Boyer y Preysler. Batalla judicial de los hijos contra Preysler por la herencia.

¡Ay, @Rochi, es que esta mujer me tiene pinta de ser mortalmente aburrida!
Quizás se amoldó a él siendo totalmente sumisa, proporcionándole un hogar confortable y facilitándole los sinsabores del día a día. No creo que con Elena Arnedo eso fuese posible. Parecía una de esas mujeres que piensa que una pareja las responsabilidades de la casa y la familia son cosa de dos.
Muchos periodistas la han calificado de "geisha" pero, por lo que yo he leído, las geishas son mujeres cultivadas y fueron educadas para entretener y hacer compañía. En cambio, esta señora luce muy bien pero no me la imagino siguiendo una conversación más que con asentimientos de cabeza y sonrisas agradables.
 
Recuerdo que Jaime Peñafiel escribió (tal y como lo hace él, reescribiendo la misma anécdota un millar de veces) que Isabel Preysler y Miguel Boyer tenían su affair estando ambos casados. No sé donde se producían sus encuentros pero, según Peñafiel, la Preysler se llevaba a Tamara (que era muy pequeña) con ella para disimular un poco. No sé qué historias le contaría al marqués pero al final se descubrió el pastel un día mientras veían la televisión en casa de Falcó y apareció en la pantalla Miguel Boyer. Entonces Tamara, con toda su inocencia, comentó: "Mira, mamá, ese señor es tu amigo, al que vamos a ver a su casa tal y tal día".
 
Creo que Isabel debe de estar pasando un mal momento que capitalizará como la viuda doliente de España, en el Hola y demás revistas que le aporten un beneficio económico y que la vuelvan hacer una figura de actualidad, con miras a pescar un nuevo incauto, que muy probablemente sea Florentino!!! . . . Desde luego el luto de Isabel no creo que sea muy largo, en tres o cuatro meses ya habrá vuelto a "recuperar la ilusión!!!
 
Nunca entenderé cómo una persona de la inteligencia y aspiraciones intelectuales de Boyer, se pudo casar con este florero. Yo misma que tengo una inteligencia normalita, pero con inquietudes, que me gusta saber, conocer más y más...en fins, es como si yo me imagino casada con un figura de los de "Hombres Mujeres y viceversa". Prefiero morir entre horribles sufrimientos.:bag:
Yo quiero una persona a mi lado al que poder admirar y respetar a nivel intelectual, hablar de cotilleos y de física cuántica, si toca. Admiro la inteligencia!

Boyer tenía una cabeza privilegiada, creo que era físico y economista, y recuerdo manuales de la carrera escritos por él.
Boyer escribía libros y su mujer leía el Hola y los frascos de las cremas. ¿Entendéis una pareja así? Yo no podré nunca! ¿Qué carajo ve un hombre como Boyer en una mujer como Preysler?


Boyer era como Arthur Miller: tenían mujeres bien interesantes, formadas y con carácter pero que seguramente les hacían alguna ligera crítica y posiblemente no fueran nada sumisas. Luego ambos se casaron con dos mujeres que no paraban de alabarles, de decir a todo que sí y con cabecitas más bien huecas. Demasiado egocéntricos como para que sus mujeres fueran igual o más que ellos.
Un tipo de esta clase que sea por ejemplo arquitecto con una mujer como las dos primeras seguramente oiría de su primera esposa "al edificio le falta esto" y de la segunda "qué edificio más bonito, da igual que le falte esto".
Con tanto ego, ¿con cuál se van a quedar? Es tan raro el combo Miller-Monroe como el Boyer-Preysler, al menos el último ha durado tres décadas. Creo que la china y el ministro sí andaban enamorados.
 
Recuerdo que Jaime Peñafiel escribió (tal y como lo hace él, reescribiendo la misma anécdota un millar de veces) que Isabel Preysler y Miguel Boyer tenían su affair estando ambos casados. No sé donde se producían sus encuentros pero, según Peñafiel, la Preysler se llevaba a Tamara (que era muy pequeña) con ella para disimular un poco. No sé qué historias le contaría al marqués pero al final se descubrió el pastel un día mientras veían la televisión en casa de Falcó y apareció en la pantalla Miguel Boyer. Entonces Tamara, con toda su inocencia, comentó: "Mira, mamá, ese señor es tu amigo, al que vamos a ver a su casa tal y tal día".

Se veían en un apartamento del Barrio de Salamanca, con acceso desde el garaje.
 
Y vuelvo al libro...

donde describían a pocha como el reposo del guerrero, gilipollesco término.
que cuando llegaba maik a casa ya no había nada + importante. qué tal mi amor? que tal el día?

lo contaba de una forma muy divertida, todo el libro es así, diciendo que se la bufaba la respuesta de maik xq fuera cual fuera la suya era que daba igual que ahora estaba en casa y que se relajara y se olvidara de todo jajaja.


contaba tb como pochabel era a veces indiscreta hasta el punto de comentar en reuniones de amigos que su maik era muy fogoso y que "el otro día viendo la tele, maik que parece tan serio me dijo, isabel, estás + buena que el pan"

y boyer se enfadó y la regañó en público. jajajaj. es tronchante todo
 

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