CASO ALCASSER


como la cita inicial salió rara, creo que la recita tb va a salir rara

Ricart no es un chalado que pasaba por ahí,era coetáneo al crimen, conocedor de la zona donde fueron, encontradas, conocedor de Angles y muchas cosas de las que dijo encontraron sustento, obviamente esto no garantiza que todo lo que diga fuera cierto, tb dijo muchas mentiras

Aunque ricart no hubiera ni existido o no atrapado hay cosas tangibles que se descubrieron desde el dia del levantamiento o días posteriores que habrían descubierto igualmente sin su existencia

-que frecuentaban la zona,el que mas, antonio
-que el arma del crimen es compatible con la que se agenció MAuri y acabó dándosela a Antonio
-pendiente en la caseta,que no lo encuentra ricart
- fosa preutilizada para moto robada que conducia Antonio, cosa que tampoco lo dice ricart sino MAuri Y Ricardo
-Vendas de ataduras en cuerpo iguales a las que angles usaba para taparse los tatuajes

asi que es mucho mas factible y esta mucho mas sustentado que fuera asunto de angles y colegas, no solo pq ricart lo diga, que palabras anyos después,de investigadores que ni estuvieron allá en ese momento digan "asunto de poderosos en pacto de sangre o chantaje al estado" o simplemente "poderosillos locales" y no aporten nada tangible para sustentarlo, ningún indicio de poderosidad; simplemente, es algo dicho. como otros han dicho "sectas satánicas" sin indicio tampoco

Si fueran poderosos no habrían aparecido los cuerpos; Que "aparezcan y se culpe a otro" es peor idea; si ni aparecen el caso se olvida,como tantos otros, 2 que desaprecieron en Aguila de Campoo por ejemplo y que a los 3 meses ya nadie se acordaba de ellas: y si aparecen peude aflorar algúna prueba de esos supuestos poderosos, y hay sospechosos que acaban resultando dudosos la gente se plantea alternativas, el caso sigue en candelero, hay un juicio, etc

y el papelito realmente no es prueba fundamental de nada; del asesinato seguro que no, nadie dice tampoco que lo arrojó ahí justo a la vez de los asesinatos; un indicio de basura mas de que frecuentaban la zona de caseta y fosa, igual que había muchos mas, papel denuncia de trafico a nombre de Roberto angles en la caseta, ropajes escondidos en matorrales que fueron identificados como de esta gente, la declaración misma de Mauri y ricardo que dicen que sí,que frecuentaban la zona, adhesivos de la moto que robaron etc
para lo único que sirvió es para presentarse al cabo de unas horas del hallazgo en casa de los angles... e inicialmente para detener a Enrique, ni siquiera a Antonio
 
sigo un poco con el tema de Anglés; ya lo pongo es spoiler.
yo no sé qué pensar, si está vivo o muerto.
de estar vivo, Ricart tendría miedo aún de él¿? no creo q fuera tan tonto de ir a por él..

Alcasser-Asesinatos-Fuga_de_presos-Reportajes_306483174_77355071_1024x576.jpg

[se tiñió las cejas tbn..¿? en esa foto me da mucho asco]

Actualidad_306481383_77306467_854x640.jpg

ficha policial completa Antonio Anglés Martins [pone Martínez ¿? no lo veo bien]

Alcasser-Asesinatos-Fuga_de_presos-Reportajes_306481368_77306039_1024x576.jpg

el capitán del barco en el que Antonio Anglés fue visto por última vez

Actualidad_306481384_77306483_1024x576.jpg

city of Plymouth. Se ve el bote salvavidas en el que se cree que Anglés pudo escapar

Actualidad_306481388_77306605_855x1140.jpg

el Fugitiu, la portada del libro que investiga la fuga de Antonio Anglés

"Anglés, el asesino de las niñas de Alcàsser, está vivo. Un marinero le ayudó a escapar del barco"

La exhaustiva investigación de dos periodistas concluye que el asesino de las niñas de Alcàsser no murió ahogado como se creía hasta ahora.

Sesenta testimonios, muchos de ellos inéditos, les han ayudado a reconstruir una fuga de película.


12 mayo, 2018 01:41

“Aquellos días, todo el mundo hablaba del asesinato de las niñas”.

Rafael (nombre ficticio) llega nervioso a la comisaría de Madrid Centro. Por desgracia, la tarde ha sido para recordar. Es de noche, es 25 de febrero de 1993 y es un día que se desmorona. Acaban de robarle el coche a punta de pistola en la Plaza de Tirso de Molina, en el centro de la ciudad. Piensa en todo lo que acaba de vivir mientras espera en la cola de la comisaría, dispuesto a interponer la denuncia. Cuando llega su turno, le piden que describa al ladrón. Al relatar lo ocurrido, uno de los detalles que ofrece pone a los agentes en alerta y a la comisaría patas arriba. Rafael no le dio demasiada importancia, pero le llamaron la atención las manos de aquel hombre que le había asaltado un par de horas antes: las tenía llenas de arañazos. El detalle resultó crucial.

Casi al instante, se monta un jaleo tremendo en las dependencias policiales. Los agentes introducen a aquel hombre en una sala para tomarle declaración. Sacan unos álbumes enormes, repletos de fotos con las caras de los delincuentes más buscados. Rastrea con la mirada y, de pronto, el hombre se detiene en una foto. Se trata de un rostro duro, con las mandíbulas apretadas, ojos casi rasgados, pálido, blanco como la leche, tráquea marcada en el centro del cuello y pelo negro como el azabache. Eso sí, negro teñido. “Es ese”, advierte. No hay duda. Se trata de Antonio Anglés, el hombre más buscado de España, el asesino huido de las niñas de Alcàsser.

¿Por qué les había llamado la atención a los agentes el detalle de las manos?, les preguntó. Antes de contestarle, le piden a Rafael que empiece a relatar lo ocurrido.

Rafael trabajaba como informático en uno de los ministerios del Gobierno de España. Aquel día había quedado con sus amigos para ver una obra de teatro de Los Morancos, pero antes tenía que pasar a dejar unos papeles en un despacho de abogados cerca de Tirso de Molina. A las ocho y media de la tarde, Rafael aparcó su Renault 21 en una acera de la céntrica plaza de la capital. Subió al despacho, pero ya estaba cerrado. Mala suerte. Ya volveré otro día. Luego todo sucedió muy rápido.

Al acercarse al coche, un individuo le abordó junto al vehículo, le apuntó con una pistola y le dijo: “Métete dentro”. Rafael se puso al volante y el hombre, guantes con los dedos cortados, ropa oscura, revólver pequeño, se situó en el asiento trasero del vehículo, en el centro, para controlarlo todo desde ahí. Durante un buen rato le obligó a dar vueltas y vueltas por la ciudad mientras le apuntaba con la pistola. Al llegar a la glorieta de Embajadores, aquel tipo le dijo que se bajase del coche.

Entonces no lo sabía, pero Antonio Anglés, el fugitivo, uno de los dos asesinos de Alcàsser, acababa de cruzarse en su vida. Esa es la conclusión a la que hoy los investigadores dan bastante fiabilidad. Creen casi al cien por cien en ese testimonio y en que aquel ladrón fue el fugitivo de Alcàsser.

El pasaje viene recogido en la mejor y más exhaustiva investigación que se recuerda acerca de la fuga de uno de los criminales más conocidos de la historia reciente de España. En “El Fugitiu” (Vincle Editorial), los periodistas Genar Martí y Jorge Saucedo reconstruyen la huida de película de uno de los dos responsables de un caso que, 25 años después, todavía le revuelve a cualquiera las entrañas. Se trata de la desaparición, violación, secuestro, tortura y asesinato de las tres niñas el 13 de noviembre de 1992. Sus cuerpos aparecieron el 28 de enero de 1993.

Lo hacen a través de más de 60 testimonios, la mayoría de ellos inéditos, de las últimas personas que le vieron con vida. Uno de ellos, crucial, el del capitán del barco en el que se ocultó como polizón. Hablan con amigos de infancia, familiares... Otro de ellos es el de Rafael, el último hombre que vio a Antonio Anglés en España y al que le robó un coche que luego fue hallado en la propia capital. Anglés siguió despistando a todos para proseguir su escapada hacia Portugal, donde se embarcaría rumbo al norte. Los dos reporteros le localizaron y lograron que contase cómo fueron esos minutos que la Guardia Civil siempre ha considerado cruciales para probar que Antonio Anglés había pasado por Madrid en su huida, dejando tras de sí los cadáveres de las jóvenes de Alcásser. Se llamaban Miriam, Toñi y Desirèe.

“Hemos intentado que sea la narración de un thriller periodístico”, explican Genar Martí y Jorge Saucedo, en conversación con EL ESPAÑOL. Ambos son valencianos, les tocó el caso de cerca. Genar Martí tiene más de 25 años de experiencia en medios de radio y televisión. Vinculado siempre a la información de sucesos y tribunales. Jorge Saucedo también ostenta una prolongada carrera de más de dos décadas en la televisión, especializado siempre en reportajes de investigación. Ahora, ambos ejercen de coordinadores del programa Equipo de Investigación, en La Sexta. En una investigación de más de año y medio (empezaron a finales de 2016), abordaron de lleno un asunto que siempre les había interesado, una fuga de la que apenas había datos.

Los periodistas tuvieron acceso, por primera vez, a las ingentes pesquisas de la Unidad Central Operativa (UCO) sobre el caso. En el expediente aparecían centenares de pistas nunca divulgadas sobre la fuga. De ahí, trazaron el mapa de todas las personas a las que había que localizar para reconstruirlo todo. Entonces surgió la sospecha. Anglés se fugó, pero no lo hizo sin ayuda.

-25 años después, ¿la Guardia Civil sigue investigando la pista de Antonio Anglés?

-No se ha parado. La clave para que se siga investigando está en el año 2009. Ahí se practicó la última diligencia importante del caso cuando se intervinieron los teléfonos de su hermana, que vivía en Estados Unidos. En 2013 se cumplían 20 años y el delito iba a prescribir. Por eso, el fiscal y las acusaciones se acogieron a esa diligencia de 2009 para argumentar que el sumario todavía no se había cerrado. Se solicitó que se volviera a contar los 20 años a partir de 2009 y así ha sido. Si no hay pruebas nuevas, el caso no prescribirá hasta 2029. Así que sí, siguen buscándole. En teoría, si apareciera, lo trincarían.

-Siempre se ha hablado de las llamadas alertando que se le había visto en multitud de sitios.

-Una de las últimas que recibió la Guardia Civil llegó desde Francia. Se comprobó, se investigó, pero no llegó a buen puerto. Efectivamente, son llamadas que dan pistas de distintos avistamientos. Se le ha visto en medio mundo. Hubo una investigación muy a fondo en Uruguay porque llegó el aviso de una persona que había visto a alguien que se le parecía mucho físicamente. La UCO se desplazó a Uruguay, registró los bajos fondos de Montevideo. Dieron con él. Era cierto que se le parecía mucho, pero al detenerle descartaron la posibilidad. Aquel tipo no era el fugitivo.

-Brasil era otra de las pistas.

- Se le dedicó mucha importancia. Él había nacido allí. Muchos de sus familiares seguían viviendo en Sao Paulo. Se les investigó con mucha intensidad, se llegó a monitorizar la casa de uno de los familiares para comprobar si le estaba dando cobertura. Pero no obtuvieron nada. Todo sigue siendo un misterio. Los agentes continúan siguiendo esas pistas, pero para dar con él, desde luego hace falta que una persona levante el teléfono y diga: lo he visto en tal sitio.

Lo más complicado ha sido, explican, convencer a todos los testigos para que contasen su versión, para que abordasen la fuga desde su ángulo, para que relatasen los minutos que cada uno de ellos pasaron con Anglés los días antes de desaparecer. “Lo que más costó fue, principalmente, convencer a la gente de su entorno. También encontrar a los testigos que le ven después de la noche en que se fuga".

Paso a paso, Martí y Saucedo han diseccionado con lupa de detective sabueso las migas de pan que Anglés supuestamente dejó tras de sí, rehaciendo todo su camino hasta que su rastro se perdió en medio del Atlántico: de Catarroja (Valencia) a Alboraig, luego Benaguasil, después Minglanilla, más tarde Cuenca, Madrid, la subida al barco en Lisboa, luego Oporto, y, finalmente, Dublín, donde se le pierde el rastro. La leyenda, la literatura que rodea el caso siempre ha sostenido que murió ahogado tras saltar del mercante City of Plymouth, en el que se había embarcado como polizón. Pero los datos inéditos recabados por los dos periodistas apuntan a que no fue así.

Anglés en el Plymouth
El rastro de Anglés se diluía en el City of Plymouth, el mercante en el que embarcó como polizón cuando llegó, quién sabe cómo, al puerto de Lisboa. A partir de ahí, las pistas se evaporaban para dar paso a las hipótesis. A los hechos le sucedieron los rumores, y a los rumores las leyendas. Nadie hasta ahora, hasta Martí y Saucedo, se había puesto a indagar en las entrañas del navío en cuyo seno Anglés viajó durante semanas, como un Jonás en el vientre de la ballena.

-Primero, conseguimos los nombres de toda la tripulación. Tirando de esa documentación, luego viajamos hasta el lugar para dar con ellos. No fue fácil. Estamos hablando de documentos de hace 25 años. En 25 años la gente ha cambiado de domicilio y la memoria tiende a fallar.

Cuando dieron con el capitán del barco se les abrió el cielo.

-¿Fue difícil convencerle para que hablase?

-No fue tarea fácil dar con él, pero se prestó a hablar desde el principio. En cuanto nos pusimos en contacto con él se abrió a contar lo que sucedió en aquel barco. Nos daba la impresión de que era un tipo que quería confesarse. Era la primera vez que tenía la necesidad de contar lo que pasó. No lo había podido contar nunca, pero porque nadie había llamado a su puerta.

El capitán del City of Plymouth se llama Kenneth Farquharson Steven y es ahora un viejo marino con esa perilla clásica del lobo de los mares del norte. Tiene el rostro encarnado y el gesto sereno de quien sabe lo que es aguantar en el puente de mando ante una tormenta. Cuando dieron con él, lo contó todo sobre aquel viaje en el que se perdió el paradero del fugitivo. Alguien le había ayudado a entrar en el buque. Y alguien le había ayudado a salir.

-¿Quién lo hizo?

-El capitán cuenta, y es lo más importante, que un miembro de la tripulación ayudó en todo momento a Anglés a escapar. Lo hace en un primer momento de la travesía, cuando alguien le abre la puerta y le alcanza un bote salvavidas e intenta huir en alta mar. Luego lo recogen y lo devuelven a bordo del barco. En Dublín, la policía intenta capturarle. Cuando van a por él al camarote, ya no estaba allí. Es evidente que alguien le dejó salir. Alguien le permitió escapar.

-¿Se sospechaba de alguien en concreto?

-La policía de Liverpool sospechaba de uno de los marineros, con nombre y apellidos. Pero el capitán no lo quiere revelar por la lealtad que le guarda a su tripulación. Y esto es un detalle nuevo que nunca se había conocido. Luego, buscamos a dos marineros en concreto, los que más datos teníamos que podían ser. El que le encontró y el que tenía a su cargo la vigilancia del camarote. Uno ha fallecido a día de hoy. Y el otro es casi imposible de localizar. Pudo suceder que le ayudasen a saltar por la borda en el puerto de Dublín. No sabemos si es así exactamente. También pudo pasar que alguien le ayudase a bajar del barco, y se perdiese en el puerto, confundido entre los trabajadores de la zona. En la siguiente, parada, Liverpool, se interroga a la tripulación pero no encuentran nada.

Anglés se había vuelto a escapar.

“Creemos que está vivo”
Martí y Saucedo han llegado más lejos que nadie en el camino de conocer qué pasó con uno de los hombres más buscados por las autoridades españolas y por la Interpol. Llegaron incluso más lejos que las autoridades, que los investigadores. Y ahí, en ese punto muerto, la conversación siempre gira, inevitable, hacia la misma pregunta.

-¿Está vivo Antonio Anglés?

-Lo que siempre suelen decir los investigadores es que, como no hay cuerpo, no se puede decir que haya fallecido. Pero nunca te dan una contestación tajante. Todo lo que aportamos en esta investigación confirma que tenía formación y recursos para escapar. Sí, pensamos que puede estar vivo. En el imaginario popular, Antonio Anglés es ese rostro que se difundió en el cartel, el de rubio y el de moreno. De todos modos, si es que vive, Anglés ya no es así. Realmente la historia al final, la mejor pista que se podría aportar sería que el capitán dijera quién es ese marinero que le dejó huir, quién le ayudó a escapar.

Es el testimonio clave. El de la última persona que vio al monstruo antes de que saltase al mar. 25 años después del horror de Alcàsser, este sería el único dato que podría aportar algo de luz.

Las manos del asesino, cuarteadas, cubiertas de cicatrices, resultaron claves para los agentes. Desde su fuga, Anglés comenzó a moverse por la zona de Benaguasil. El río Turia pasa cerca, y es una zona repleta de vegetación, de cañas que hieren al apartarlas. Por eso, difundieron la pista de que la persona que buscaban podría tener así las manos.

Hubo otra persona a la que le llamó la atención este detalle y a la que los periodistas localizaron. La peluquera que le transformó por completo con un nuevo look también se había fijado en ese detalle. Pero ya era demasiado tarde.

https://www.elespanol.com/reportaje...marinero-ayudo-escapar-barco/306469953_0.html

Eso de las manos me ha llamado la atención, no lo había pensado..
 
Última edición:
y tanto... si fuera altos cargos los cuerpos no habrían aparecido; las enterraron en la romana porque era lo que conocían angles y colegas y ya tenían la fosa medio hecha previamente para esconder en ella una moto
es que además la teoría de los altos cargos no se sustenta en nada; simplemente, "que alguien lo ha dicho"

¿un depredador en VAlencia en esa época? Pues seguro que habría alguno, pero bueno, tampoco tiene porque todos los crímenes de la zona ser hechos por un mismo depredador en serie, si es que lo hubiere
¿seria entonces un depredador que conociera la romana? aquello lo conocían 4 gatos
¿o el depredador encargar el enterramiento a unos que conocieran la romana
Se especulaba también con que hubiese habido un doble enterramiento, que antes hubiesen estado en otro sitio y que los trasladaron a la romana después...No decía JIB que podrian haber estado sumergidos en agua antes? Según él los cuerpos los pusieron allí adrede para ser encontrados.
 
Se especulaba también con que hubiese habido un doble enterramiento, que antes hubiesen estado en otro sitio y que los trasladaron a la romana después...No decía JIB que podrian haber estado sumergidos en agua antes? Según él los cuerpos los pusieron allí adrede para ser encontrados.
sí bueno tbn dijeron q el parte médico tbn se puso allí adrede.

aquella caseta era un escenario perfecto para un crimen como este.
tengo dudas pero q lo único q les hicieran en la fosa fuese ejecutarlas.
 
sigo un poco con el tema de Anglés; ya lo pongo es spoiler.
yo no sé qué pensar, si está vivo o muerto.
de estar vivo, Ricart tendría miedo aún de él¿? no creo q fuera tan tonto de ir a por él..

Alcasser-Asesinatos-Fuga_de_presos-Reportajes_306483174_77355071_1024x576.jpg

[se tiñió las cejas tbn..¿? en esa foto me da mucho asco]

Actualidad_306481383_77306467_854x640.jpg

ficha policial completa Antonio Anglés Martins [pone Martínez ¿? no lo veo bien]

Alcasser-Asesinatos-Fuga_de_presos-Reportajes_306481368_77306039_1024x576.jpg

el capitán del barco en el que Antonio Anglés fue visto por última vez

Actualidad_306481384_77306483_1024x576.jpg

city of Plymouth. Se ve el bote salvavidas en el que se cree que Anglés pudo escapar

Actualidad_306481388_77306605_855x1140.jpg

el Fugitiu, la portada del libro que investiga la fuga de Antonio Anglés

"Anglés, el asesino de las niñas de Alcàsser, está vivo. Un marinero le ayudó a escapar del barco"

La exhaustiva investigación de dos periodistas concluye que el asesino de las niñas de Alcàsser no murió ahogado como se creía hasta ahora.

Sesenta testimonios, muchos de ellos inéditos, les han ayudado a reconstruir una fuga de película.


12 mayo, 2018 01:41

“Aquellos días, todo el mundo hablaba del asesinato de las niñas”.

Rafael (nombre ficticio) llega nervioso a la comisaría de Madrid Centro. Por desgracia, la tarde ha sido para recordar. Es de noche, es 25 de febrero de 1993 y es un día que se desmorona. Acaban de robarle el coche a punta de pistola en la Plaza de Tirso de Molina, en el centro de la ciudad. Piensa en todo lo que acaba de vivir mientras espera en la cola de la comisaría, dispuesto a interponer la denuncia. Cuando llega su turno, le piden que describa al ladrón. Al relatar lo ocurrido, uno de los detalles que ofrece pone a los agentes en alerta y a la comisaría patas arriba. Rafael no le dio demasiada importancia, pero le llamaron la atención las manos de aquel hombre que le había asaltado un par de horas antes: las tenía llenas de arañazos. El detalle resultó crucial.

Casi al instante, se monta un jaleo tremendo en las dependencias policiales. Los agentes introducen a aquel hombre en una sala para tomarle declaración. Sacan unos álbumes enormes, repletos de fotos con las caras de los delincuentes más buscados. Rastrea con la mirada y, de pronto, el hombre se detiene en una foto. Se trata de un rostro duro, con las mandíbulas apretadas, ojos casi rasgados, pálido, blanco como la leche, tráquea marcada en el centro del cuello y pelo negro como el azabache. Eso sí, negro teñido. “Es ese”, advierte. No hay duda. Se trata de Antonio Anglés, el hombre más buscado de España, el asesino huido de las niñas de Alcàsser.

¿Por qué les había llamado la atención a los agentes el detalle de las manos?, les preguntó. Antes de contestarle, le piden a Rafael que empiece a relatar lo ocurrido.

Rafael trabajaba como informático en uno de los ministerios del Gobierno de España. Aquel día había quedado con sus amigos para ver una obra de teatro de Los Morancos, pero antes tenía que pasar a dejar unos papeles en un despacho de abogados cerca de Tirso de Molina. A las ocho y media de la tarde, Rafael aparcó su Renault 21 en una acera de la céntrica plaza de la capital. Subió al despacho, pero ya estaba cerrado. Mala suerte. Ya volveré otro día. Luego todo sucedió muy rápido.

Al acercarse al coche, un individuo le abordó junto al vehículo, le apuntó con una pistola y le dijo: “Métete dentro”. Rafael se puso al volante y el hombre, guantes con los dedos cortados, ropa oscura, revólver pequeño, se situó en el asiento trasero del vehículo, en el centro, para controlarlo todo desde ahí. Durante un buen rato le obligó a dar vueltas y vueltas por la ciudad mientras le apuntaba con la pistola. Al llegar a la glorieta de Embajadores, aquel tipo le dijo que se bajase del coche.

Entonces no lo sabía, pero Antonio Anglés, el fugitivo, uno de los dos asesinos de Alcàsser, acababa de cruzarse en su vida. Esa es la conclusión a la que hoy los investigadores dan bastante fiabilidad. Creen casi al cien por cien en ese testimonio y en que aquel ladrón fue el fugitivo de Alcàsser.

El pasaje viene recogido en la mejor y más exhaustiva investigación que se recuerda acerca de la fuga de uno de los criminales más conocidos de la historia reciente de España. En “El Fugitiu” (Vincle Editorial), los periodistas Genar Martí y Jorge Saucedo reconstruyen la huida de película de uno de los dos responsables de un caso que, 25 años después, todavía le revuelve a cualquiera las entrañas. Se trata de la desaparición, violación, secuestro, tortura y asesinato de las tres niñas el 13 de noviembre de 1992. Sus cuerpos aparecieron el 28 de enero de 1993.

Lo hacen a través de más de 60 testimonios, la mayoría de ellos inéditos, de las últimas personas que le vieron con vida. Uno de ellos, crucial, el del capitán del barco en el que se ocultó como polizón. Hablan con amigos de infancia, familiares... Otro de ellos es el de Rafael, el último hombre que vio a Antonio Anglés en España y al que le robó un coche que luego fue hallado en la propia capital. Anglés siguió despistando a todos para proseguir su escapada hacia Portugal, donde se embarcaría rumbo al norte. Los dos reporteros le localizaron y lograron que contase cómo fueron esos minutos que la Guardia Civil siempre ha considerado cruciales para probar que Antonio Anglés había pasado por Madrid en su huida, dejando tras de sí los cadáveres de las jóvenes de Alcásser. Se llamaban Miriam, Toñi y Desirèe.

“Hemos intentado que sea la narración de un thriller periodístico”, explican Genar Martí y Jorge Saucedo, en conversación con EL ESPAÑOL. Ambos son valencianos, les tocó el caso de cerca. Genar Martí tiene más de 25 años de experiencia en medios de radio y televisión. Vinculado siempre a la información de sucesos y tribunales. Jorge Saucedo también ostenta una prolongada carrera de más de dos décadas en la televisión, especializado siempre en reportajes de investigación. Ahora, ambos ejercen de coordinadores del programa Equipo de Investigación, en La Sexta. En una investigación de más de año y medio (empezaron a finales de 2016), abordaron de lleno un asunto que siempre les había interesado, una fuga de la que apenas había datos.

Los periodistas tuvieron acceso, por primera vez, a las ingentes pesquisas de la Unidad Central Operativa (UCO) sobre el caso. En el expediente aparecían centenares de pistas nunca divulgadas sobre la fuga. De ahí, trazaron el mapa de todas las personas a las que había que localizar para reconstruirlo todo. Entonces surgió la sospecha. Anglés se fugó, pero no lo hizo sin ayuda.

-25 años después, ¿la Guardia Civil sigue investigando la pista de Antonio Anglés?

-No se ha parado. La clave para que se siga investigando está en el año 2009. Ahí se practicó la última diligencia importante del caso cuando se intervinieron los teléfonos de su hermana, que vivía en Estados Unidos. En 2013 se cumplían 20 años y el delito iba a prescribir. Por eso, el fiscal y las acusaciones se acogieron a esa diligencia de 2009 para argumentar que el sumario todavía no se había cerrado. Se solicitó que se volviera a contar los 20 años a partir de 2009 y así ha sido. Si no hay pruebas nuevas, el caso no prescribirá hasta 2029. Así que sí, siguen buscándole. En teoría, si apareciera, lo trincarían.

-Siempre se ha hablado de las llamadas alertando que se le había visto en multitud de sitios.

-Una de las últimas que recibió la Guardia Civil llegó desde Francia. Se comprobó, se investigó, pero no llegó a buen puerto. Efectivamente, son llamadas que dan pistas de distintos avistamientos. Se le ha visto en medio mundo. Hubo una investigación muy a fondo en Uruguay porque llegó el aviso de una persona que había visto a alguien que se le parecía mucho físicamente. La UCO se desplazó a Uruguay, registró los bajos fondos de Montevideo. Dieron con él. Era cierto que se le parecía mucho, pero al detenerle descartaron la posibilidad. Aquel tipo no era el fugitivo.

-Brasil era otra de las pistas.

- Se le dedicó mucha importancia. Él había nacido allí. Muchos de sus familiares seguían viviendo en Sao Paulo. Se les investigó con mucha intensidad, se llegó a monitorizar la casa de uno de los familiares para comprobar si le estaba dando cobertura. Pero no obtuvieron nada. Todo sigue siendo un misterio. Los agentes continúan siguiendo esas pistas, pero para dar con él, desde luego hace falta que una persona levante el teléfono y diga: lo he visto en tal sitio.

Lo más complicado ha sido, explican, convencer a todos los testigos para que contasen su versión, para que abordasen la fuga desde su ángulo, para que relatasen los minutos que cada uno de ellos pasaron con Anglés los días antes de desaparecer. “Lo que más costó fue, principalmente, convencer a la gente de su entorno. También encontrar a los testigos que le ven después de la noche en que se fuga".

Paso a paso, Martí y Saucedo han diseccionado con lupa de detective sabueso las migas de pan que Anglés supuestamente dejó tras de sí, rehaciendo todo su camino hasta que su rastro se perdió en medio del Atlántico: de Catarroja (Valencia) a Alboraig, luego Benaguasil, después Minglanilla, más tarde Cuenca, Madrid, la subida al barco en Lisboa, luego Oporto, y, finalmente, Dublín, donde se le pierde el rastro. La leyenda, la literatura que rodea el caso siempre ha sostenido que murió ahogado tras saltar del mercante City of Plymouth, en el que se había embarcado como polizón. Pero los datos inéditos recabados por los dos periodistas apuntan a que no fue así.

Anglés en el Plymouth
El rastro de Anglés se diluía en el City of Plymouth, el mercante en el que embarcó como polizón cuando llegó, quién sabe cómo, al puerto de Lisboa. A partir de ahí, las pistas se evaporaban para dar paso a las hipótesis. A los hechos le sucedieron los rumores, y a los rumores las leyendas. Nadie hasta ahora, hasta Martí y Saucedo, se había puesto a indagar en las entrañas del navío en cuyo seno Anglés viajó durante semanas, como un Jonás en el vientre de la ballena.

-Primero, conseguimos los nombres de toda la tripulación. Tirando de esa documentación, luego viajamos hasta el lugar para dar con ellos. No fue fácil. Estamos hablando de documentos de hace 25 años. En 25 años la gente ha cambiado de domicilio y la memoria tiende a fallar.

Cuando dieron con el capitán del barco se les abrió el cielo.

-¿Fue difícil convencerle para que hablase?

-No fue tarea fácil dar con él, pero se prestó a hablar desde el principio. En cuanto nos pusimos en contacto con él se abrió a contar lo que sucedió en aquel barco. Nos daba la impresión de que era un tipo que quería confesarse. Era la primera vez que tenía la necesidad de contar lo que pasó. No lo había podido contar nunca, pero porque nadie había llamado a su puerta.

El capitán del City of Plymouth se llama Kenneth Farquharson Steven y es ahora un viejo marino con esa perilla clásica del lobo de los mares del norte. Tiene el rostro encarnado y el gesto sereno de quien sabe lo que es aguantar en el puente de mando ante una tormenta. Cuando dieron con él, lo contó todo sobre aquel viaje en el que se perdió el paradero del fugitivo. Alguien le había ayudado a entrar en el buque. Y alguien le había ayudado a salir.

-¿Quién lo hizo?

-El capitán cuenta, y es lo más importante, que un miembro de la tripulación ayudó en todo momento a Anglés a escapar. Lo hace en un primer momento de la travesía, cuando alguien le abre la puerta y le alcanza un bote salvavidas e intenta huir en alta mar. Luego lo recogen y lo devuelven a bordo del barco. En Dublín, la policía intenta capturarle. Cuando van a por él al camarote, ya no estaba allí. Es evidente que alguien le dejó salir. Alguien le permitió escapar.

-¿Se sospechaba de alguien en concreto?

-La policía de Liverpool sospechaba de uno de los marineros, con nombre y apellidos. Pero el capitán no lo quiere revelar por la lealtad que le guarda a su tripulación. Y esto es un detalle nuevo que nunca se había conocido. Luego, buscamos a dos marineros en concreto, los que más datos teníamos que podían ser. El que le encontró y el que tenía a su cargo la vigilancia del camarote. Uno ha fallecido a día de hoy. Y el otro es casi imposible de localizar. Pudo suceder que le ayudasen a saltar por la borda en el puerto de Dublín. No sabemos si es así exactamente. También pudo pasar que alguien le ayudase a bajar del barco, y se perdiese en el puerto, confundido entre los trabajadores de la zona. En la siguiente, parada, Liverpool, se interroga a la tripulación pero no encuentran nada.

Anglés se había vuelto a escapar.

“Creemos que está vivo”
Martí y Saucedo han llegado más lejos que nadie en el camino de conocer qué pasó con uno de los hombres más buscados por las autoridades españolas y por la Interpol. Llegaron incluso más lejos que las autoridades, que los investigadores. Y ahí, en ese punto muerto, la conversación siempre gira, inevitable, hacia la misma pregunta.

-¿Está vivo Antonio Anglés?

-Lo que siempre suelen decir los investigadores es que, como no hay cuerpo, no se puede decir que haya fallecido. Pero nunca te dan una contestación tajante. Todo lo que aportamos en esta investigación confirma que tenía formación y recursos para escapar. Sí, pensamos que puede estar vivo. En el imaginario popular, Antonio Anglés es ese rostro que se difundió en el cartel, el de rubio y el de moreno. De todos modos, si es que vive, Anglés ya no es así. Realmente la historia al final, la mejor pista que se podría aportar sería que el capitán dijera quién es ese marinero que le dejó huir, quién le ayudó a escapar.

Es el testimonio clave. El de la última persona que vio al monstruo antes de que saltase al mar. 25 años después del horror de Alcàsser, este sería el único dato que podría aportar algo de luz.

Las manos del asesino, cuarteadas, cubiertas de cicatrices, resultaron claves para los agentes. Desde su fuga, Anglés comenzó a moverse por la zona de Benaguasil. El río Turia pasa cerca, y es una zona repleta de vegetación, de cañas que hieren al apartarlas. Por eso, difundieron la pista de que la persona que buscaban podría tener así las manos.

Hubo otra persona a la que le llamó la atención este detalle y a la que los periodistas localizaron. La peluquera que le transformó por completo con un nuevo look también se había fijado en ese detalle. Pero ya era demasiado tarde.

https://www.elespanol.com/reportaje...marinero-ayudo-escapar-barco/306469953_0.html

Eso de las manos me ha llamado la atención, no lo había pensado..

Q interesante!!muchas gracias!no había leído este artículo (por cierto se equivocan,los cuerpos aparecieron el 27 de enero,no el 28)aunque si vi el programa de la Sexta en su día,aunque aún estaba "intoxicada" por muchos bulos.
Sobre lo q comentas de Martinez,si,es lo q pone,imagino q sea un error intentando "españolizar" el apellido.
De rubio estaba horroroso,pero hay que reconocer q el chico era guapo y no tenía pinta de quinqui.
La fuga de Anglés,o la supuesta fuga,da para mucho.Es un punto caliente de debate.Desde luego que de estar en el barco está claro que solo pudo escapar con ayuda,imagino q a cambio de dinero,obviamente.
Sería interesante saber la opinión que tenéis todos:
1.¿Realmente se fugó de su casa en Catarroja?
2.¿No se fugó pq lo habian matado previamente?
3.Si es cierto q se fugó,¿está vivo o está muerto?
4.Y si cuando aparecieron los cadáveres de las niñas ya estaba muerto,¿quién creéis que se hizo pasar por él?
A mí en unos de los puntos q me generan más dudas y me encantaría saber la opinión de otras personas.
Por otras parte el libro El figitiu me lo han recomendado,pero no está traducido al castellano...una pena!
artículo
 
Q interesante!!muchas gracias!no había leído este artículo (por cierto se equivocan,los cuerpos aparecieron el 27 de enero,no el 28)aunque si vi el programa de la Sexta en su día,aunque aún estaba "intoxicada" por muchos bulos.
Sobre lo q comentas de Martinez,si,es lo q pone,imagino q sea un error intentando "españolizar" el apellido.
De rubio estaba horroroso,pero hay que reconocer q el chico era guapo y no tenía pinta de quinqui.
La fuga de Anglés,o la supuesta fuga,da para mucho.Es un punto caliente de debate.Desde luego que de estar en el barco está claro que solo pudo escapar con ayuda,imagino q a cambio de dinero,obviamente.
Sería interesante saber la opinión que tenéis todos:
1.¿Realmente se fugó de su casa en Catarroja?
2.¿No se fugó pq lo habian matado previamente?
3.Si es cierto q se fugó,¿está vivo o está muerto?
4.Y si cuando aparecieron los cadáveres de las niñas ya estaba muerto,¿quién creéis que se hizo pasar por él?
A mí en unos de los puntos q me generan más dudas y me encantaría saber la opinión de otras personas.
Por otras parte el libro El figitiu me lo han recomendado,pero no está traducido al castellano...una pena!
artículo
me alegro pues q lo encuentres interesante.. con lo q llegas a dominar el caso. gracias por las correcciones ! yo si cuelgo tbn es por eso.. para q digáis si hay errores.
a mí la portada sola del libro me ha gustado. pinta bien, pero de todos modos hay buena explicación en este artículo de las conclusiones a qué llegarían..
es curioso que lo escrivieran en catalán.. (o valenciano.. no quisera equivocarme).
 
Se especulaba también con que hubiese habido un doble enterramiento, que antes hubiesen estado en otro sitio y que los trasladaron a la romana después...No decía JIB que podrian haber estado sumergidos en agua antes? Según él los cuerpos los pusieron allí adrede para ser encontrados.
Si,ciertamente se especuló con un doble enterramiento pero no quedó muy clara la cosa.
Por un lado de abduce la falta de lividices cadavéricas en los cuerpos,por eso se habla de agua,pq es un medio q al estar en constante movimiento,si hablamos del mar,impide que se formen dichas livideces,auque siendo así se supone que deberían de haber aparecido signos de sopanificación,q no es el caso.También se daba la posibilidad de que hubieran sido desangradas casi en su totalidad,aunque la posibilidad más apoyada es q debido al estado de putrefacción las livideces hayan pasado desapercibidas.

Copio y pego de los rollos de sala de la vista oral.Intervención del profesor Frontela:
"Y otro aspecto en relación a esto, la putrefacción. Bueno es que primero, se han dicho alguna
cosa, por ejemplo decir, que la livideces manchas de tipo congestivo. Por Dios la congestión
es un fenómeno vital, cójase el diccionario, cójase cualquier diccionario medico, la congestión
es activa o pasiva, e incluso la pasiva que es por desplazamiento de la sangre por acción de la
gravedad es un fenómeno vital que sucede cuando hay un enlentecimiento de la circulación de
la sangre, luego de ninguna forma se puede confundir la congestión con las livideces
cadavéricas.
Y ahora una cosa de interés que no se le saco le debido jugo el otro ida cuando expusieron mis
colegas. Hablaban de la movilización del cadáver que queda en base a unas manchas las
livideces cadavéricas. Muy bien volvamos a ver eso, se ha pasado de puntilla porque se enlazo
con una especie de disertación sobre los gérmenes de putrefacción etc, pero es que tiene
mucho interés esto de las livideces cadavéricas. Las livideces cadavéricas son las
denominadas manchas de posición, Porque pueden fijar y fijar la posición que tenia el cadáver
en las primeras horas de su muerte. Muy bien. Todo científico sabe que las livideces
cadavéricas son unas manchas de color violáceo, aunque pueden ser de otros colores, rojo,
rosáceo, etc., manchas de color violáceo que se depositan en las partes mas declives, mas
inferiores del cadáver debido a la acción de gravedad. Muy bien. Estas manchas si se observa
un cadáver en las seis, ocho primeras horas, y ese cadáver se movilizase en el transcurso de
las seis, ocho primeras horas, esas manchas cambiarían de serie, si se movilizan de ocho a
diez horas parte de las manchas quedarían donde están, y otra parte de las manchas se
depositaria en nueva serie.. y si se moviliza el cadáver pasado doce horas, desde luego las
manchas no se movilizan. Luego ya atenemos un indicio muy interesante para ver si el
cadáver fue o no movilizado.
Y ahora yo pregunto y me pregunto, mejor dicho me pregunto. Yo no he visto que los
médicos forenses hayan hecho mención a las livideces cadavéricas, nosotros tampoco, por
que?, porque no las hemos encontrado. Ay, pero es que aquí tenemos ya un misterio, porque
no hay livideces cadavéricas cuando las livideces cadavéricas se encuentran en los cadáveres
después de la muerte?. Bueno pues claro una lividez cadavérica puede efectivamente no ser
observada. Por que?, porque puede ser muy escasa, puede ser una lividez cadavérica muy
escasa, por ejemplo en hemorragias. Pero es que también hay otras circunstancias en que las
livideces cadavéricas son difícilmente observadas, por ejemplo en la muerte por sumersión, en
el cual las livideces cadavéricas son claras y además el cadáver se mueve y digamos que las
livideces cadavéricas con los movimientos del agua se van quedando fijadas en diferentes
partes del cuerpo. Ni los médicos forenses que hicieron la primera autopsia, ni nosotros
hemos visto esas livideces cadavéricas. Entonces tenemos que interrogarnos el porque no hay
esas livideces cadavéricas.
¿Por que?, porque ha habido una hemorragia importante. Bueno evidentemente pensemos ha
habido unos disparos por arma de fuego, la muerte ha sido relativamente rápida después de
los disparos por arma de fuego, luego no ha podido haber suficientemente hemorragia para
que no se hallen livideces cadavéricas. Luego sino hay livideces cadavéricas y si lo
justificamos en base a la muerte, a la causa de la muerte, hay que retrotraerse a tiempos
anteriores. Una de las víctimas tenía, digamos una vulgarmente puñaladas en la espalda. Ha
podido una gran hemorragia y en esa víctima consideremos que puede estar justificado que
haya escasas livideces cadavéricas. Pero en las tres? ?, en las tres ha habido una gran
hemorragia?. Si, han podido sangrar por la boca o por la nariz, pero porque no hay livideces
cadavéricas?.
Para podernos preguntar, se dice, es que hay hipótesis, hay el puede, y el por que, porque
faltan eslabones intermedios que hay que aclarar. Si una persona muere y el cadáver es
depositado y luego eses cadáver se va movilizando y por ejemplo, y esto es una hipótesis, por
ejemplo, si un cadáver se le lava, se le tiene en agua, se le van efectuando diversos
movimientos esas livideces cadavéricas no se fijan en una posición determinada, sino que
queda esas livideces distribuidas por diferentes partes del cadáver.
Por que no preguntarnos si en la no observación de las livideces cadavéricas se debe a la
unión de dos fenómenos, la hemorragia tenida y la permanencia por ejemplo en agua en las
primeras horas. Claro, se me dirá, es que tenía que haber habido maceración. Es decir, las
manos, la piel en las manos, y de las plantas de los pies se arrugan y se quedan blanquecinas.
Si, estoy de acuerdo, pero eso sucede, según, y será evidente según el tiempo de horas en que
haya permanecido en el agua. Luego ya tenemos una serie de interrogantes en relación a por
que hay o no hay livideces cadavéricas, que desde luego no podemos concretar, repito porque
faltan muchos estudios por realizar, y por lo tanto a través de ellas no vamos a deducir ningún
resultado.
Ahora lo que no se puede desde luego, de ninguna forma, asumir desde el punto de vista
científico es que se justifique la putrefacción de unas partes del cadáver como son las cabezas,
las vértebras o los hombros en base a la posición del cadáver. Y se dijo algo que en fin, para
mi por lo menos es gracioso, es que un cadáver en posición de cuclillas, yo he entendido eso
por lo menos. La sangre se va hacia la cabeza. Pero por Dios, las livideces cadavéricas es un
fenómeno que se produce después de muerto, y la sangre se va a la cabeza si el cadáver
aparece con la cabeza boca abajo. Bien es verdad porque lo mencionaron, que hay livideces
antigravitacionales. Si, es verdad, que hay livideces que se forman en sitios, en contra de la
gravedad, también existen livideces en sitio declive, seria como ahora renegar de los
conceptos de la aceleración de la gravedad y de la gravedad. Todo cuerpo esta sometido, a la
acción de la gravedad y por esa acción de la gravedad la sangre va hacia abajo. Que habría
que suceder para que esa sangre no fuese hacia abajo?, que haya obstáculos. Que obstáculos y
donde no hay livideces cadavéricas?, cuando hay una presión.
Todo sabemos que las zonas de la piel que están comprimidas contra una superficie, las
arrugas o elementos u objetos que compriman una superficie no hay livideces cadavéricas, si
un cadáver esta de cuclillas y esta con las nalgas depositadas en el suelo no habrá livideces
cadavéricas en las nalgas, pero en el resto de las extremidades inferiores y en el resto de la
cintura para abajo si se puede haber livideces cadavéricas.
Es decir en resumidas cuentas, no voy a entrar en las disquisiciones sobre la putrefacción y los
gérmenes, el caso es decir que desde mi punto de vista, y desde el punto de vista de la ciencia
no se puede admitir que se justifique el distinto estado de putrefacción en base a la posición,
genuflexión, o digamos fetal que hubiese tenido las víctimas, para indicar que estuvieron en
ese lugar del enterramiento desde el primer momento.
Acción popular 1:
perdón señor Frontela. Sobre este punto ya ha acabado su exposición?.
P. Frontela:
Si señoría.
Acción popular 1:
es decir, el tema de las larvas y de la putrefacción, la posición de los
cadáveres, ya ha acabado su exposición?
P. Frontela:
no, solamente decir que efectivamente los cadáveres pudren de muy diversa
forma, no hay dos cadáveres iguales, pero que en, mire, hace muy pocos años una niña, en
Huelva murió, estaba en el campo, estaba en de cúbito prono y tenia esquematizada la cabeza
y las vértebras convertidas en hueso y el resto del cuerpo no, hay tenemos un ejemplo. Mire le
voy a decir una cosa hace veinte años el profesor Camerún de Londres y el profesor Roger de
Scotland Yard, me decían que iba a entrar yo en el libro de los Guines de los Récords por la
cantidad de exhumaciones que había hecho, simplemente es que tenemos una norme
experiencia en exhumaciones para saber que hay muchos cadáveres en diversas posiciones,
extendidos, boca arriba, boca abajo, en el cual se esqueletiza la cabeza y el cuello, no
dependiendo de la posición, sino de otros factores.
Acción popular 1:
para acabar con esta exposición por si me da un dato complementario.
Cuales son los elementos que influyen, según nos acaba de decir para que haya unas zonas
que si que lo estén y otras que no lo estén?.
P. Frontela:
hay algo que se dijo y que si es cierto y es que la existencia de lesiones permite
que en estos puntos la putrefacción se acelere. La posición del cadáver si influye pero no en
esta medida. Veamos, nosotros vemos, por ejemplo cadáveres que están en ataúdes
observamos que la parte de la piel que esta en contacto con la parte del ataúd se observa, y sin
embargo la parte de piel opuesta se observa en menos. Medida por lo tanto hay una gran
cantidad de factores que son muy variables, o sea, no podemos nunca profetizar con respecto
a la putrefacción porque son aspectos enormemente variables en la destrucción de un cadáver.
Lo que si hay algo que se ha dicho el otro día por los peritos, y además tome nota textual,
"Todos los disparos ponen al exterior el cerebro y las partes cerebrales, al poner en contacto
esa zona se acelera la putrefacción y la vibración y dislocación de tejidos que facilita la
destrucción por el efecto de la bala". Bueno vamos a ver. Cuando un proyectil atraviese en
este caso el cráneo, efectivamente no solamente produce el orificio de entrada, de salida y el
trayecto, sino una serie de vibraciones alrededor. Efectivamente la putrefacción puede
acelerarse en esa zona, pero es que los movimientos vibratorios del proyectil quedan limitados
a esa zona, No se extienden al hombro, no se extiende a otras partes del cuerpo. Esas serian
unas consideraciones que cabrían en torno a la cabeza, y ya de por si hemos dicho que la
cabeza muchas veces se esqueletiza con independencia de la existencia o no de heridas, que si
hay heridas facilita la destrucción"
 
me alegro pues q lo encuentres interesante.. con lo q llegas a dominar el caso. gracias por las correcciones ! yo si cuelgo tbn es por eso.. para q digáis si hay errores.
a mí la portada sola del libro me ha gustado. pinta bien, pero de todos modos hay buena explicación en este artículo de las conclusiones a qué llegarían..
es curioso que lo escrivieran en catalán.. (o valenciano.. no quisera equivocarme).

Al menos yo,dominar el caso para nada.Siempre me ha interesado,pero he profundizado en él desde hace unos meses solo,intentando formarme una opinión en base a los datos de los q se dispone,y con un poco de ayuda de gente más veterana!jeje ;)
 
Si nadie dice que FG no hiciera todo lo que pudo y más,si casi se vuelve loco con todo ésto y con razón.Lo que quiero decir es q como señalan más arriba por mucho FG que fuera jamás dejan a ningún familiar estar presente,jamás,ni en una sala de autopsias ni en el sitio donde se encontraron los cadáveres y lo sabéis,son protocolos y es den sentido común.Q se colara un periodista es otra cosa,y a cierta distancia,q fue echado en cuanto se le detectó.Es q a ver,las cosas como son,daba igual q estuviera el 27 de noche en Alcásser a q llegara el 28 por la tarde.Nunca podría haber estado presenciando esos actos,y es lo que quería decir,no otra cosa,q parece q aquí se tiene tomada con algunos y se tergiversa todo.En todo lo demás de acuerdo.Y el polígrafo lo mismo,igual q reconocío que jamás vió ninguna cinta snuff.

Tampoco dejan estar presente, en teoría, a nadie que no pertenezca a la autoridad judicial (cuerpos de seguridad del estado, forense, juez y secretari@ judicial) y La Romana el día 27 de enero de 1993 debió parecer el camarote de los hermanos Marx, de la gente que estuvo y, teóricamente, no debía de estar. Los colmeneros, por ejemplo, que hasta ayudaron a desenterrarlas (?), el encargado de la funeraria y el fotógrafo de Las Provincias.

Así que si FG hubiera estado allí, no me cabe la menor duda de que habría subido a la Romana. Pero aquel día hubo demasiadas “casualidades”. Y una de ellas es que el padre de Miriam no estaba en Alcasser ese día.
 
La fuga de Anglés,o la supuesta fuga,da para mucho.Es un punto caliente de debate.Desde luego que de estar en el barco está claro que solo pudo escapar con ayuda,imagino q a cambio de dinero,obviamente.
Sería interesante saber la opinión que tenéis todos:
1.¿Realmente se fugó de su casa en Catarroja?
3.Si es cierto q se fugó,¿está vivo o está muerto?

Por otras parte el libro El figitiu me lo han recomendado,pero no está traducido al castellano...una pena!
artículo

sí,yo creo que sí se fugó de su casa de Catarroja. no creo en "organizaciones que pusieran en circulación un doble" ni nada de esto y opino que el de Portigal era él también, a tenor del testimonio del toxicómano que le acogió
y que probablemente muriera intentando alcanzar un espigón cercano a puerto

Muy bueno el libro el fugitiu! lamentablmente, a dia de hoy es solo para privilegiados jejje pues la editorial es valenciana y solo lo ha editado en valenciano
no obstante siempre puede ocurrir que con el tiempo una editorial que edite en castellano compre los derechos y lo haga; no por el momento
 
Se especulaba también con que hubiese habido un doble enterramiento, que antes hubiesen estado en otro sitio y que los trasladaron a la romana después...No decía JIB que podrian haber estado sumergidos en agua antes? Según él los cuerpos los pusieron allí adrede para ser encontrados.

pues eso, una especulación; a mi es que lo que diga el sr. blanco ... que dice muchas cosas ,se contradice,no prueba ninguna
lo de adrede para encontrarlos no parece tener mucho sentido ¿quien? ¿Porque?

Sin embargo es cierto que en esto se apoya en una especulación científica de Frontela, que ni sikiera asegura doble ubicacion de cuerpos, nunca 2 enterramientos terrestres como el mismo dice, ni mucho tiempo en agua pues habría habido maceraciones; asi que como mucho, breve tiempo en agua o simplemente en el suelo antes de ser enterradas
Un obstáculo que puede evitar por si solo las lividices,el mismo lo dice, es recibir presión..y presión de tierra encima,hubo
tampoco su estudio es muy significativo para cadáveres ya de tiempo, en descomposición,pues la descomposición de la sangre enmascara las posibles lividices que pudiera haber habido; se hubieran podido sacar mas conclusiones si los cadáveres fueran mas recientes

Completando un poco lo que ya otra forera ha puesto de lo hablado sobre las livideces en el juicio


forenses iniciales (que también han estudiao)

Acción popular 1: encontraron ustedes algún tipo de livideces cadavéricas?


P. Verdú: las livideces cadavéricas es un fenómeno que tiene una extraordinaria importancia como creo que se apuntó en la última sesión, en el momento que estamos investigando un cadáver cuya muerte se ha producido en tiempo cercano, cuando estoy hablando de tiempo cercano podemos hablar de días, posteriormente a los fenómenos de la putrefacción afectan absolutamente a todas las estructuras; la sangre sufre asimismo una demolición, una destrucción hay cambios colorativos y por lo tanto por el estado licuefacción precisamente hacer, obtener resultados del estudio de las livideces que es estudio no es procedente cuando los cadáveres ya están en avanzado estado de putrefacción incluso en el caso de que se pudiera hablar de una hemorragia es bien sabido que para que una
hemorragia cause desaparición de las livideces está también sabido que para que una hemorragia cause desaparición de las livideces tiene que ser prácticamente una exanguinación de las víctimas que en este caso puesto en relación directo también con la existencia de vitalidad en los orificios de entrada y salida
son incompatibles precisamente con esa pérdida total de sangre.

Frontela

¿hay doble enterramiento? Yo decía al referirme al doble enterramiento no me refiero al hecho físico de que primero se entierren los cadáveres en tierra, se desentierren y se vuelvan a enterrar en tierra. Yo creo muy improbable esto, bastante improbable esto.

Se ha dicho entonces al hilo de esto que el cadáver no pudo permanecer en el agua porque existen fenómenos de maceración. Correcto, estoy de acuerdo que hay fenómenos de maceración, caramba, con lo que no estoy de acuerdo es que suceda en minutos

Por lo tanto la hipótesis, esto si es hipótesis, de que ha podido permanecer esos cadáveres en agua, no es aventurado, tiene tanta posibilidad como cualquier otra, como haber permanecido al aire, como haber, dudo que haber sido enterrado desde el primer momento.



 
Back