Sí, Idolo, hace reflexionar, pero contiene una grandísima contradicción. Se queja, con razón, de que se destina muy poco dinero a la investigación de enfermedades raras. Y de las no raras también, por cierto. Pero a la vez critica a quien hace una donación y así libera fondos. Si había que comprar esas máquinas de todos modos, por x millones, al haberlas donado Ortega (utilizando una ley, que desgrava, sí, pero desgrava menos de lo que dona, que parece que es que al final lo pagamos entre todos) pues ya hay dinero en el presupuesto que puede dedicarse a otras cosas. Que hay muchas cosas pendientes.
Y lo de ortega ha llamado la atención porque era mucho, pero hay muchas donaciones mucho más pequeñas, que benefician a nuestros hospitales. Y lógicamente nadie se queja. Porque suma.
El problema es que aquí se parte de que Ortega dona porque no paga impuestos. Pero es que no hay ningún indicio de que no pague impuestos. Los paga, y de lo mucho que gana después de impuestos, pues dona. Si lees lo que gana por dividendos, que no hay forma de que no pasen por Hacienda en una empresa española, ha pagado muchos impuestos. Pero a pesar de eso gana más de lo que necesita o quiere, y en lugar de comprarse una masia en el pirineo catalán pues dona. Y no hay que darle más vueltas.
Eso no significa que la sanidad pública no pueda seguir funcionando, y dar servicios. Al revés, pueden mejor porque tienen más dinero que el que en presupuestos se le había dado.
