Cámbiame...el nuevo fracasazo de Telecinco.

El cuentahilos
martes, 11 agosto 2015, 12:37

"Soy Pelayo"
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Reconozco que ponerme a ver un programa de "cambio de imagen", titulado con gran derroche de imaginación 'Cámbiame' en Telecinco no respondía a otra cosa que a lo que psicólogos llaman ahora "autosabotaje". Yo "sabía" ya de antemano que la cosa no podía funcionar. O sí, depende de si sus expectativas eran organizar una debacle emocional. Y lo era; casi todos los concursantes, y por lo menos un miembro del jurado lloraban y también se abrazaban. Ya se sabe que "tocarse es empatizar", ¡paciencia! Por otra parte, no había más que escuchar el himno de apertura del asunto, un asunto de sobremesa, no de prime time, con una letra machacona de la que extraigo, para no cansar, sólo ciertas frases: "Me cansé de sentir que no valía", "Cámbiame", "Ponme unos tacones", "Estaba perdida pero al final me ayudaste a pensar". Ah, ¡se trataba de eso, pensar! ¡Menuda audacia!

El caso es que me puse a ello sin esperanzas y con un anzuelo que de buenas a primeras parecía irresistible. En el jurado, de dos chicas y un chico que se esfuerzan por parecer muy cool y mostrarse ajenos en realidad al estilo de general vulgaridad que es el sello de esta cadena ¿quién era él? Pelayo. Un nombre que ha dado la vuelta por las redes, que me suena como el de un ex novio de David Delfín y que ahora, aunque todo va tan rápido que cualquiera sabe, ha cerrado momentánea su carrera de influencer acompañando a otro diseñador, el divino Nicolas Guesquiére. También tengo entendido que se organizó un cierto pitorreo cuando el muchacho montó una semana de influencias o minicharlas para ¿brokers? cobrando exorbitantes cifras y en un hotel de lujo. No se matriculó ni la madre del cordero. ¡Ojo! Puede que sean habladurías.

Aunque para habladurías, los consejos del jurado ¿experto en imagen y moda? Pelayo destaca con luz propia entre las chicas, una muy maqueada y la otra retrohipster. Lo de siempre, vaquerito roto, sombrerito en la nuca para que ni un centímetro de su atractivo rostro se pierda, y tatuajes y camiseta y bla, bla, bla. Entre los concursantes, que pueden ser rechazados o proahijados por el trío de la bencina, apareció un tal Néstor luciendo cuerpo y vestido únicamente con una braga náutica. El chico no era tonto para nada, pero fue rechazado tras los aplausos y silbidos de los expertos que vinieron a decirle que no necesitaba vestirse ni tener una imagen con ese pedazo de abdominales. La parte femenina del jurado cacareaba de emoción. Él, inteligentemente, dio argumentos irrebatibles como que quería una imagen que no le obligase siempre a ir desnudo; que vestirse le costaba. "Quiero un look algo frío para conectar con otra clase de gente con la que así no consigo conectar", insistía. No hubo comprensión, sólo alboroto fingido: más paciencia.

Por fin una chica logró convencer a Pelayo de que la guiase. Era una joven desganada, vestida con la ropa de su madre, y madre ella a su vez muy joven. Pelayo puso todo su corazón mientras exigía el "momento depilación", le cambiaba las gafas, y la dejaba en manos del dentista. Acabado el 'wellness' de pacotilla, no pudo por menos de hacer una gracia: "Aquí tengo a la antigua Chihuaca" (debe ser una tribu o un perro azteca, aunque no descarto una broma privada) . Mucho, eso sí, se rompió la cabeza cuando sentenció: "Toda mujer tiene que ir de taconazos". En fin, se los puso dorados para animar un ralo vestido rojo de madrina: mi paciencia a esas alturas se había agotado. Aún resonaba en mi tímpano la voz animada de Pelayo: "Look manifestación", "pareces Betty la Fea", "un look crazy", "necesitas autoestima", etc, etc. He llegado a la conclusión de que este pollo, ¡uy perdón, esta estrella ascendente!, o bien permanece mudo en su íntima vida amorosa, o bien es un gran cínico, o bien le pagan una desorbitada cantidad por dar un toque ¿fino? a un programa eminentemente hortera y abusivo, en el que los que necesitan ayuda desgraciadamente la obtienen.
http://www.elmundo.es/yodona/blogs/el-cuentahilos/2015/08/11/soy-pelayo.html
 
El programa en sí es un despropósito.

En primer lugar, por los valores que fomenta. Lo importante no es ser buena persona, tener conciencia social, afán por cultivarse... No.

Lo fundamental es ir a un programa basura donde tres mamarrachas de campeonato te dejen peor de lo que estabas.

Todo bajo la consigna de: ¡Qué buenos somos, hay que ver lo que ayudamos a estos pobresitos!

El señor que está en el paro no necesita un cambio de look, sino un empleo. La adolescente acomplejada por su físico e insultada en el colegio requiere la ayuda de un psicólogo, no que la disfracen con cuatro trapitos.

Yo solo ví un programa entero, creo que el primero o el segundo. Luego veo algún fragmento durante 5-10 minutos, más que nada para reirme un rato.
 




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La que ha hecho el cambio radical ha sido ella.


Respecto al programa, los participantes vienen mal estilisticamente hablando, pero es que les ponen peor, da pena verlos.
 




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La que ha hecho el cambio radical ha sido ella.


Respecto al programa, los participantes vienen mal estilisticamente hablando, pero es que les ponen peor, da pena verlos.


Fíjate si lo ha hecho que, Interviú, la revista que dirigió, la da más de 60.000 euros por un desnudo integral.
 
@Cazabollos is coming : el Torito da pena y vergüenza a partes iguales. ¿Quién le habrá enchufado ahí?. Todavía me acuerdo del papelazo que hacía con el inefable Efrén de Hombres, mujeres, etc...
 
se me habia pasado que hoy emitian eso. No se yo si ni siquiera el "Midas" JJVazquez vaa poder remontar eso...
La que mas me repatea es la supuesta estilista jefe (Cristina creo que se llama) que tiene pinta de ser la típica paletona del pueblo que huyo de su rural profundo para ser una moderrrrna
 
Ja, ja, tengo que confesar que a pesar de no ver jamás la televisión, me enteré hace muy poco de la existencia del programa y en ratos tontos lo voy viendo en mitele.
Adelanto bastantes trozos, es lo bueno de ver vídeos (aunque a veces salta la publi, por lo que mientras navego por otras páginas). Pero por cotilleo y curiosidad me he enganchado.
Me parece infumable el planteamiento, eso sí. Además se nota que siguen un guión y que los concursantes salen desarreglados a posta.

Aquí están:

http://www.mitele.es/programas-tv/cambiame/
 
Soy la única que esta viendo el programa.Pues si que estoy mal¡ jajaja


jajajaa, yo que no veo tele xq me aburre, no por basura o no basura...no sabía que existía este pograma

y lo pongo y veo a ma MM aka JJ.

es todo clavaó a la presentadora aquella que bordaba la grandísima yolanda ramos en "volver" almodovar.

muy tremendo lo que he visto durante unos 20 minutos.
 
02SEP201507:33 h
La única que no 'cambia' es Rociíto
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Pues sí. Empezamos bien la temporadita, que diría Ned Flanders. Como para que, en breve, y sin avisar, empiecen a trepanar el cerebelo a los telespectadores más díscolos en riguroso directo y a la mayor gloria de los 'estilitontos' de turno. 'Cámbiame premium', el hermano mayor y con ínfulas de 'Cámbiame no premium', ese telepandillero chungo y diario que presenta, 'teleprompter' de por medio, Marta Torné. "La vida de la gente que pase por el programa puede cambiar en todos los aspectos, no solo físicos", anunciaba, a bombo y platillo, uno de sus presentadores. Y la frasecita es como para echarse a temblar y no parar hasta abril.

Delirante ejemplo de cómo la televisión puede ser el vehículo idóneo para inculcar en la audiencia más cutre del mundo sandeces de todo tipo. Un sindiós de programa, refrito de nueve formatos, cada cual más delirante que el anterior. ¡Me río yo de los nuevos estilos de vida! Y es que, visto lo visto anoche, en España ya nadie quiere ser quién, y cómo, era. Nos ha entrado a todos una extraña ventolera. Necesitamos cambiar lo que somos, urgentemente, por una cuestión de meras apariencias. Pero, ¿es que no queda nadie en este rincón de Europa que esté satisfecho consigo mismo?¿De verdad que ya no hay ciudadanos en esta nación de naciones, a excepción de Pablo Iglesias, que estén de acuerdo con su forma de ser y/o vestir? El lunes, sin ir más lejos, a Paz Padilla le hicieron un 'redecorado' en directo que consistió, básicamente, en juntarle las t*tas y vestirla de gala años 20.

Pero lo de anoche fue como para pedir asilo político en Mordor.

Antes, hace unos lustros, nos bastaba con una llamadita. En plan:"¡Rupert, te necesito!". Y con lucir después una novísima permanente de mármol era más que suficiente. Ahora no. En estos tiempos oscuros que corren, los 'estilitontos' atacan en manada. Cual lobos hambrientos. Vienen a ser algo así como la Guardia de la Noche de la Horterez.


Cambiamos todos. Punkis, jevis, fachas, Makokes... Hasta el inefable Fortu, que no se había cortado el pelo desde que hizo la mili (¿en la Roma Clásica?). Y lo cambiamos todo: casas (¿por qué destrozaron el hogar de la pobre Amparo?), maridos, principios, microondas, gotelés, chikiparques, pipicanes... Nadie quiere ser como es. O tener lo que tenía. Menos Rociíto. Es lógico. Ahí sigue la tía. Llevándoselo muerto a costa de su mamá.Directito a la saca. En una de meritocracia bovina que provocaría carcajadas si no fuera porque, al verla ahí, al frente de su programita, uno no tarda en empezar a llorar. La 'hijísima de'. Como si fuera el dinosaurio de Monterroso vestido en Berskha. Rociíto, el reverso femenino de Paquirrín,lleva toda la vida aquí. Entre nosotros. Como una ola. Igual que una puñetera ola empeñada en ahogarnos a todos en el océano del patetismo. Ahogarnos de estupor. Y no, no engaña por más que quiera dárselas de repeinada en Nueva York y engalanada de 'femme fatale' de riguroso 'noir'.



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Se animó Rociíto, en la noche de su debut, a cambiar la fisonomía y el estilismo de un pueblo entero, Tolox, ubicado en la sierra malagueña, modificando su parque infantil. Imagino que la semana que viene la emprenderán con Manhattan. Y, más tarde, le llegará el turno a Berlín.Vendrá luego el temido día en que todos vestiremos, votaremos y pensaremos según los dictados de Cristina Rodríguez (¡y ese canalillo suyo que parece salido de un filme de Russ Meyer!), Pelayo Díaz yNatalia Ferviú, la Santísima Trinidad de la 'Estilticia'. Con Rociíto al frente, por supuesto. Esa profesional del vacío más absoluto de nuestra tele.

No digáis luego que no estábais avisados.

Porque nos lo merecemos. Ya está bien de llorar...


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http://www.elmundo.es/blogs/elmundo/teletridente/2015/09/02/la-unica-que-no-cambia-es-rociito.html
 
Rociíto, el reverso femenino de Paquirrín,lleva toda la vida aquí. Entre nosotros. Como una ola. Igual que una puñetera ola empeñada en ahogarnos a todos en el océano del patetismo. Ahogarnos de estupor. Y no, no engaña por más que quiera dárselas de repeinada en Nueva York y engalanada de 'femme fatale' de riguroso 'noir'.

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