Clavado, el nene 'presuntamente' sale al vicioso de su padre al que le iba el cuero y las motos ( ya sabes a lo que me refiero ), la madre es otra a la que le encantaba comer marisco con azucar glass. Fue un matrimonio concertado: el necesitaba un heredero y ella pasta.
Es un secreto a voces que a este chico le encanta comer salchichas alemanas.
Esos matrimonios donde cada uno tiene claro lo que espera del otro pueden ser muy felices. Creo que en este caso ellos lo fueron (además de que cada uno consiguió lo que buscaba).