¿Que se creían estos dos?, ¿que la gente les deja pasar porque sí?; y lo de la niña del piercing...qué hostia tiene.
Lo de ese matrimonio me recuerda a un día que estaba en la biblioteca, el ordenador tiene tiempo limitado para que todo el mundo tenga derecho a usarlo, aunque hay excepciones: si no hay nadie esperando y tu turno termina, puedes volver a estar otra hora más. Por raro que pueda parecer, nos solemos ayudar unos a otros, si es algo exprés y lo vemos los que estamos usando el ordenador, dejamos que la otra persona busque lo necesario, si tenemos folios los dejamos para que la gente imprima, a la gente mayor les ayudamos a buscar cosas, y así, vamos, que suele haber un buen rollo y cooperación.
Una tarde,me acababa de sentar, esa tarde estaba todo petado. Aparecen de la nada dos, un matrimonio que se les veía con prisitas en hacer una gestión, y ven que todos los ordenadores están ocupados, pues ahí andaban haciendo comentarios y bufando como metiendo prisa, a ver si alguno nos levantábamos para dejarles a ellos el ordenador, pero casi exigiendo. No nos lo decían directamente, pero los comentarios eran entre ellos, ven que no nos levantamos, y van a la bibliotecaria, encima la borde, como a chivarse de que estábamos todos usando (ooohhh), el ordenador, y ésta tía, que no gusta de ayudar, pues encima vio que eran pesados y gilipollas y no sabía como enfrentarse a ellos. La hicieron acercarse a la zona de ordenadores a ver si viendo que traían a la chica, les dejábamos usar los ordenadores. La mujer empieza a hacer gestos de indignada con los brazos (gritar no puede porque era una biblio), el hombre comentó algo así delante de nosotros a la biblitecaria "¿y cuánto dices que se puede estar, una hora?", ahí, indicando que seguro que los estábamos llevábamos más (y esto se suele controlar bastante). Mira, por mi chichi moreno, se agotaba mi sesión, pero no me dio la gana dejarles el ordenador, por gilipollas, lo tremendo: allí había gente que ya estaba sentada antes de que me contectara yo, y nadie cogió y dijo "les dejo el ordenador", eso por ir con exigencias, vamos, que les faltó poner a levantar a la gente allí presente, y yo encima, acababa de llegar, era la última hora de la tarde.
Cerraron como quince minutos más tarde y todos los allí reunidos nos esperamos a que cerraran y no nos dio la gana de darles ni un sólo ordenador, creí entender que tenían que haber mandado algo antes de tal hora, que coincidía con la hora del cierre de la biblioteca, en la zona hay muchos locales de envíos, impresiones y fotocopias, pero tenía toda la pinta de haber dejado una tarea pospuesta (por cómo hablaban saqué conclusiones) y en vez de haberla hecho antes, la dejaron para ese día a esas horas. Ah, y en otros locales por mandar, imprimir y demás les iban a cobrar, pero en la biblio es gratis, no sólo lo dejaron para el final, sino que lo querían gratis en la biblio y hacerlo cuando a ellos les entró la prisa, con exigencias.
Se tuvieron que largar.
Joder, esto me ha recordado a una cosa que suele pasarme en el super pero el otro día superó mis expectativas . Hay gente que por no cruzar la tienda entera se te pega cual lapa a ver cuando vas a soltar la maldita cesta carro del Mercadona. Total, estaba yo metiendo mi compra cuando un señor me dice "¿oye vas a soltar el carro?". En ese momento había 3 filas de cesta-carro disponibles ni a 2 metros y le digo mire usted ahí tiene de sobra para elegir el que quiera. El hombre me mira como diciendo esta es gilipollas y me dice es que esos son muy grandes y yo lo quiero este que es pequeño pero no hay. Le repito, son exactamente iguales que este , son pequeños ¿ no lo ve? Se queda mirando , pasan unos segundos , se queda pillado y finalmente se va a coger un carro. Ya pensé, como me vuelva a decir que quiere mi maldito carro voy a ponerme a guardar las cosas a cámara lenta y se va a aburrir de esperar.