UL & ROSA
JAIME PEÑAFIEL
03/11/2018
CHSSS...
¡ANGELITO MÍO, SÓLO TIENE 13 AÑOS !
LAS ¿PROFÉTICAS? PALABRAS DE FARUK
LEONOR Y SU FUTURO
El titular no es mío sino de la infanta Pilar, la hermana del Rey Juan Carlos, tía de Felipe y tía abuela de Leonor. Esta frase figuraba al final de una entrevista de Ana Asensio en el ABC, del pasado martes y que yo comparto, menos cuando dijo que “Leonor y Sofía son igual que todos los niños a su edad”. Estoy seguro de que estos comentarios no han debido gustar ni mucho ni poco a Letizia. Bien es sabida la falta de química, por no decir de simpatía, entre la infanta y la consorte. No podemos olvidar el feo que ésta le hizo a Doña Pilar el 30 de julio de 2016 con motivo de su 80 cumpleaños y que celebró en su villa mallorquina de Calviá. Aquel día acudieron no sólo los hijos y nietos de Pilar, también los Reyes Juan Carlos y Sofía, el Rey Felipe y su hermana la infanta Elena. No así Letizia, que sí compareció, desafiante, al día siguiente, con toda la familia en una cena en el restaurante Flanigan de Palma. Estimada Doña Pilar, cuando en la entrevista habla de la igualdad de la educación con la de otras herederas, aunque debería ser así, no es tal. A las pruebas me remito: la belga Isabel, en un internado británico que recuerda al famoso Hogwarts de Harry Potter; la holandesa Amalia, en un colegio público; la noruega Ingrid es criticada por estudiar en un colegio privado y la sueca Estela en un moderno centro social a las afueras de Estocolmo. Nada que ver con la educación de Leonor y Sofía y su exclusivo colegio de Los Rosales. Como sabe muy bien la infanta y también nuestros lectores, actualmente existen en Europa 10 monarquías: Inglaterra, Dinamarca, Noruega, Suecia, Holanda, Bélgica, Mónaco, Liechtenstein, Luxemburgo y España. Pero, si en un futuro más o menos lejano, resisten la borrasca de la modernidad, sobreviviendo en un continente sin fronteras y con regímenes políticos cada vez más democráticos cuando no radicalmente republicanos, la mitad de los titulares de esas monarquías, exactamente el 50 por ciento, serán mujeres frente al 20 por ciento actual con dos: Isabel en el Reino Unido y Margaritaen Dinamarca.
Y lo serán si no se cumplen las proféticas palabras del rey Farukcuando, el 23 de julio de 1952, era derrocado por un general apellidado Naguib. Al iniciar su exilio en la Costa Azul, declaró, con cínico desprecio e indiferencia a la Institución de la que había sido uno de sus miembros, excéntrico, corrupto, pero soberano al fin: “No me preocupa haber perdido el trono porque dentro de unos años en el mundo sólo quedarán cinco reyes: los cuatro de la baraja y la Reina de Inglaterra”. Durante un tiempo, aquella frase pareció cumplirse. No sólo porque al final de la Guerra Mundial desaparecían las monarquías de Italia, Albania, Bulgaria, Rumania, Prusia, Austria-Hungría y Yugoslavia, sino que después cayeron las de Irak, Túnez, Etiopía y, más tarde, las de Grecia, Irán y, por ultimo, la de Nepal.
En todos estos años, sólo una monarquía, la de España, ausente del club de reyes desde el 14 de abril de 1931, fue instaurada, primero por la voluntad de un general y, después, restaurada por renuncia y transmisión de derechos del único que podía hacerlo, Don Juan de Borbón que los había recibido de su padre el rey Alfonso XIII.
En contra de las predicciones de aquel curioso rey cairota, en Europa siguen existiendo 10 monarquías aunque nadie garantiza su existencia en un futuro. Al menos en España, donde por primera vez desde la abdicación del Rey Juan Carlos, partidos de izquierda, como Podemos, así como nacionalistas catalanes y otros piden su abolición.
Recientemente una periodista, muy cortesana ella, se atrevió a publicar en su periódico que Leonor “será una gran Reina”. Recuerdo que respondí a tal ridículo atrevimiento: mejor sería preguntar si reinará algún día.
Porque, de las cinco herederas europeas, –Isabel de los belgas, Amalia de los Países Bajos, Ingrid Alejandra de Noruega, Estelade Suecia y Leonor de España–, casi todas de la misma edad menos la heredera sueca, con seis años, la española es la que más difícil lo tiene. No porque su futuro dependa del legado de su padre, el Rey Felipe VI, sino porque, como recoge la compañera Carmen Remírez de Ganuza en su libro Leonor el futuro condicionado de la Monarquía, publicado por la editorial Plaza&Janés, “la actualidad política, las tensiones territoriales, los escándalos del final del anterior reinado y errores del presente, como el revés viral de la discusión familiar de Mallorca a la salida de la misa de Pascua” hacen que el futuro de Leonor esté tan ligado al de su padre. Y recuerda que “Carlos IV se exilió, Fernando VII volvió del exilio, Isabel II se exilió, Alfonso XII volvió del exilio, Alfonso XIII se exilió, Juan Carlos volvió del exilio... A Felipe VI le tocará exiliarse y Leonor lo tendrá muy difícil para volver a reinar”.
Se les debería caer la cara de vergüenza por ningunear al Rey Juan Carlos en todos aquellos actos referidos a la Constitución y cuya presencia física es obligada. (...) No lleva razón cuando afirma que la democracia no la trajo el Rey sino el pueblo. (...) 15 años ya de aquella frase de Letizia en su primera comparecencia pública, el 6 de noviembre, ante la prensa y que fue algo así como su tarjeta de presentación y seña de identidad: “Déjame terminar a mí”. (...) Sorprende el cambio tan radical de la Infanta Cristina incluso con los medios a quienes regala sus mejores sonrisas. ¿Tendrá razón mi querida Pilar Eyre? (...) En una democracia no hay presos políticos sino políticos presos. Cuando uno lo ha sido, esto ofende, ha confesado Nicolás Sartorius, nada sospechoso. (...) La vida de Máxima, a diferencia de la consorte española, no parece ser sólo una foto. (...) Lleva razón Mabel Galaz y ella misma no sabe cuánto, al atribuir al cantante un carácter tan complejo que le ha apartado de su familia, su representante y ahora de su pareja. ¡Si yo te contara! (...) Se olvida de que los niños no son mascotas a las que tomar y dejar. En cierta ocasión lo critiqué y un juez me condenó. Hoy, con lo del escultor y el cantante, lo repito. (...) La presentadora le pide a TVE lo que las televisiones no pueden dar: paciencia. ¿Te estarás equivocando embarcándote en una cadena a la baja?
JAIME PEÑAFIEL
03/11/2018
CHSSS...
¡ANGELITO MÍO, SÓLO TIENE 13 AÑOS !
LAS ¿PROFÉTICAS? PALABRAS DE FARUK
LEONOR Y SU FUTURO
El titular no es mío sino de la infanta Pilar, la hermana del Rey Juan Carlos, tía de Felipe y tía abuela de Leonor. Esta frase figuraba al final de una entrevista de Ana Asensio en el ABC, del pasado martes y que yo comparto, menos cuando dijo que “Leonor y Sofía son igual que todos los niños a su edad”. Estoy seguro de que estos comentarios no han debido gustar ni mucho ni poco a Letizia. Bien es sabida la falta de química, por no decir de simpatía, entre la infanta y la consorte. No podemos olvidar el feo que ésta le hizo a Doña Pilar el 30 de julio de 2016 con motivo de su 80 cumpleaños y que celebró en su villa mallorquina de Calviá. Aquel día acudieron no sólo los hijos y nietos de Pilar, también los Reyes Juan Carlos y Sofía, el Rey Felipe y su hermana la infanta Elena. No así Letizia, que sí compareció, desafiante, al día siguiente, con toda la familia en una cena en el restaurante Flanigan de Palma. Estimada Doña Pilar, cuando en la entrevista habla de la igualdad de la educación con la de otras herederas, aunque debería ser así, no es tal. A las pruebas me remito: la belga Isabel, en un internado británico que recuerda al famoso Hogwarts de Harry Potter; la holandesa Amalia, en un colegio público; la noruega Ingrid es criticada por estudiar en un colegio privado y la sueca Estela en un moderno centro social a las afueras de Estocolmo. Nada que ver con la educación de Leonor y Sofía y su exclusivo colegio de Los Rosales. Como sabe muy bien la infanta y también nuestros lectores, actualmente existen en Europa 10 monarquías: Inglaterra, Dinamarca, Noruega, Suecia, Holanda, Bélgica, Mónaco, Liechtenstein, Luxemburgo y España. Pero, si en un futuro más o menos lejano, resisten la borrasca de la modernidad, sobreviviendo en un continente sin fronteras y con regímenes políticos cada vez más democráticos cuando no radicalmente republicanos, la mitad de los titulares de esas monarquías, exactamente el 50 por ciento, serán mujeres frente al 20 por ciento actual con dos: Isabel en el Reino Unido y Margaritaen Dinamarca.
Y lo serán si no se cumplen las proféticas palabras del rey Farukcuando, el 23 de julio de 1952, era derrocado por un general apellidado Naguib. Al iniciar su exilio en la Costa Azul, declaró, con cínico desprecio e indiferencia a la Institución de la que había sido uno de sus miembros, excéntrico, corrupto, pero soberano al fin: “No me preocupa haber perdido el trono porque dentro de unos años en el mundo sólo quedarán cinco reyes: los cuatro de la baraja y la Reina de Inglaterra”. Durante un tiempo, aquella frase pareció cumplirse. No sólo porque al final de la Guerra Mundial desaparecían las monarquías de Italia, Albania, Bulgaria, Rumania, Prusia, Austria-Hungría y Yugoslavia, sino que después cayeron las de Irak, Túnez, Etiopía y, más tarde, las de Grecia, Irán y, por ultimo, la de Nepal.
En todos estos años, sólo una monarquía, la de España, ausente del club de reyes desde el 14 de abril de 1931, fue instaurada, primero por la voluntad de un general y, después, restaurada por renuncia y transmisión de derechos del único que podía hacerlo, Don Juan de Borbón que los había recibido de su padre el rey Alfonso XIII.
En contra de las predicciones de aquel curioso rey cairota, en Europa siguen existiendo 10 monarquías aunque nadie garantiza su existencia en un futuro. Al menos en España, donde por primera vez desde la abdicación del Rey Juan Carlos, partidos de izquierda, como Podemos, así como nacionalistas catalanes y otros piden su abolición.
Recientemente una periodista, muy cortesana ella, se atrevió a publicar en su periódico que Leonor “será una gran Reina”. Recuerdo que respondí a tal ridículo atrevimiento: mejor sería preguntar si reinará algún día.
Porque, de las cinco herederas europeas, –Isabel de los belgas, Amalia de los Países Bajos, Ingrid Alejandra de Noruega, Estelade Suecia y Leonor de España–, casi todas de la misma edad menos la heredera sueca, con seis años, la española es la que más difícil lo tiene. No porque su futuro dependa del legado de su padre, el Rey Felipe VI, sino porque, como recoge la compañera Carmen Remírez de Ganuza en su libro Leonor el futuro condicionado de la Monarquía, publicado por la editorial Plaza&Janés, “la actualidad política, las tensiones territoriales, los escándalos del final del anterior reinado y errores del presente, como el revés viral de la discusión familiar de Mallorca a la salida de la misa de Pascua” hacen que el futuro de Leonor esté tan ligado al de su padre. Y recuerda que “Carlos IV se exilió, Fernando VII volvió del exilio, Isabel II se exilió, Alfonso XII volvió del exilio, Alfonso XIII se exilió, Juan Carlos volvió del exilio... A Felipe VI le tocará exiliarse y Leonor lo tendrá muy difícil para volver a reinar”.
Se les debería caer la cara de vergüenza por ningunear al Rey Juan Carlos en todos aquellos actos referidos a la Constitución y cuya presencia física es obligada. (...) No lleva razón cuando afirma que la democracia no la trajo el Rey sino el pueblo. (...) 15 años ya de aquella frase de Letizia en su primera comparecencia pública, el 6 de noviembre, ante la prensa y que fue algo así como su tarjeta de presentación y seña de identidad: “Déjame terminar a mí”. (...) Sorprende el cambio tan radical de la Infanta Cristina incluso con los medios a quienes regala sus mejores sonrisas. ¿Tendrá razón mi querida Pilar Eyre? (...) En una democracia no hay presos políticos sino políticos presos. Cuando uno lo ha sido, esto ofende, ha confesado Nicolás Sartorius, nada sospechoso. (...) La vida de Máxima, a diferencia de la consorte española, no parece ser sólo una foto. (...) Lleva razón Mabel Galaz y ella misma no sabe cuánto, al atribuir al cantante un carácter tan complejo que le ha apartado de su familia, su representante y ahora de su pareja. ¡Si yo te contara! (...) Se olvida de que los niños no son mascotas a las que tomar y dejar. En cierta ocasión lo critiqué y un juez me condenó. Hoy, con lo del escultor y el cantante, lo repito. (...) La presentadora le pide a TVE lo que las televisiones no pueden dar: paciencia. ¿Te estarás equivocando embarcándote en una cadena a la baja?