún nombre, solo señala que los implicados son hijos de gente importante y que tienen relación casi directa con la juez Ferrer.

Cuando testifica esto, este acusador está a punto de ser puesto en libertad y argumenta que mientras siga en la cárcel no se chivará de nadie más. La realidad es que nunca se supo más, pero el caso siguió abierto un tiempo más y se pudo hacer una segunda autopsia que desentrañó lo que realmente pudo haber ocurrido.
 
Respecto al caso de Beatriz Agredano, en ABC:

Por su parte, los abogados de Ángel Antonio Belinchón Castro y Antonio Sánchez López articulan su defensa en que la confesión «fue fruto del nerviosismo» y en que «sólo la acusación de la esposa de «Belinchón» llevó a la Policía a detenerles, más de tres años y medio después». «Ángela sufría malos tratos constantes y sólo está actuando por instinto de venganza, de que no salga de la cárcel», señaló María Lidon, letrada de «Juanito».

Es más, las defensas insisten en que las pruebas periciales no confirman esta declaración. La sangre que se encontró bajo las uñas de la joven no pertenece a ninguno de los dos, y las pruebas de ADN cotejado con el hallado en colillas y pañuelos en el lugar de los hechos también fueron negativas. Para la acusación, esta circunstancia se debe simplemente a que participaron más personas. «»Belinchón» confesó que iban cuatro hombres en un coche, y eso es lo que creemos», dijo David Díaz Villasante.

Además, los abogados de los inculpados hacen hincapié en que «Belinchón» presenta una discapacidad psíquica y «Juanito» era alcohólico. En este sentido, la acusación incide en que ambos trabajaban y vivían autónomamente. Por ello, el abogado de la acusación popular, Marco Gómez de la Serna, solicitó que se incluyera el testimonio del jefe de la cuadrilla de construcción en la que ambos estaban empleados, y de su hijo, también albañil. El juez lo denegó. «Trabajaron el día anterior, el día del crimen y el posterior. Los dos testigos habrían tenido mucho que decir», se lamentó Esteban Ibarra.

Asimismo, el magistrado de la sección sexta también rechazó una inspección ocular del cerro de Almodóvar, que pidieron las defensas, porque «han pasado seis años y podría introducir elementos de confusión en el Jurado». El letrado de «Belinchón», Jacinto Romera, quiso también que se adjuntaran las actuaciones abiertas en contra de su cliente en el juzgado de instrucción número 16 de Madrid, por el caso de Susana Ruiz, y en un juzgado de Valdepeñas (Ciudad Real), por la muerte de Rosana Maroto. El juez también se opuso. «Ángela Martínez le ha imputado otras dos muertes que ya están archivadas», señaló. «Por falta de pruebas», le recordó Villasante.

Romera llegó a comparar este caso con el de Joaquín José Martínez en el corredor de la muerte. «Es indignante», dijo Ibarra.
 
Por otro lado esta noticia publicada en El Mundo hace casi veinte años:

La esposa del sospechoso del crimen de Susana Ruiz declara que su marido mató a tres chicas

La mujer asegura que el acusado asesinó a Beatriz Agredano y Rosana Maroto


Angela Martínez Gómez, la esposa del principal sospechoso por el crimen de Susana Ruiz, ha declarado ante el ante el juez de instrucción de la Sección 16 de Madrid, José Emilio Coronado, que su marido Angel Antonio Belinchón fue el autor de las muertes de Susana Ruiz, en 1993; de Beatriz Agredano, en 1997; y de Rosana Maroto, la joven desaparecida en Valdepeñas (Ciudad Real) en 1998.

Angela Martínez afirmó que en diferentes visitas a la cárcel, donde se encuentra su esposo en régimen preventivo como presunto autor de la muerte de Beatriz Agredano, él mismo le confesó haber matado a las tres chicas.

"De lo de Beatriz me enteré el día 18 de julio de 1999 y lo de Susana me lo contó en noviembre del año 2000, mi marido me lo confesó porque confiaba en mí, pero hay que hacer Justicia y yo se lo he dicho todo a la Policía y al Juez", añadió.

Martínez describió el modo en el que su esposo y un amigo de éste, de nombre Juan, supuestamente abordaron a Susana Ruiz en un descampado de Vicálvaro en el año 1993, abusaron de ella, la mataron y la enterraron, o el modo en el que pudieron haber asesinado también a Beatriz Agredano cuatro años después. "Yo hice la llamada anónima que permitió a la Policía detener a mi marido", aseveró.

Rosana Maroto

De acuerdo con las confesiones de su marido, él y su amigo Juan también habrían abordado a la joven Rosana Maroto cuando ésta paseaba en junio de 1998 con su bicicleta por un descampado de Valdepeñas, en Ciudad Real, la habrían matado y enterrado en una cueva.
La mochila de Rosana Maroto apareció en el mismo descampado y su bicicleta fue hallada oculta en un pozo, aunque el cuerpo todavía continúa desaparecido.

Angela Martínez aseguró haber manifestado ante el Juez "toda la verdad". "Yo le he contado al juez de instrucción todo lo que mi marido me confesó, he sido valiente y sincera, y la Justicia está ahí para investigarlo", concluyó.

Cuarta reapertura del caso

La reapertura del caso de Susana Ruiz el pasado 24 de septiembre se produjo después de que la Sala del Juzgado de Instrucción número 28 de Madrid dedujese el testimonio prestado el 7 de noviembre de 2000 por Angela Martínez, en el que ésta acusaba a su marido de los crímenes de Suasana Ruiz y Beatriz Agredano. Se trata de la cuarta vez en que la autoridad judicial decreta la reapertura del caso.

Según manifestó el letrado que representa a los padres de Susana Ruiz, Hermenegildo Pérez Bolaños, en noviembre del pasado año Angela Martínez acusó a su marido de ser el autor de los crímenes de las dos chicas.

Por este motivo, la Sala del Juzgado número 28 dedujo testimonio de las declaraciones de la mujer y lo remitió al Juzgado número 16, que tramita el esclarecimiento del crimen de Susana Ruiz, por si la Sala estimaba necesaria la reapertura del caso.
El caso se cierra y se reabre en numerosas ocasiones debido a muchas declaraciones de personas que dicen conocer a los verdaderos asesinos, a mi me parece muchísima casualidad que pasara 4 o 5 veces esto.

La realidad es que la policía nunca consiguió crear una relación entre la adolescente, la noche de los sucesos y los diversos "sospechosos" que fueron surgiendo con el devenir de los años.
 
Me llama la atención que la chica a la que asesino Ángel Antonio Belinchón y su compinche, también sufrió un traumatismo craneoencefálico producido por una piedra de gran tamaño. Le confesó a su mujer que asesino a Susana Ruiz, en 1993; a Beatriz Agredano, en 1997 y a Rosana Maroto pero Belinchón tenía problemas mentales, Rosana fue víctima del asesino de Valdepeñas. Susana, no se sabe aún y sólo pudieron probarle el crimen de Beatriz.
 
Me llama la atención que la chica a la que asesino Ángel Antonio Belinchón y su compinche, también sufrió un traumatismo craneoencefálico producido por una piedra de gran tamaño. Le confesó a su mujer que asesino a Susana Ruiz, en 1993; a Beatriz Agredano, en 1997 y a Rosana Maroto pero Belinchón tenía problemas mentales, Rosana fue víctima del asesino de Valdepeñas. Susana, no se sabe aún y sólo pudieron probarle el crimen de Beatriz.
Como curiosidad acerca de ese asesinato ocurrido en 1996, tres años después del de Susana, ocurrió en el barrio de Vicálvaro, la mujer de Belinchón asegura que en el año 2000 le confesó que él y su compinche el "Juanito" se habían encontrado a esta adolescente en un descampado y la habían matado.
 
A mí lo que me tienen anonadada es que en primer lugar se determinara la muerte de Susana como natural...
Esto es algo que os ha llamado la atención a varios/as, la respuesta que encuentro a esta cuestión es que los médicos encargados de hacer la primera autopsia fueron dos que no estaban para nada especializados en asuntos forenses y de medicina especializada, simplemente eran médicos que se encontraron con el cuerpo y con la responsabilidad de hacer la autopsia.

Según cuentan los periodistas en 1993, la autopsia tardó más de lo previsto, y si bien la policía había informado a los periodistas que se había encontrado el cuerpo con claros signos de violencia, la autopsia meses después lo desmintió.

Esto último hizo que los investigadores y la juez determinara que la adolescente tuvo un paro cardíaco debido al consumo de drogas y alcohol justamente cuando se paró a miccionar.

Algo tremendamente curioso, que nunca podremos comprobar, es que los jóvenes de la fiesta afirmaron en varias ocasiones que ella apenas bebió y apenas fumó, y luego la autopsia determinó que era casi imposible saber cuánto había tomado aquella noche la adolescente, debido al estado en el que se encontró el cuerpo.
 
Fue un caso que no se quiso investigar.
Por lo que fuese no interesaba y los padres no pudieron ir más allá. Una pena.
La familia de la adolescente pertenecía a clase media baja, si bien en los primeros meses los medios de comunicación se preocuparon del tema, una vez que en 1994 se cerró por primera vez el caso, quedó totalmente abandonado de investigación.

Los padres de la víctima siempre se quejaron de que la juez pusiera complicaciones para que el profesor Frontela hiciera una segunda autopsia, así como el abogado que contrató la familia también culpó a la juez de que nunca hubiera un careo entre los muchos sospechosos y testigos que hubo en los primeros meses.
 
El caso se cierra y se reabre en numerosas ocasiones debido a muchas declaraciones de personas que dicen conocer a los verdaderos asesinos, a mi me parece muchísima casualidad que pasara 4 o 5 veces esto.

La realidad es que la policía nunca consiguió crear una relación entre la adolescente, la noche de los sucesos y los diversos "sospechosos" que fueron surgiendo con el devenir de los años.
Es todo muy confuso.

Tampoco entiendo qué necesidad tenía de mentir el recluso sobre los sospechosos de Bases Autónomas.
 

Temas Similares

2
Respuestas
14
Visitas
2K
Back