Menos lo de teñirme, igual. A nivel de cuidados. Más cremitas, más tiempo para estirar (eso que nunca hacía), clases de yoga (eso que tuve que abandonar por falta de tiempo), aceites, mascarillas, masajes...
¿Lo malo? Lo no estético: mis jefes se creen que estoy disponible 24/7. Total, como estoy en casa.
He perdido peso sin esforzarme demasiado, la verdad que no sé muy bien cómo. A lo mejor ha sido al echar el freno, sin más.
Mis cejas son un desastre, parecen pobladas pero depilas 1 pelo y se quedan calvas (pelos largos). Me había planteado el microblanding pero me da pánico que me queden cejorras antinaturales. No sé... Estos días estoy como algunas de vosotras, pasando de ellas, y nada... un desastre. Salen 4 pelillos más por debajo, pero nada que lo solucione.
Y no sé si con la nueva subnormalidad esta que se nos viene a la vuelta de la esquina renovaré la matrícula del gimnasio. Le he cogido el gusto a entrenar en casa. Con mis gomitas y mi esterilla, es que sudo como un pollo y hasta tengo agujetas. Luego dedico mi rato laaaaargo a estirar; y 3 días a la semana en vez de eso sesión de yoga. Vamos, yo me lo guiso yo me lo como, y me está sentando de lujo.
