Aumentan un 2.500% las peticiones de cambio de s*x* en niños en Inglaterra

Niños de que edades?.
Pues en un colegio hay una niña y un niño.
La niña hizo la comunion el año pasado, entonces tendrá unos 10 años. Se ha cortado el pelo, ya no lleva pendientes, viste ropa deportiva tipo de rugby...y se llamaba de una manera y ahora tiene un nombre masculino.
El niño va a la clase de mi sobrino, 7 años, y su transformacion exterior esta siendo mas lenta, ahora lleva el pelito mas largo y tambien le llaman con un nombre femenino.
El tercer niño va a otro colegio y solo le conozco de vista, alrededor de 8 años tendra.
 
Creo que hasta los 18 mínimo no debiera darse un tratamientos hormonal, antes se ocultaban( muy mal) pero creo que tambien ahora directamente a la iduncion con tanto borbandeo, solo hay una cosa en las que hay que enseñar a los niños respecto al género respeto al otro y al s*x* etc advertilos de los abusos sexuales mediante cuentos dejarles muy claro que nadie debe hacerle nada cosas de ese tipo sea quien sea y caiga quien caiga, el resto de cosas que sigan su curso natural de género de sexualidad de creencias de un montón de cosas, respeto al diferente y guía de protección en su cuerpo, nada mas.
 
Cada vez aparecen más casos de adultos que se arrepienten de su cambio de s*x*. Copio un ejemplo.

Renée Richards (el nombre de mujer que le hizo famoso), aunque en realidad nació como Richard Raskind. Fue un campeón de tenis muy famoso en los años 70 y saltó a la fama no solo por su destreza con la raqueta sino por ser una de las primeras personas del mundo en someterse a un cambio de s*x*.

Su decisión creó un gran revuelo en la sociedad de aquel entonces, llegando a convertirse en un símbolo para el transexualismo del siglo XX. Era de esperar que Richards mostrara una imagen de fortaleza y valentía… pero esta imagen no se asemejaba a la pesadilla que estaba viviendo el tenista fuera de las cámaras.

Richards: «Hay muchas opciones a destrozarte la vida por la confusión de no saber quién eres”

En una entrevista concedida a la revista ‘Tennis Magazine’ en 1999 Richards confesó la realidad del cambio de s*x*.

“Se que en el fondo que soy una mujer de segunda clase, si hubiera tomado una droga que me redujera la presión la hubiera tomado sin pensar, antes que operarme. No quiero ser ningún ejemplo a seguir para personas transexuales. Quiero decir públicamente que hay mejores opciones a la operación de cambio de s*x*, hay muchas opciones a destrozarte la vida por la confusión de no saber quién eres.
 
Última edición:
Que eso no se hace así de fácil, es un proceso complejo
Los ven psicólogos, psiquiatras en algún caso complejo y medicos.
Seguro que todos, incluidos los padres están conchabados.
Por supuesto que se que hay "un equipo multidisciplinar" que estudia cada caso. Solo pienso que hay edades demasiado tempranas para comenzar con cambios de s*x*.
También hay un equipos de psicólogos, pedagogos, trabajadores sociales, jueces que dan como rehabilitados a asesinos y violadores. Y se equivocan.
 
Documento de posicionamiento: disforia de género en la infancia y la adolescencia. Grupo de Identidad y Diferenciación Sexual de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (GIDSEEN)

La disforia de género (DG) en la infancia y adolescencia es una condición compleja, siendo importante la detección precoz y el tratamiento integral, ya que con ello se mejora la calidad de vida, disminuye la comorbilidad mental y la propia DG. En este documento de posicionamiento, el Grupo de Identidad y Diferenciación Sexual de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (GIDSEEN), integrado por especialistas de Endocrinología, Psicología, Psiquiatría, Pediatría y Sociología, establece unas recomendaciones sobre la evaluación y tratamiento de la DG en niños y adolescentes. El manejo interdisciplinar de la DG debe llevarse a cabo en unidades con equipos especializados (UTIG) y considerando que cualquier intervención sanitaria debe seguir los principios del rigor científico, la experiencia acumulada, los principios éticos y deontológicos y la prudencia necesaria ante tratamientos crónicos, agresivos e irreversibles.

Introducción

La discordancia entre la identificación de género sentida y el s*x* asignado y de crianza produce un sentimiento disfórico que puede manifestarse en diferentes grados de intensidad en cada persona y momento vital1. La disforia de género (DG) en la infancia y adolescencia es una condición compleja y asociada a intenso malestar, siendo por ello de suma importancia la detección precoz y el tratamiento integral, ya que así se mejora la calidad de vida, disminuye la comorbilidad mental y la propia DG2,3.

Un número cada vez mayor de niños/as y adolescentes, identificados como «transgénero» (incongruencia transitoria o persistente con el s*x* biológico), están buscando asesoramientos y asistencia médica para conseguir cuanto antes el desarrollo de características físicas acordes a su género afirmado4.

El Grupo de Identidad y Diferenciación Sexual de la Sociedad Española de Endocrinología (GIDSEEN), integrado por especialistas de Endocrinología, Psicología, Psiquiatría, Pediatría y Sociología, trabaja de forma multidisciplinar desde el año 2010 en torno a la DG y la diferenciación sexual5. Uno de los principales objetivos de este grupo ha sido consensuar y unificar un protocolo de evaluación y de intervención para los menores con DG basado en guías internacionales y contextualizado a la realidad de nuestro país, de la misma forma que han llevado a cabo otros países6–11.

Unidades especializadas interdisciplinares

El presente documento desarrolla el posicionamiento del grupo GIDSEEN sobre la atención especializada en el ámbito sanitario de la transexualidad y, en concreto, la necesidad de cautela para el manejo de la DG que se manifiesta en la edad infantil y adolescente. La atención a la transexualidad e identidad de género, en el momento actual, se entiende como una acción interdisciplinar, dentro de unidades especializadas (UTIG) que, desde hace más de 10-15 años, funcionan en el ámbito sanitario público nacional y en estrecho contacto con el entorno escolar, familiar y jurídico12–15. Estas unidades asumen los consensos internacionales y han sido acreditadas y evaluadas con criterios de calidad asistencial institucional.

El grupo GIDSEEN objetiva, sin embargo, que en el transcurso de los últimos años han proliferado en España «pseudounidades no oficiales» de atención a la transexualidad, tanto dentro del sistema público de salud como en el entorno privado. En concreto muchas de ellas, sin ninguna o escasa regulación, están tratando a niños y niñas, respondiendo a las demandas de sus familias, generalmente desorientadas y poco informadas sobre el modelo terapéutico más idóneo y recomendado para sus hijos e hijas.

A este respecto, la mayor parte de los profesionales que formamos las UTIG queremos aportar nuestra reflexión continua y experiencia, con el fin de que se asegure y se regule la atención al colectivo de menores con DG. Esto podría evitar alteraciones psicológicas y físicas, en el futuro adolescente y adulto, de quienes hoy reciban en la infancia un abordaje precoz y/o inadecuado.

Dichas «nuevas» unidades necesitan estar dotadas de un cuadro profesional debidamente acreditado, tanto por los organismos sanitarios oficiales como por los colegios profesionales de cada especialidad implicada, evitando que personas sin la titulación básica suficiente, y amparándose, por ejemplo, en estudios de posgrado, puedan llevar a cabo actuaciones para las que no están autorizados.

Identidad de género en la infancia y adolescencia

Se considera que la identidad de género se conforma en los primeros años de vida. Dependiendo de los autores, se podría establecer entre el primer y el cuarto año de vida. Sin embargo, esto no significa que la identidad, ni general ni sexual, quede necesariamente cerrada y completa16–18. La identidad se desarrolla a lo largo de toda la vida, en función de las experiencias sociales de la persona y la identidad de género sigue el mismo camino. No es hasta los 6-7 años cuando se considera más estabilizada y siempre de acuerdo a 3 componentes, la «etiqueta de género» (realidad de ser niño o niña), «estabilidad del género» (sentimiento de que este género no va a cambiar con el tiempo) y «consistencia del género» (sentimiento de estabilidad independientemente de la apariencia física). La identidad de género se irá afianzando si este proceso ocurre de forma adecuada y siempre muy relacionado con el entorno afectivo y la autoestima del menor.

Cabe destacar que «el comportamiento de género cruzado» (a veces conocido como «rol de género») no es equivalente a la DG; de hecho, la mayoría de los menores con un comportamiento no conforme con el género no resultan tener una identidad transgénero4,19.

La adolescencia comienza con la pubertad y con todos los cambios que esta supone para el organismo. Es un proceso de desarrollo endocrino y psicológico que va más allá de lo meramente corporal. Es frecuente que este periodo conlleve cierta inestabilidad, provocada por la brusquedad de los cambios y la lógica readaptación a los mismos. De ahí que la llamada «crisis de la adolescencia» no resulte rara y que, por el contrario, resulte mucho más extraño pasar por la adolescencia como algo liviano.

Pero para quien no está esperando estos cambios corporales, las expectativas sobre los mismos van a generar muchas incertidumbres ¿cómo serán los cambios?, ¿con qué intensidad se producirán?, ¿a qué ritmo?, ¿cuál será el resultado?

En la adolescencia, como se viene exponiendo, no solo tienen lugar modificaciones físicas; también se produce un gran desarrollo intelectual, incluyendo la aparición del pensamiento simbólico en el estadio de las operaciones formales y la autoconciencia (nunca antes de los 12 años y a veces mucho más tarde).

Otro factor a tener en cuenta es la persistencia de la DG. Diferentes estudios dan resultados dispares, pero hay un denominador común: la persistencia en niños es claramente menor que en adultos. Los datos de persistencia indican que una gran mayoría (80-95%) de niños prepuberales que dicen sentirse del s*x* contrario al de nacimiento, no seguirá experimentado tras la pubertad la DG20–22, dificultando con ello el establecimiento de un diagnóstico definitivo en la adolescencia23.

Por el contrario, se sabe que si la identidad cruzada continúa tras el inicio de la pubertad, la DG se mantendrá en general en la edad adulta8,19. Por consiguiente, las valoraciones psicológicas en niños deben ser más cuidadosas aún que en adultos, deben ser realizadas por personal especializado en DG y deben evitar en lo posible intervenciones médicas dañinas o irreversibles16,24–26.

Actitud ante la disforia de género en niños y adolescentes

Dadas las consecuencias parcial o totalmente irreversibles de los tratamientos hormonales, es absolutamente necesario realizar un cuidadoso diagnóstico y una evaluación exhaustiva individualizada en UTIG15,27. Debemos tener en cuenta que la identidad sexual y de género forma parte de la personalidad y esta es un sistema dinámico que se desarrolla en relación recíproca con el medio y que incluye al mismo tiempo factores disposicionales, culturales y sociohistóricos28. Por consiguiente, el profesional que realiza el diagnóstico tiene que tener una buena formación en psicopatología del desarrollo en la infancia y adolescencia, y ser competente en el diagnóstico y tratamiento de problemas mentales, además de ser un amplio conocedor de la DG3.

Una vez constatada la persistencia de la DG mediante una adecuada evaluación psicológica, y objetivado el inicio de la pubertad por una valoración endocrinológica, se puede considerar una terapia que disminuya los niveles de esteroides sexuales y la aparición de los caracteres sexuales secundarios. Estos objetivos se pueden conseguir a través del bloqueo puberal con análogos de GnRH. Hasta la fecha se consideran 2 requisitos para la indicación de este tratamiento, ser mayor de 12 años y presentar estadio puberal superior al II de Tanner; a partir de los 16 años se incorpora progresivamente la terapia cruzada con esteroides sexuales. Es obligado informar al menor y a sus tutores acerca de los efectos de estos tratamientos sobre la fertilidad y la maduración psicoemocional, y también respecto a la complejidad y limitaciones de las futuras cirugías genitales reconstructivas15,20,27.

La escasez de datos de eficacia y seguridad a largo plazo de las terapias en menores hace necesaria una evaluación estrecha por grupos experimentados en DG, ya que los ensayos clínicos no se han considerado éticos.

Todo lo anterior exige que la atención a la DG sea precedida por un diagnóstico, con seguimiento suficiente, en un marco de equipos multidisciplinares y con un protocolo específico registrado por los organismos competentes.

Cualquier intervención sanitaria debe seguir los principios del rigor científico, la experiencia acumulada, los principios éticos y deontológicos y la prudencia necesaria ante tratamientos crónicos, agresivos e irreversibles. Estos tratamientos a menores plantean además el problema añadido de estar huérfanos, por el momento, de un marco legal explícito.

Al poner de manifiesto esta realidad, como grupo de trabajo especializado y que representa a la mayoría de los profesionales de las UTIG de España, instamos a los organismos pertinentes a que se actúe de modo ágil y eficaz, definiendo la regulación asistencial y marco legal, en el menor con DG y/o en situación de diversidad de género.

Conflicto de intereses

Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.

https://www.elsevier.es/es-revista-...to-disforia-genero-infancia-S157509221500090X
 
  • Pobre David Reimer, experimentaron con el y acabó suicidandose

El experimento más cruel de la historia de la Psicología: David Reimer
El caso de David Reimer supone uno de los experimentos más perturbadores de la Psicología.

Bertrand Regader

http://www.fatosdesconhecidos.com.br/wp-content/uploads/2014/12/David_Reimer_03.jpg
El caso de David Reimer: uno de los casos más escandalosos de la historia de la Psicología.

¿Quién fue David Reimer? En el artículo de hoy vamos a recordar uno de los casos más terribles de la historia de la Psicología. En un breve coloquio con varios profesionales, a la cuestión de cuál era el experimento psicológico más despiadado que han conocido, la mayoría sacó a colación el caso de David Reimer.

David Reimer: una niñez marcada
David Reimer nació en 1965 en Winnipeg, Canadá, siendo hermano gemelo monocigótico de otro bebé llamado Brian. En el norte de los Estados Unidos y Canadá, la circuncisión es habitual, y los padres de David y Brian decidieron, por recomendación de su médico, someter a los retoños a la operación.

Hasta ahí todo normal, pero en el transcurso de la operación de David Reimer el cirujano encargado no pudo estar presente y tuvo que practicar la circuncisión el asistente. De manera inexplicable, se produjo un fallo con el cauterizador eléctrico, hecho que causó que el pexx de David quedara totalmente abrasado. Posteriormente el pexx entró en necrosis, y pocos días después, se desprendió del cuerpo.

Posible solución: transexuar a David Reimer
El desarrollo de la cirugía de reconstrucción genital se encontraba en una fase muy prematura, lo que auguraba pocas opciones para el pequeño David. No obstante, los padres de David advirtieron la existencia de un médico de Baltimore cuya teoría defendía la inexistencia de una sexualidad innata, y que por ende era posible cambiar la sexualidad del un niño mediante el desarrollo. John Money era un sexólogo con buena reputación cuyas idea sobre la superioridad de la influencia ambiental respecto a la biológica le había valido cierto reconocimiento dentro de los círculos ambientalistas del estudio de la Psicología. Money estaba convencido de que la educación determinaba la conducta de los sujetos.

Cuando los padres de David decidieron pedir consejo a Money, éste vio una buena oportunidad en el caso, ya que dispondría de un sujeto para analizar y experimentar, David, y otro sujeto control, Brian, con el cual comparar las diferencias que surgían según la educación recibida, pues está claro que a nivel genético David y Brian eran prácticamente simétricos.

Money aconsejó a la familia Reimer que David debía someterse a una operación de reconstrucción de una vagina artificial, y una vez acabada la operación, David debía recibir una educación acorde a su nuevo género: esto es, la educación que recibiría una niña. En adelante, David fue llamada Brenda. Así, los preceptos que habían de cumplir los padres eran sencillos: bastaba con tratar a Brenda del mismo modo como si fuera una niña, y no mencionar bajo ningún concepto el tema de su sexualidad artificial.

Las evidencias ponen en duda la teoría del doctor
Así pues, la familia empezó a llevar a cabo el plan. No obstante, Brenda odiaba los juguetes de chica tales como las muñecas, y solía arrancarles los vestidos. El temor de los padres a que algún día Brenda cayera en la cuenta de su verdadera sexualidad iba en aumento, pero los problemas solo estaban empezando. Cuando Brenda siguió creciendo, los efectos hormonales empezaron a mostrarse, a pesar de su tratamiento con estrógenos, Así, empezó a desarrollar una musculatura y estaturas poco femeninas. Según comentaba su hermano Brian, el único rasgo que diferenciaba a Brenda de él era la larga cabellera de ella, y partiendo de la inconsciencia de los niños, uno se puede imaginar la crueldad con que Brenda debía de ser tratada durante su etapa escolar.

Frecuentemente, los hermanos acudían a la consulta de John Money con el fin que éste fuera evaluando el desarrollo de los niños. Según relataron ambos hermanos, la terapia del doctor Money tenía consecuencias perturbadoras para ellos. En su biografía, David Reimer narra como el doctor les mostraba fotografías sexuales, que eran, según Money, necesarias para redirigir su sexualidad. Una de las escenas más estremecedoras de las terapias con Money, según relata David, es que el doctor les obligaba a quitarse la ropa en contra de la voluntad de los pequeños, y obligó a Brenda a ponerse a cuatro patas mientras su hermano Brian realizaba movimientos y tocamientos pseudosexuales contra la parte trasera de su hermana, en una escena que denominaban "ensayo sexual". Brian nunca pudo superar aquellos años. Sin embargo, el médico siempre negó estas prácticas.

Sufrimiento en la adolescencia
Brenda fue creciendo y su vida iba deteriorándose progresivamente. Se negó a someterse a más operaciones y sus intentos de su***dio empezaban a ser serios. Paulatinamente, el doctor Money fue alejándose de la familia, y fue en ese momento cuando el padre de Brenda decidió explicarle toda la verdad de su historia. Después de oír el relato, Brenda volvió a cambiar de s*x*, siendo de nuevo un hombre a nivel oficial. David contrajo matrimonio años más tarde, pero en poco tiempo su historia salió a la luz pública, perdiendo su empleo y a su mujer. Pocos años después, su hermano Brian se suicidó, según se reportó, a causa de la profunda culpabilidad que sentía por haber salido bien de la operación de circuncisión, y por los años de frustración al ver el sufrimiento de su hermano.

La investigación de Money fue encumbrada en la época, pues según sus seguidores, el caso de Brenda Reimer era la demostración empírica de que los condicionantes socioculturales determinaban la sexualidad del sujeto. Era un triunfo parcial de la rama ambientalista de la psicología, pues fue confirmado que ciertas conductas de Brenda fueron efectivamente moduladas por la educación recibida, y los genes poco podían contrarrestar ese condicionamiento aprendido, si bien algunas actitudes y declaraciones posteriores de David matizaban esta cuestión.

Una trágica historia
A pesar de los avances que supuso la investigación, las consecuencias humanas de la misma fueron catastróficas. David Reimer tuvo una vida infeliz y desgraciada. Su vida fue entregada a un investigador que alteró su albedrío en pos de unos réditos egoístas. Si algo se puede sacar en claro de la historia, es que los determinismos deben ser siempre cuestionables. Somos el resultado de un cúmulo de combinaciones, circunstancias y coincidencias que acaban conformando nuestra manera de ser, y esta manera de ser no debe ser nunca un escenario donde personas ajenas puedan manipular en aras de una ciencia que, en este caso, despreció la vida humana.

David Reimer, finalmente, acabó con su vida un 4 de mayo de 2004, cuando solo tenía 38 años de ed
 
Creo que hasta los 18 mínimo no debiera darse un tratamientos hormonal, antes se ocultaban( muy mal) pero creo que tambien ahora directamente a la iduncion con tanto borbandeo, solo hay una cosa en las que hay que enseñar a los niños respecto al género respeto al otro y al s*x* etc advertilos de los abusos sexuales mediante cuentos dejarles muy claro que nadie debe hacerle nada cosas de ese tipo sea quien sea y caiga quien caiga, el resto de cosas que sigan su curso natural de género de sexualidad de creencias de un montón de cosas, respeto al diferente y guía de protección en su cuerpo, nada mas.
A los 18 ya vas tarde para los tratamientos hormonales. Ahí está el tema. Que maduran física y psicológicamente más o menos a la vez y si esperas a que sea totalmente maduro los cambios físicos ya están establecidos, es más dificil cambiarlos y eso daña emocionalmente. Yo no sé cuál es la fórmula adecuada pero realmente un aumento tan drástico es más moda que disforia de género o transexualidad
 
A los 18 ya vas tarde para los tratamientos hormonales. Ahí está el tema. Que maduran física y psicológicamente más o menos a la vez y si esperas a que sea totalmente maduro los cambios físicos ya están establecidos, es más dificil cambiarlos y eso daña emocionalmente. Yo no sé cuál es la fórmula adecuada pero realmente un aumento tan drástico es más moda que disforia de género o transexualidad
Si es verdad a los 18 ya has hecho el cambio, pero hoy en día los tratamientos operaciones cada vez están mas avanzados etc.. así que antes me parece una locura, decirle que no se preocupe que cuando sea mayor de edad hará el transito fisici eso si muy paulatinamente por mucho que le duela, y lo de vestirse de " hombre o mujer"por supuesto sin problema, pero los cambios de cuerpo tan radicales tienen que ser paulatinos, me parece mas sensato y garantista
 
Los grupos de transexuales “altamente politizados” ponen en riesgo la salud de los niños

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Los consejeros escolares y los proveedores de servicios de salud mental británicos sucumben ante las presiones de organizaciones de transexuales “altamente politizadas” y, por ello, acaban cediendo ante las creencias de algunos niños de que nacieron con el s*x* equivocado.

Marcus Evans, psicoterapeuta y ex-director de la Tavistock y Portman NHS Foundation Trust, cuyo Servicio de Desarrollo de Identidad de Género (GIDS, por sus siglas en inglés) es la única clínica del NHS que brinda asesoramiento y transición de género, ha explicado que muchos expertos viven con el temor constante a ser etiquetados como “transfóbicos” por los radicales y que esta situación está teniendo un fuerte impacto en su actividad profesional. "Creo que la agenda política ‘trans’ ha invadido el entorno clínico que rodea al Servicio de Desarrollo de Identidad de Género", ha detallado Evans en "The Observer”. “Los jóvenes necesitan un servicio clínico independiente que tenga en cuenta sus intereses de salud a largo plazo. Hasta cierto punto, esto requiere una capacidad para resistir la presión proveniente de diversas fuentes: de la persona joven, de su familia, de las presiones de las redes sociales y de los grupos ‘pro-trans’ altamente politizados".

Según informa "The Guardian", el número de niños atendidos anualmente por el GIDS ha pasado de 468 en 2013 a 2.519 en 2018. Algunos afirman que las redes sociales son un factor clave en este aumento exponencial. En un estudio contundente, presentado en una conferencia a principios de este año, Evans citó la experiencia de "Dagny", una mujer que se identificó como una persona ‘trans’ en su adolescencia, que hizo la “transición” y que ahora se ha "destransformado". Asegura que fue muy influenciada por las opiniones expresadas en la red social Tumblr. "Una de las creencias malsanas que yo sostenía era creer que si tienes disforia de género, debes hacer la transición", explica Dagny. "Y cualquiera que pareciera interponerse en mi camino era un ‘tránsfobo’, un fanático superior de la derecha”.

Marcus Evans ha explicado a “The Observer” que los padre se acercan a él para pedirle consejo sobre sus hijos. “Y me han confirmado que muchos consejeros escolares y miembros de los CAMHS (Servicios de Salud Mental para Niños y Adolescentes) están adoptando un enfoque proafirmativo de género. Todos estos padres me expresan su preocupación porque después de que sus hijos anunciaran repentinamente que creían que tenían el s*x* equivocado, los profesionales respaldaban de inmediato la idea de que esta era la causa de sus angustias y problemas. No se tomaban tiempo para explorar o para realizar otro tipo de estudios psicológicos".

El diario británico “The Times” también ha informado de que el Royal College of Paediatricians and Child Health (Real Colegio Británico de Pediatras) ha pedido a su comité asesor de ética y leyes que analice desde un punto de vista ético cómo se explica el rápido aumento del uso de bloqueadores hormonales para tratar a los menores de 16 años que se identifican como transgéneros. De hecho, hace unos meses se supo que varios médicos de esta especialidad habían renunciado a consecuencia de las preocupaciones derivadas de que algunos niños habían sido enviados a una intervención quirúrgica que les cambiaría la vida sin un estudio en profundidad de todas sus opciones de salud.

Por su parte, recientemente el informativo nocturno de la BBC reveló que poseía datos empíricos que mostraban que los niños que tomaban bloqueadores de hormonas habían informado de un aumento muy elevado en el padecimiento de pensamientos de su***dio y autolesiones.

https://latribunadelpaisvasco.com/a...tizados-ponen-en-riesgo-la-salud-de-los-ninos
 
Estoy hasta los ovarios de esta porquería de comedura de tarro. Es un insulto a cualquier persona racional y a las mismas personas trans. Y encima por sus santos cojo*** quieren apoderarse del feminismo.
 
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