Elecciones generales. El día después.

Noelia Vera
7 h ·


Estamos a la espera de propuestas concretas por parte de Pedro Sánchez, que es la persona encargada de formar gobierno. Este país necesita que los problemas sociales se pongan en el centro y entendemos que es el momento de llegar a acuerdos para ponernos a trabajar para avanzar.


 
INVESTIDURA DE PEDRO SÁNCHEZPodemos apremia al PSOE a presentar una propuesta de gobierno y critica "la parálisis institucional"

El partido morado reprocha que los socialistas tengan paralizado el Congreso: "Hay 350 diputados que no pueden trabajar porque no hay actividad". Continúan con la mano tendida para iniciar una negociación de gobierno.




La portavoz de Podemos, Noelia Vera, en rueda de prensa tras el consejo de coordinación de Podemos.- EFE/David Fernández

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MADRID
01/07/2019 11:47 Actualizado: 01/07/2019 11:47
BEATRIZ ASUAR GALLEGO

@beaasuargallego
Podemos continúa con la mano tendida para negociar un pacto de gobierno en el que acuerden desde las medidas programáticas a los equipos del Ejecutivo. Critican la parálisis institucional, que Pedro Sánchez haya decidido ir a una investidura fallida y que hasta el momento no hayan presentado ninguna propuesta concreta. "No hay una propuesta formal por parte del candidato a presidente, que debe liderar estas negociaciones. Estamos a la espera de una propuesta formal y detallada: de programa, de equipos; de gobierno completo", explica la portavoz del partido, Noelia Vera, en rueda de prensa tras la Ejecutiva de Podemos

Los cruces y choques entre Podemos y el PSOE continúan. "No nos han presentado ninguna propuesta", asegura Vera como respuesta a Carmen Calvo. La vicepresidenta en funciones pidió el pasado viernes que Pablo Iglesias diera una respuesta a la propuesta del presidente sobre formar un Ejecutivo en el que miembros de Podemos ocupen cargos intermedios. Para los de Podemos esto no es ninguna respuesta porque consideran que lo primero tiene que ser cerrar un acuerdo programático y, posteriormente, las competencias y equipos de gobierno.



Vera también explica que han leído en la prensa que Sánchez va a realizar una nueva ronda de reuniones con los principales partidos, pero apunta que ellos no tienen ninguna fecha para volver a ir a la Moncloa. Eso sí, apremian a los socialistas a presentar una "propuesta formal" en esta reunión: "Iríamos con la expectativa de escuchar". Además, aseguran que irán a cualquier futuro encuentro con "la voluntad de llegar a un acuerdo" y que quieren priorizar los puntos en común que tienen en sus programas electorales — medidas en materia social o medidas fiscales — sobre los "desacuerdos".

En Podemos creen que Sánchez va a una investidura fallida como estrategia de presión: "El PSOE está intentando utilizar mecanismos parlamentarios como la investidura para presionar y conseguir abstenciones de ciertos grupos políticos", explica Vera ante la posibilidad de que Ciudadanos facilite una investidura del candidato socialista. Un paso que hasta el momento parece imposible ya que Albert Rivera mantiene el veto al presidente en funciones, a pesar de las dimisiones de Toni Roldán y Javier Nart por este motivo.

"El PSOE antes lideraba las críticas por la parálisis"
"Nos sorprende que en otras épocas, cuando gobernaba el PP, el PSOE lideraba también las críticas por la parálisis institucional y que ahora esta situación se repite. Hay 350 diputados elegidos en las elecciones del 28-A que no pueden trabajar porque no hay actividad y no están en marcha ni las comisiones. Hay diputados que podrían estar haciendo estos trabajos mientras otros se dedican a las negociaciones", critica Vera sobre la falta de actividad política y legislativa en la Cámara Baja durante estos dos meses.

El Congreso aún no ha comenzado la actividad, a la espera de que se celebre la sesión de investidura del candidato socialista y se forme Gobierno. Este martes se empezará a despejar el camino cuando Sánchez se reúna con la presidenta de la Mesa, Meritxell Batet, y pongan fecha para la votación. Sin embargo, Podemos ya da por hecho que la investidura sea fallida por lo que se espera que se continúe sin el nuevo Ejecutivo al menos hasta septiembre. "Pensamos que hay muchas urgencias y se tiene que llegar lo más pronto posible a un acuerdo sin ruido mediático. Una negociación seria y oficial", insiste Vera.

"Compartir gobierno implica tener lealtad al proyecto"
Otro de los motivos por los que el PSOE asegura que no quiere formar un gobierno de coalición es por las diferencias con los socialistas sobre temas como Catalunya. Vera responde al Ejecutivo: "Es tiempo de acordar y poner en común los acuerdos. Cada uno tiene sus posiciones respecto a determinados temas y no siempre vamos a pensar igual, pero compartir gobierno implica tener una lealtad respecto al proyecto político que firmemos", asegura la portavoz.

Iglesias ya renunció a liderar los considerados ministerios de Estado - Justicia, Exteriores, Interior y Defensa - como paso para facilitar las negociaciones. Un punto complicado para un Ejecutivo conjunto sería, por ejemplo, la sentencia sobre el juicio del procès. Sin embargo, Vera insiste en que en estos momentos y, tras una firma de negociación, aunque cada partido tenga sus propias posiciones primaría la "lealtado al proyecto político"


https://www.publico.es/politica/inv...HyFt3kgupkNsVki_JPC-KEiVgACJEm1DexJdwDn-I8buw


¿Tiene el PXXE para ésta legislatura un programa? ¡Lo dudo!


¿Donde esta la lealtad de Sanchez el guapo para con los votantes ?
 
Irene Castro
01/07/2019 - 21:27h
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Pedro Sánchez en una comparecencia en el G20. EFE

El Gobierno ultima la fecha de la investidura de Sánchez sin perder de vista la posible repetición electoral
Pedro Sánchez desveló parte de sus cartas este lunes en Bruselas: dejó claro que será él quien establezca cuándo se somete a la confianza del Congreso. "Me iba a reunir con Meritxell Batet para trasladarle la fecha de la investidura", dijo tras lamentar que finalmente tendrá que mantener la conversación por teléfono y enviar una carta para poner la fecha de la investidura, a pesar de que el reglamento de la Cámara Baja establece que el día del Pleno lo fija su Presidencia.




En Moncloa han barajado todos los escenarios posibles y, tras la negativa de PP, Ciudadanos y Unidas Podemos la semana pasada a allanar el camino a Sánchez, el presidente en funciones decidió establecer definitivamente los tempos fijando día y hora a la primera sesión, que marcará los plazos para que España tenga un Gobierno estable o, por el contrario, repita las elecciones.

Sánchez considera que una vez se fije el debate de investidura las demás formaciones se verán obligadas a posicionarse. No obstante, tanto en Moncloa como en el seno del PSOE van asumiendo que esa sesión puede ser fallida y que el asunto deberá retomarse en septiembre.

Sin embargo, la cúpula socialista deja claro que por mucho que se acerquen al límite de los dos meses que establece la Constitución para intentar formar Gobierno después del primer intento no se moverán más de lo que ya han hecho.

De hecho, en el establecimiento de esa primera votación que pone en marcha el reloj ha pesado la fecha en la que se celebrarían los comicios si el bloqueo perdura. Primero, porque tiene que realizarse en martes para que las generales caigan en domingo. En segundo lugar, para que la convocatoria no coincidiera con el puente de Todos los Santos: así sería si el Congreso programa la primera votación el 16 de julio.

Por eso en Moncloa trabajan con el 23 de julio como fecha más probable (los comicios serían el 10 de noviembre si esa investidura resulta fallida). El 30 supondría que la segunda votación, en la que el candidato sale investido si logra mayoría simple, sería el 1 de agosto, con España de vacaciones. Los distintos portavoces socialistas han reiterado que el presidente debe ser investido en julio. El 9 de julio es la otra fecha posible, aunque precipitada ante el plan de Sánchez de iniciar una nueva ronda de contactos con todos los grupos para explorar los posibles apoyos e incremente la presión sobre sus potenciales aliados.

A pesar de la insistencia de los socialistas en formar un Gobierno "cuanto antes", Sánchez tardará prácticamente tres meses en intentarlo. Tras el 28A, el líder del PSOE admitió que abordaría la gobernabilidad tras la triple cita electoral del 26 de mayo. Antes solo tuvo una cita con Pablo Casado, Albert Rivera y Pablo Iglesias para dejar claro "el juego de roles"que dejó las generales. Pasados esos comicios, el presidente inició una ronda pública el 7 de junio, que completaron José Luis Ábalos y Adriana Lastra con los grupos minoritarios.

El acuerdo para la composición de la Mesa del Congreso y el primer encuentro con Iglesias parecieron allanar el camino de la gobernabilidad, cuando hablaron por primera vez de un acuerdo para un "Gobierno de cooperación". Sin embargo, casi de inmediato surgieron las suspicacias ante la exigencia de Unidas Podemos de formar una coalición, con puestos en el Consejo de Ministros proporcionales al resultado en las urnas.

La negativa de Sánchez se ha mantenido en sendos encuentros que, de forma discreta, ha protagonizado posteriormente con un "socio preferente". Los socialistas han rebajado las expectativas a hacer un hueco a Unidas Podemos en niveles secundarios de la Administración además de sellar un acuerdo programático que tenga seguimiento a través de una comisión creada ad hoc. Iglesias rechaza de plano esa oferta que considera insuficiente.

En las filas socialistas están convencidos de que Unidas Podemos se hundiría en una repetición electoral y recuerdan que el grupo confederal ha ido perdiendo votos en cada convocatoria tras el 'no' a Sánchez en 2016, cuando llegó a un acuerdo con Albert Rivera que a día de hoy se antoja imposible. La amenaza de unas nuevas elecciones en las que Podemos se juega prácticamente su supervivencia es la principal herramienta del PSOE para hacerle cambiar de posición.

Uno de los motivos por los que en las filas socialistas se niegan a hacer un hueco a Iglesias en el Consejo de Ministros es precisamente el temor a que ERC, que se ha abierto a facilitar la investidura, cambie de opinión en el último momento y deje a Sánchez atado a Iglesias ante una nueva campaña electoral. El PSOE insiste en que los republicanos catalanes "no son de fiar" y se agarran a precedentes como la enmienda a la totalidad de los Presupuestos Generales del Estado o el veto a hacer senador a Miquel Iceta frustrando el plan de Sánchez de colocarlo como presidente del Senado.

El conflicto catalán, que en Moncloa consideran que se puede volver a calentar con la sentencia del procés prevista para este otoño, y la falta de confianza mutua de PSOE y Unidas Podemos son otros motivos que argumentan en contra de la coalición. A lo que sí estarían abiertos es a incorporar a ministros de la órbita del grupo confederal, según algunas fuentes consultadas por eldiario.es. Pero, de momento, las posiciones de Sánchez e Iglesias están muy alejadas.

Al candidato socialista le ha ido peor con PP y Ciudadanos, a los que presiona constantemente para que faciliten la gobernabilidad con su abstención. Para los socialistas sería, además, una forma de evitar que Sánchez salga investido gracias a los independentistas. Igual que están convencidos del hundimiento de Unidas Podemos y del crecimiento del PSOE en unas nuevas elecciones, en Moncloa sostienen que Rivera también sufriría el desgaste de pasar de nuevo por las urnas en favor de Pablo Casado, a quien creen que pueden beneficiar otros comicios.

Sánchez mantiene el pulso, sin tener previsto por ahora hacer una oferta programática concreta más allá de recordar el acuerdo presupuestario de hace unos meses, lo fía todo al debate de la investidura y, después, al temor del resto de fuerzas a jugársela en las urnas, que pesa también en las filas socialistas, donde hay quienes advierten de que la desmovilización de la izquierda puede acabar pasándoles factura.

https://www.eldiario.es/politica/Pedro-Sanchez-investidura-repeticion-electoral_0_915859081.html


#10 Endymion | 02/07/2019 - 01:58h

Si tras la repetición de elecciones UP se hunde y el PSOE sale beneficiado, es porque los españoles son imbéciles. No me puedo creer que todavía no lo vean.

A Sánchez le pasa lo mismo que le pasó en 2016, cuando le prohibieron pactar con Podemos. Lo dijo él, en aquella entrevista borrada de todas las hemerotecas.

¿Alguien cree que ahora no le presionan?

La izquierda está vetada en nuestro sistema. En teoría podrían gobernar, pero en la práctica es imposible. Me inclino a creer que en un país en el que todos miran para otro lado ante el escándalo de las cloacas, donde la libertad de expresión sólo es plena si eres de derechas y el buen periodismo es cosa de inconscientes, cada vez parece menos probable que el recuento del voto sea limpio en este país.

Indra se ocupa del recuento. ¿No había nada mejor?

elgrillo.do/2016/05/conozca-los-escandalos-indra-la-empresa-cargo-del-conteo-electronico-las-proximas-elecciones/

El PSOE nunca será de izquierdas, aunque pacten un programa con UP, pues no lo cumplirán. Si pensaran cumplirlo aceptarían ministros de UP. No los aceptan porque no piensan cumplir lo firmado. Si Iglesias entra en el Gobierno, el cisma sería tan grande que acabaría con Sánchez. No pacta por su propia supervivencia.

Pero si Rivera cambia de postura, el Gobierno sería de derechas sin matices, pero garantizarían su supervivencia a medio plazo. El trato mediático que recibirían y los beneficios económicos serían enormes para el PSOE.

Algunos votantes se enfadarían, pero con el tiempo volverían al redil gracias a la terapia ideológica reconstituyente de las tertulias televisivas. Aún con el agua al cuello, castigarían a los que osaran defenderles.

En Madrid muchas personas prefieren a ladrones que les obligan a respirar monóxido de carbono. Un día no muy lejano se morirán en su casa con los pulmones destrozados sin poder recibir tratamiento en la cara sanidad privada que no podrán pagarse con sus míseras pensiones.
El PSOE seguirá pactando con partidos que matan por dinero, y aún así les votarán.


#13 fraygerundio | 02/07/2019 - 07:56h
Para los que tenían dudas sobre el psoe, ellos mismos se están encargando de despejarlas.
Si alguien creyó que esta gente estaba dispuesta a aplicar políticas mínimamente socialdemócratas, aquí tienen los hechos para desmentirlos.
El psoe ha decidido ir a nuevas elecciones, en las que los 165 de ellos y UP, quizás no sean ni 150 y por lo tanto, facilitar la llegada al poder del trifachito, con Coz como estrella invitada.
Cualquier cosa antes que un gobierno estable con ministros de izquierdas, cualquier cosa antes que aplicar políticas de izquierdas. Una vez más, el genuflexo Ken, agacha la cerviz y acata las órdenes de los que mandan de verdad, los que ya le dijeron hace unos años que de gobiernos de izquierda nada.







¿Que piensa PS? Lo digo porque después de las elecciones los bloques seran parecidos o a lo mejor beneficia a otro que no sea el PXXE y por supuesto se encargará INDRA para la obtención de resultados, la misma empresa que utilizaba el PP. ¿Por qué sera? ¿Pucherazos?

¿Busca pactar con la derecha o pasar el Gobierno a la derecha echando la culpa a los demás cuando ha sido él quien no ha querido pactar un programa y gobierno de coalición?

¿Es eso lo que le han mandado? ¿Pasar el testigo antes de que uno de izquierdas pueda entrar en el Gobierno? ¿Y los españoles? ¿De verdad que no piensan y se tragan todo lo que les lanzan por la tele? ¡Dios Mío!



 
O les dan la llave de la Moncloa o la abren con una ganzúa
Benjamín Prado

contacta@infolibre.es @pradobenjamin
Publicada el 02/07/2019 a las 06:00Actualizada el 01/07/2019 a las 18:59



"Bajo la piel de cordero también se esconde el asesino del lobo"

El principio de acción y reacción es la tercera ley de Newton, analiza los mecanismos de la inercia y dice que “todo cuerpo A que ejerce una fuerza sobre un cuerpo B experimenta una fuerza de igual intensidad en la misma dirección, pero en sentido opuesto.” En la política española la acción dio lugar a lo reaccionario y el empuje del 15M acabó con el bipartidismo, pero el golpe de vuelta ha sido brutal, las paredes se han movido hacia dentro, como en esas películas de espías en las que los muros se cierran para aplastar a un rehén, y todo ha ido a peor: antes, luchaban por ser o al menos parecer de centro, ahora lo hacen por ser más de ultraderecha que el socio de al lado. Ciudadanos, que en manos de Albert Rivera es como un pulpo enredado en sus propios tentáculos, puede dedicarse a reponer nombres de calles que jalean una dictadura; y el Partido Popular llega a tales extremos de insidia que su líder, Pablo Casado, puede escribir y publicar un tuit como éste: “Hace 22 años la Guardia Civil rescató al funcionario de prisiones, Ortega Lara, tras 532 días secuestrado por ETA. Con los herederos de los terroristas negocia el PSOE, al asesino sanguinario Ternera le tratan de héroe, quieren blanquear a ETA y calla Sánchez. No olvidamos.” Claro que no, esto no es mala memoria, sino puro cinismo; no es falta de información, sino de vergüenza. Todo les sirve de arma, incluso los huesos de los muertos, como en la prehistoria. Y todo les vale como tarima, incluidas las sepulturas.




Lo mismo que no es no, todo es todo, y de ahí que a los socios de Vox cualquier proceso les sirva, si les vale para salirse con la suya: pueden venderle el alma al diablo del neofascismo, envuelto en una bandera; pueden hacer un ataque indecente al mundo LGTBI y creer que podrán disfrazarse de víctimas sin que nos demos cuenta y vender como un atentado a la libertad –aunque ellas y ellos lo único que quieren libre sea el mercado– dos pintadas hechas en un autobús que mandaron a la manifestación del día del orgullo para cubrir el expediente. A estas alturas, no cuela, sin embargo. Llevar una piel de cordero te hace sospechoso de la muerte del lobo.



El pozo de la hipocresía no tiene fondo, así que esta gente puede criar cocodrilos en las cloacas del Estado, utilizar a las fuerzas del orden y el dinero público para someter a vigilancia a los adversarios, como han hecho con Pablo Iglesias, o reclutar un juez que fabrique pruebas falsas contra una compañera que se presentaba a las elecciones por Unidas Podemos. Ese magistrado de Las Palmas que, según la acusación de la fiscalía, llegó a “un acuerdo corrupto” con un empresario al que investigaba, para perjudicar la carrera de su colega Victoria Rosell, se enfrenta a penas de hasta trece años y medio de cárcel y cuarenta y dos de inhabilitación, y esos números dan una idea de la categoría de sus presuntos delitos.



Esos que Inés Arrimadas, gastando sus últimos botes de pintura blanca, dice que “no son ultraderecha, sino ultraconservadores”, ya estaban ahí, pero ahora se han quitado la media de la cara, como quien dice; los otros dos volúmenes de la trilogía de Colón se suponía que estaban en otra parte, en el terreno de la derecha moderada, democrática; pero como están convencidos de que para llegar a los bancos azules cualquier atajo sirve y si no se ganan la llave de la Moncloa la abren con una ganzúa, se han radicalizado y un día sí y al otro también tratan de empatarles a sus compañeros de viaje, diciendo un disparate mayor que el último que hayan soltado los otros dos. Ese tuit de Casado lo explica todo. Y él no tiene disculpa, porque Ortega Lara, a quien ahora trata de utilizar de remo, también está con Vox, pero a él lo tuvieron los canallas de ETA más de quinientos días en un zulo.

No todo vale, ya se lo habían dicho las urnas, pero por lo que se ve, no lo ha entendido. Ni su socio Rivera, claro, al que la última encuesta le avisa de que casi el veinticinco por ciento de quienes confiaron en su partido la última vez, se arrepienten de su voto y no lo repetirán. Claro que, justo él, precisamente él, tiene derecho a no confiar en los sondeos, por algo le dieron presidente más de una vez y quedó cuarto. Qué hemos hecho nosotros para merecernos esto.

https://www.infolibre.es/noticias/o...NTxQ8fKpBOjwuWBesp4KozLR6zF45FEY70CO7vHjuOU0c
 
O les dan la llave de la Moncloa o la abren con una ganzúa
Benjamín Prado

contacta@infolibre.es @pradobenjamin
Publicada el 02/07/2019 a las 06:00Actualizada el 01/07/2019 a las 18:59



"Bajo la piel de cordero también se esconde el asesino del lobo"

El principio de acción y reacción es la tercera ley de Newton, analiza los mecanismos de la inercia y dice que “todo cuerpo A que ejerce una fuerza sobre un cuerpo B experimenta una fuerza de igual intensidad en la misma dirección, pero en sentido opuesto.” En la política española la acción dio lugar a lo reaccionario y el empuje del 15M acabó con el bipartidismo, pero el golpe de vuelta ha sido brutal, las paredes se han movido hacia dentro, como en esas películas de espías en las que los muros se cierran para aplastar a un rehén, y todo ha ido a peor: antes, luchaban por ser o al menos parecer de centro, ahora lo hacen por ser más de ultraderecha que el socio de al lado. Ciudadanos, que en manos de Albert Rivera es como un pulpo enredado en sus propios tentáculos, puede dedicarse a reponer nombres de calles que jalean una dictadura; y el Partido Popular llega a tales extremos de insidia que su líder, Pablo Casado, puede escribir y publicar un tuit como éste: “Hace 22 años la Guardia Civil rescató al funcionario de prisiones, Ortega Lara, tras 532 días secuestrado por ETA. Con los herederos de los terroristas negocia el PSOE, al asesino sanguinario Ternera le tratan de héroe, quieren blanquear a ETA y calla Sánchez. No olvidamos.” Claro que no, esto no es mala memoria, sino puro cinismo; no es falta de información, sino de vergüenza. Todo les sirve de arma, incluso los huesos de los muertos, como en la prehistoria. Y todo les vale como tarima, incluidas las sepulturas.




Lo mismo que no es no, todo es todo, y de ahí que a los socios de Vox cualquier proceso les sirva, si les vale para salirse con la suya: pueden venderle el alma al diablo del neofascismo, envuelto en una bandera; pueden hacer un ataque indecente al mundo LGTBI y creer que podrán disfrazarse de víctimas sin que nos demos cuenta y vender como un atentado a la libertad –aunque ellas y ellos lo único que quieren libre sea el mercado– dos pintadas hechas en un autobús que mandaron a la manifestación del día del orgullo para cubrir el expediente. A estas alturas, no cuela, sin embargo. Llevar una piel de cordero te hace sospechoso de la muerte del lobo.



El pozo de la hipocresía no tiene fondo, así que esta gente puede criar cocodrilos en las cloacas del Estado, utilizar a las fuerzas del orden y el dinero público para someter a vigilancia a los adversarios, como han hecho con Pablo Iglesias, o reclutar un juez que fabrique pruebas falsas contra una compañera que se presentaba a las elecciones por Unidas Podemos. Ese magistrado de Las Palmas que, según la acusación de la fiscalía, llegó a “un acuerdo corrupto” con un empresario al que investigaba, para perjudicar la carrera de su colega Victoria Rosell, se enfrenta a penas de hasta trece años y medio de cárcel y cuarenta y dos de inhabilitación, y esos números dan una idea de la categoría de sus presuntos delitos.



Esos que Inés Arrimadas, gastando sus últimos botes de pintura blanca, dice que “no son ultraderecha, sino ultraconservadores”, ya estaban ahí, pero ahora se han quitado la media de la cara, como quien dice; los otros dos volúmenes de la trilogía de Colón se suponía que estaban en otra parte, en el terreno de la derecha moderada, democrática; pero como están convencidos de que para llegar a los bancos azules cualquier atajo sirve y si no se ganan la llave de la Moncloa la abren con una ganzúa, se han radicalizado y un día sí y al otro también tratan de empatarles a sus compañeros de viaje, diciendo un disparate mayor que el último que hayan soltado los otros dos. Ese tuit de Casado lo explica todo. Y él no tiene disculpa, porque Ortega Lara, a quien ahora trata de utilizar de remo, también está con Vox, pero a él lo tuvieron los canallas de ETA más de quinientos días en un zulo.

No todo vale, ya se lo habían dicho las urnas, pero por lo que se ve, no lo ha entendido. Ni su socio Rivera, claro, al que la última encuesta le avisa de que casi el veinticinco por ciento de quienes confiaron en su partido la última vez, se arrepienten de su voto y no lo repetirán. Claro que, justo él, precisamente él, tiene derecho a no confiar en los sondeos, por algo le dieron presidente más de una vez y quedó cuarto. Qué hemos hecho nosotros para merecernos esto.

https://www.infolibre.es/noticias/o...NTxQ8fKpBOjwuWBesp4KozLR6zF45FEY70CO7vHjuOU0c
menudo articulo sectario has traido Idolo , aquí lo unico extremo que hay ahora mismo es la extrema izquierda y lo que se esta haciendo con ETA es inmoral, indigno y repugnante, esa buenificación y blanqueamiento
 
Objetivo 23 de julio: Que Unidas Podemos no entre en el Gobierno
Por
Xan Pereira Castro
-
julio 2, 2019
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Guido Ohlenschlaeger

El día de la investidura será el 22 de julio. Empieza la cuenta atrás y crece la presión para Alberto Rivera, sí, efectivamente, para Ciudadanos. La política tiene estas cosas, que un día estás arriba y otro estas abajo. Por eso, desde hace un tiempo Alberto Rivera, como le gusta ser llamado, apodado el “Golden Boy” por la prensa internacional en 2015 durante su salto a la política nacional, está siendo ahora vapuleado por los medios nacionales e incluso algunos internacionales que le presionan para que se abstenga y facilite un gobierno de Pedro Sánchez. Pero esta presión viene de lejos.

En la última Sesión de Control al Gobierno antes de las elecciones, el Golden Boy de la política española, el nuero que toda suegra quería, adorado por los medios y por los Grandes Poderes, exhibía con orgullo su cordón sanitario a Sánchez. A los pocos días Susana Griso le preguntaba por un editorial del periódico ultraliberal The Economist titulado «España necesita un pacto de los sobrios», que calificaba a Rivera de sectario por su veto a Sánchez y al PSOE. Susana Griso (la hasta entonces gran amiga del Chico de oro) aprovechaba para preguntarle si no creía que se estaba equivocando con el veto a Sánchez, si “hasta un periódico como The economist lo estaba criticando” algo debía estar haciendo mal se preguntaba la presentadora. Pero Alberto Rivera, insuflado de confianza, insistió.




Por aquel entonces, también El País publicaba un 10 de Marzo el que sería el primero de muchos artículos atacando la actitud del partido naranja antes adorado. La Tribuna de Opinión titulada “Del bipartidismo a los bloques” volvía a criticar duramente a Rivera culpándolo de estar construyendo un dique contra el PSOE.

Después de las elecciones Ciudadanos siguió empecinado y decidió pactar con el PP y la ultraderecha allí donde pudo. Eso sí, mientras pactaba con la ultraderecha xenófoba, homófoba y machista intentaba subirse a las carrozas del orgullo, y, claro, por lo que sea el movimiento LGTBI no se lo tomó bien. Nadie le dijo nunca a Rivera eso de que no se puede sorber y soplar al mismo tiempo, o eso de que no se puede nadar y guardar la ropa, ni estar en misa y repicando, eso lo saben todas las abuelas, y lo supieron también los sectores más liberales de su partido: Roldán, Garicano, Valls, Javier Nart o Girauta que o bien se fueron o bien amenazaron con marcharse por la deriva derechista y de vetos del partido de Alberto Rivera.

En esos días, como no podía ser de otra forma, El País aprovechaba para meter cuchara y Ricardo Dudda escribía un caluroso 24 de junio, en un artículo titulado “Apéndices del bipartidismo”: ” La decisión de Ciudadanos de vetar al PSOE, no solo a nivel nacional sino regional y municipal (salvo en contadas excepciones), es coherente con el nuevo partido, que ha olvidado sus orígenes. El simpatizante socialdemócrata del partido recuerda que Cs surgió para centrar y moderar al PSOE”.

Un poquito más de presión para los de Alberto Rivera que veían como se desangraban por momentos, en una crisis interna sin precedentes en el partido. Casualmente los mismos días que el PSOE filtraba a los medios que querían la abstención de Ciudadanos en la investidura para no tener que depender de Unidas Podemos. Entre tanto, Alberto Rivera, el Golden boy de la política española, convocaba un congreso para reivindicar su proyecto y su autonomía como partido ultraliberal y que pactaba orgulloso con la extremaderecha, y unos días después, ¿quién escribía presionando un poco más al partido naranja? Efectivamente, El País volvía a escribir uno de esos artículos cuyo titular ya basta para medir la magnitud de la tragedia, haciendo explícito en un desliz consciente e inconsciente el hecho del que en realidad se trataba todo esto: la presión. “Rivera desafía la presión interna y externa y mantiene el no a Sánchez” rezaba el titular. Se trataba de presionar, no se trataba de la verdad, ni de la preocupación por la deriva ultraderechista del partido de Rivera, ni del bien de los españoles. No, se trataba de otra cosa.





Pero no solo el Grupo Prisa, también El Mundo se ha sumado en estas últimas semanas al escarnio público. Hace tan solo un par de días, en el análisis de datos de la encuesta de Sigma Dos, las conclusiones eran tres: El PSOE y el PP subían y el resto de alternativas bajaban reforzando el bipartidismo de cara a unas futuras elecciones, Ciudadanos era el partido que más bajaba y cuyos votantes estaban más desencantados y una tercera conclusión que se extrae de las anteriores: si hay elecciones el más damnificado será el partido naranja en todos los sentidos. El mensaje subliminal (o no tanto) era: abstente en la investidura de Pedro Sánchez o lo pagarás caro.

También el presidente de la patronal Antonio Garamendi se sumó hace unos días a la ola valorando positivamente un gobierno del PSOE en solitario con la abstención de PP o Ciudadanos. La presión crece para Alberto Rivera. Los empresarios también son favorables a una abstención de Ciudadanos para que gobierne Pedro Sánchez. Hoy han anunciado que la investidura comenzará el día 22 de julio y ha comenzado la cuenta atrás.

La pregunta es, ¿por qué se han puesto de acuerdo los Grandes Poderes para presionar a Ciudadanos? ¿Por qué quieren un gobierno del PSOE en solitario? ¿Por qué todos los medios están asfixiando al partido del, hasta hace poco, niño mimado de la política española? ¿Por qué incluso medios de derechas son favorables a un gobierno del PSOE en solitario o incluso a un adelanto electoral?

La respuesta: porque no quieren que gobierne Unidas Podemos. No lo quisieron en 2016, no lo quieren ahora y tampoco lo querrán después de las elecciones (si las hubiere). Todo vale. Los Grandes Poderes se acostumbraron a hacer y deshacer con el bipartidismo, y cuando surgió Podemos, todos recordamos, como asustado, el presidente del Sabadell pedía un Podemos de derechas y tachán apareció Ciudadanos.

Ahora, la orquesta que dirige Iván Redondo goza de una salud estupenda. Las fichas en el tablero se mueven en la dirección correcta dirigidas por un PSOE que juega con el tiempo y todo el ecosistema mediático a su favor. Por esta razón, los mismos que auparon a Ciudadanos en 2015 para que no hubiese cambio en España, serán capaces de hundirle si no evita que Unidas Podemos entre en el gobierno. A esto podría haberse referido Ricardo Dudda, cuando escribía que Ciudadanos se había olvidado de sus orígenes. Efectivamente, se han olvidado de para quién trabajan y quiénes lo pusieron ahí, y lo pagarán caro si los mismos que lo auparon deciden defenestrarlo. Quedan 21 días para ver si Ciudadanos aguanta o no la presión. El PSOE tiene hasta el 23 de julio para hacer cumplir su objetivo: que Unidas Podemos no entre en el Gobierno.

https://spanishrevolution.org/objet...xhsUUgyEhTZxXmmPiqC34VzSYH1wzmwKk-4JL3fkZMyWI
 
Dejen de soñar, el bipartidismo ha muerto

Si hay desencuentros de piel, usen guantes, pónganse crema, crezcan. El bipartidismo ha muerto y repetir elecciones no hará sino matar la política, más de lo que está-

Con los peores resultados de su historia, el plantel que presenta Casado para recuperar el bipartidismo cuenta con Martínez-Almeída, el alcalde que mayor rechazo ha concitado en menor tiempo en la historia de España-

Los ciudadanos buscan otros caminos al bipartidismo que no les ha dado respuestas. También en la UE. La suma de PPE y socialdemócratas perdió la mayoría absoluta por primera vez en la historia pero nada va a cambiar a mejor con los cargos acordados-

Rosa María Artal
02/07/2019 - 22:18h
Pedro-Sanchez-Casado-Moncloa-EFE_EDIIMA20190702_0671_4.jpg


Pedro Sánchez y Pablo Casado en La Moncloa. EFE

Sueñan con resucitar el bipartidismo. En España y en Europa, si pudieran. Pero al bipartidismo lo mataron los dos partidos que lo formaban. Sus políticas. Baste mirar, en el pasado reciente aunque va mucho más allá, el austericidio que obligó a pagar a los ciudadanos lo que ellos llamaron crisis. Su crisis, por cierto. Conservadores y socialdemócratas no dieron soluciones. El abanico se abrió. Con más actores, más partidos. Algunos tan chirriantes como los ultraderechistas que configuran el neofascismo de nuestros días.




La UE ha precisado la cumbre más larga de su historia –a la par que la que alumbró tan malamente el Euro– para elegir sus cargos por las tensiones entre los bloques. El grupo de los Populares europeos conserva la presidencia de la Comisión, con la alemana Ursula von der Leyen, apeando al candidato socialdemócrata. Lo que ya ha ocasionado críticas. La UE da la presidencia del Consejo a un liberal. El poderoso BCE a Christine Lagarde que deja el FMI. Para decir que hay dos mujeres en cargos de relevancia, si es que el talante de Lagarde difiere de cualquier tiburón masculino. Y Josep Borrell llega a dirigir la política exterior de la Unión, con sus especiales dotes diplomáticas. Sánchez ha dicho en rueda de prensa al concluir que España debe aprender de estos pactos, precisamente. Mucha derecha, y pocos cambios sustanciales.

En España el empeño de volver al bipartidismo es tan obtuso que más parece apelar a la ceguera mental de los votantes que a una realidad en la que crean PSOE y PP. Sería realmente grave si de verdad ignoran los signos y creen que es viable ahora. Si de verdad piensan que los felices días –para ellos– de su hegemonía y mandato alterno van a volver. En nuestro caso, se añade la singularidad de algunos territorios que se comportan de forma autónoma desde hace décadas, aunque no quieran verlo.

Las encuestas les dicen que en unas eventuales nuevas elecciones bajarían Ciudadanos y Vox. Y lo dan por bueno a pesar de la intensa cocina demoscópica. Así Pablo Casado aspira a desbancar a sus ahora socios de la triple derecha. Su objetivo es "restaurar" el bipartidismo. A pesar de haber obtenido el peor resultado de la historia del PP. Recordemos, dado como se disuade la memoria, que el partido de Pablo Casado ha perdido la mitad de los diputados del Congreso y dos tercios de los senadores y que eso le ha llevado a una bancarrota económica. En dinero (público) son 257.430 euros al mes. En Catalunya, el PP se quedó con un escaño, uno. Con ninguno en el País Vasco, perdió hasta los dos obtenidos en 2016.

El PP ha jugado bien sus cartas para obtener ayuntamientos y comunidades, a pesar de sus poco brillantes resultados también en esos comicios. A costa de pactar con Vox, que nadie lo olvide. El plantel que presenta para recuperar el bipartidismo cuenta como una de sus más fulgurantes estrellas con el alcalde de Madrid. La capital del reino, villa y corte siempre es un puntazo para el palmarés.

Almeida es el alcalde que mayor rechazo ha concitado en menor tiempo en la historia de España. Guiado por un afán vengativo y revanchista, solo parece pensar en barrer todo lo hecho por la corporación de Manuela Carmena. De ahí que se haya lanzado a suprimir Madrid Central, el área con tráfico restringido de Madrid. Ha aumentado el tráfico, la contaminación, el tiempo invertido por los autobuses en sus trayectos, las protestas ciudadanas. Tuvo el cuajo de no abrir espacio para los manifestantes que fueron entre vehículos. Y de reírse de Greenpace a quien acusó de ser unos desocupados por manifestarse. La arbitraria medida, contra el signo de los tiempos, contra la salud, es noticia internacional.

El dislate Almeida, plegado a Vox, carga contra los colectivos LGTBI, contra el feminismo, contra los desahuciados, contra los "chiringuitos" progres... que velan por los Derechos Humanos.

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Almeida y Villacís revirtiendo una zona peatonal en Madrid. Foto publicada por el alcalde

A cambio, ofrece a los madrileños recuperar el "sueño olímpico" que enterró ya 6.500 millones de euros. La vicealcaldesa de Ciudadanos, Begoña Villacís, vende los pianos Almeida con la mejor de sus sonrisas cómplices. Y se apunta hasta a aplaudir que reviertan una zona peatonal para que vuelvan a aparcar coches en ella.

En la Comunidad de Madrid, donde Vox fuerza acuerdo triple y firmado, la candidata Díaz Ayuso añade a su mirada despierta en luces tan Almeida, el pufo del piso paterno. Son las estrellas del PP, propulsadas por Pablo Casado, que dice va a restaurar el bipartidismo.

Los movimientos de Pedro Sánchez van en la misma dirección. En el baile de declaraciones de estos días –textual: pasos adelante, pasos hacia atrás y media vuelta– predomina la idea de gobernar solo y sin apoyarse ni para la investidura en los nacionalistas. Las matemáticas, sin embargo, son exactas, pocas cosas lo son tanto como los números. 123 diputados son 123 diputados los pongas del derecho o del revés. Y la mayoría está en 176. Con la suma de los 42 de Unidas Podemos la meta está más cerca: son 165 que pueden encontrar 9 apoyos sueltos para cualquier decisión de importancia.

No es difícil suponer que Pedro Sánchez tiene presiones internas dentro del partido y externas en el ámbito de los grandes poderes. El principal poder debería ser la sociedad soberana que vota a sus representantes. Puede haber, los hay seguramente, hasta desencuentros de piel con Unidas Podemos. Usen guantes, pónganse crema, crezcan. Porque no habrá mucho mejor resultado si se repiten elecciones. El bipartidismo ha muerto, dejen de soñar en su resurrección. Al menos inmediata y por este camino.

Los partidos tradicionales se han desplomado como evidenciaron las elecciones europeas, de ahí las tensiones para los altos cargos. La suma de PPE y socialdemócratas perdió la mayoría absoluta por primera vez en la historia. Pero es que ¿Ya nadie se acuerda de lo que hicieron a partir de 2008? Ni refundar el capitalismo, ni acabar con los países fiscales, ni con privilegio alguno de los causantes de la crisis. La tijera de los recortes se adueñó de la política europea, con mayor incidencia en los países que arrastraban sus propias crisis. Creció la ultraderecha a niveles preocupantes. Y los verdes, y los liberales. Esta convulsión es consecuencia de las políticas del bipartidismo. Nada va a cambiar. A mejor. El reparto de cargos no hará si ahondar el divorcio con la ciudadanía.

La mayor parte de los países europeos son gobernados por coaliciones de hecho o mediante acuerdos. Con pocas excepciones. En Grecia, se apunta una mayoría absoluta de los conservadores de Nueva Democracia. Abrasada por el bipartidismo, castigada a muerte por Bruselas al punto de haberle pedido disculpas, sometida la izquierda de un Tsipras que intento lo imposible –poco, bien es verdad–, retorna al redil para empezar otra vez.

La ultraderecha baja en Europa, al menos. Aunque está. Está para aquellos seres que culpan a la emigración de sus males o que ni siquiera los consideran en su universo, los que han alentado a quienes han dejado morir a 32.000 personas en el mediterráneo, 1.600 niños entre ellos, desde 2014. O para quienes, en España, vivieron al calor del franquismo genocida y sacaron provecho para sí y sus descendientes. Y está, aunque baje, para desestabilizar el sistema por cualquier procedimiento. Con el altavoz de las instituciones y de los medios.

Los ciudadanos buscan otros caminos al bipartidismo. Buscan en realidad a quien se encargue de sus necesidades. Es lo que cuenta aunque muchos de los implicados no actúan como si lo supieran. Y lo que es todavía más grave: sin ser conscientes del momento que vivimos y de adónde conduce este camino. Una ciudadanía no puede sobrevivir con estas frustraciones continuas, inacabables al parecer. Y ya tira por la apatía o por los delirantes neofascismos. Teman el día que se decante definitivamente por esa idiocia que, hueca y alumbrada por flashes, ya está llegando a las instituciones.

Por si no ha quedado claro: el bipartidismo ha muerto y repetir elecciones no hará sino matar la política, más de lo que está.

https://www.eldiario.es/zonacritica/Dejen-sonar-bipartidismo-muerto_6_916268379.html
 
Irene Montero: "el interés del PSOE es más una investidura fallida que un acuerdo de Gobierno"



La portavoz del grupo confederal Unidas Podemos- ECP- GEC en el Congreso, Irene Montero, ha querido mostrar su desacuerdo con el reciente anuncio de la fecha del debate de investidura de Pedro Sánchez para el 22 y 23 de julio anunciado esta mañana en rueda de prensa por la presidenta del Congreso Meritxell Batet.

Montero,a través de un tuit colgado en su cuenta oficial de la red social, califica este anuncio como "una falta de respeto institucional innecesaria" ya que afirma que la presidenta Batet ha hecho pública la fecha sin haberlo comunicado antes a los grupos o al menos no al suyo. Así mismo añade que el PSOE parece más interesado "en una investidura fallida que en un acuerdo de Gobierno"

En un segundo tuit, la portavoz amplía su interpretación sobre la fecha anunciada por Batet afirmando que "Sánchez camina hacia una investidura fallida sin negociar nada con nadie para presionar a C´s " sin embargo Montero cree que es posible un acuerdo para un Gobierno de coalición progresista en julio, por lo que no renunciarán al intento.


Equipo de redacción de Eco Republica


 
PACTOS POSTELECTORALES »
El PNV acepta con condiciones una coalición entre Sánchez e Iglesias

Los nacionalistas vascos no se opondrían a esta fórmula que rechaza el PSOE siempre que haya una negociación programática con ellos
CARLOS E. CUÉ
Madrid 4 JUL 2019 - 18:41 CEST


La investidura sigue lejos, pero empiezan a despejarse incógnitas. El PNV, que sería clave en la nueva mayoría como lo fue en la moción de censura, no se opone a un posible Gobierno de coalición PSOE-Podemos siempre que se acuerde con los nacionalistas vascos el programa. Fuentes de la dirección del Partido Nacionalista Vasco señalan que tienen experiencia en coaliciones y no les preocupa esa fórmula, pero insisten en que no se puede dar su voto por hecho: tienen que negociar con ellos. Este miércoles se reanudaron los contactos entre el PNV y el PSOE para la investidura.

“Si alguien sabe de coaliciones es el PNV, que las ha hecho con todos, incluso con su escisión, EA [Eusko Alkartasuna]. No es una línea roja para el PNV que haya una coalición con Podemos. Pero lo que nos preocupa es el programa. Si no nos convence sí nos abstendríamos en la investidura. No se pueden pactar políticas sin tenernos en cuenta ni dar nuestro voto por hecho. Pero a partir de ahí, nosotros queremos que esto salga, y que salga con Podemos, no con Ciudadanos ni el PP”, señalan fuentes del Euskadi Buru Batzar (EBB), la dirección del PNV, comandada por Andoni Ortuzar.


Según estas fuentes, precisamente el miércoles se reanudaron los contactos con los socialistas. El PSOE solo había hecho una breve reunión con el PNV en la que apenas se trató de contenidos. Este grupo es un especialista en negociaciones y se ha mostrado favorable a apoyar a Pedro Sánchez siempre que se acuerden asuntos concretos que les interesan.

En cualquier caso señalan que su voto no sería negativo, pero sí podrían abstenerse si no funciona la negociación. Sí dejan claro que para ellos no es un problema que entren ministros de Podemos, algo que Sánchez ha rechazado de plano hasta ahora.


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A nivel nacional tanto el PP como el PXXE tienen mucho que esconder y tapar. Ese es el gran problema.
Por esa regla de 3 ninguno de la izquierda podrá optar a ningún ministerio, solo los de la derecha.

Me acuerdo ahora de aquellos pactos y negocios donde Pedro Sanchez ofreció a A. Rivera la vicepresidencia.

https://www.publico.es/politica/rivera-oculto-acuerdo-sanchez-le.html
 
5 razones por las que Unidas Podemos tiene que estar en el Gobierno
Por
Xan Pereira Castro
-
julio 4, 2019
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Fotografía de Dani Gago
Guido Ohlenschlaeger

Tras dos meses de las Elecciones Generales seguimos sin gobierno y sin rastro de El-Presidente-en-funciones-encargado-de-formar-gobierno. Tanto es así, que en la ronda de reuniones en Zarzuela el rey Felipe VI, que había encargado a Pedro Sánchez la formación de un gobierno, le reprendió por no haberse reunido con ninguno de los grupos para buscar apoyos para la investidura. Desde ese momento se abrió la ronda con los tres principales partidos. El socio preferente era Unidas Podemos, o así lo dijeron en las elecciones y así lo hicieron saber (por lo menos públicamente) en una reunión en el Congreso con Pablo Iglesias. De allí salió la ya conocida disputa sobre los términos coalición y cooperación. Ese día se visibilizó una división que no se ha resuelto todavía. El PSOE quiere prácticamente reeditar el apoyo gratuito y generoso del partido de Pablo Iglesias que ya recibió en la moción de censura.

Sin embargo, es cierto que lo que ocurrió en la moción de censura es una anormalidad en términos de negociación. Aquello lo único que demostró fue la altura de miras del partido de Pablo Iglesias en un momento tan importante. Pero ahora la cosa es distinta. Los tiempos han cambiado. La gente ya no quiere gobiernos de partido único, y esperan que, como está ocurriendo con la derecha en muchos municipios y comunidades, se pongan de acuerdo. En eso consiste la política fuera del bipartidismo. En Europa lo saben desde hace tiempo, y ya nos toca a nosotros adaptarnos a los nuevos tiempos, como votantes y como gobernantes. Salir de la política de bloques, de vetos y de bloqueos, para entrar en una fase de consensos, diálogos y negociaciones.

Con este panorama, cabe esgrimir cinco razones por las que Unidas Podemos debería estar en ese gobierno.




1- Digan lo que digan, los números suman.

El primer motivo es que los números son tozudos. 42 diputados para Unidas Podemos, 123 para el PSOE da un total de 165, a 11 tan solo de la mayoría absoluta que otorgan los 176 escaños. Bastarían tan solo los apoyos de ERC y PNV. La derecha apenas sumaría 147. La obligación de formar gobierno le toca al bloque de izquierdas y los números suman para ello. Además, con esta diferencia de escaños entre PSOE y Unidas Podemos, que en votos es de apenas la mitad, y teniendo en cuenta que Pedro Sánchez quiso firmar un acuerdo con Ciudadanos en 2016 en el que, como supimos hace poco, entre otras cosas le cedía la vicepresidencia a Albert Rivera, es más que razonable que, siguiendo la lógica aplicada con Ciudadanos en 2016, pudiese haber ministerios para Unidas Podemos. ¿Por qué Ciudadanos sí y Unidas Podemos no?

2- ¿Y si miramos a Europa? 16 países tienen gobiernos de coalición.

En Europa de un tiempo a esta parte gobernar en coalición o en minoría no es una excepción, sino una norma en los países donde el bipartidismo hace tiempo que pasó a la historia. De estos 16 países con gobiernos de coalición, seis cuentan con ejecutivos en minoría y cinco, en mayoría. Países como Alemania, donde gobiernan juntos la CDU y el partido socialdemócrata (SPD), Italia, Austria, Bélgica, Luxemburgo u Holanda tienen desde hace años gobiernos de coalición. En Finlandia hace poco se pusieron de acuerdo los cinco partidos más votados en las últimas elecciones para formar un gobierno de coalición progresista encabezado por el primer ministro Antti Rinne. Corren otros tiempos en Europa, y la mayoría de países se han adaptado a negociar, acordar y cogobernar. Es la nueva Europa y no podemos quedarnos atrás

3- Si ya se ha producido este acuerdo en comunidades y municipios, ¿por qué no en el Gobierno?

No sólo en Europa, en España después de las elecciones autonómicas y municipales estamos viendo como la derecha apenas ha necesitado unos días para ponerse de acuerdo para gobernar juntas en coalición. Pero no solo la derecha, también la izquierda, allí donde ha podido se ha puesto de acuerdo. Valencia fue el primer caso, con un pacto entre Compromís, PSOE y Unidas Podemos en el que el último recibió una vicepresidencia. No fue el único caso. También en Baleares, Canarias, o La Rioja se han formado gobiernos de colación de corte progresista. Lo mismo ha ocurrido en varios municipios. La pregunta es, si a nivel regional se puede, ¿por qué no a nivel nacional?

4- Unidas Podemos es la garantía para que existan políticas de izquierdas.

Ya sabemos que las palabras se las lleva el viento. Los acuerdos firmados sobre el papel pueden o no cumplirse, y con la experiencia de los presupuestos post-moción de censura, deberíamos tener claro que el PSOE hace políticas de izquierdas cuando tiene un contrapeso a su izquierda que le empuja y obliga a hacerlas, sino la naturaleza del PSOE le hace virar a la derecha, como ya sucediera en 2016 con Ciudadanos.

Además, aunque lo fundamental para un acuerdo de gobierno es el programa, todos sabemos que las palabras, como escribía al principio, se las lleva el viento, y, que como decía mi abuela, más vale pájaro en mano que ciento volando. Por eso, la única forma de garantizar que lo firmado sobre el papel se cumple, es entrando en el gobierno, para poder trabajar por llevar a cabo el programa, y, también, como no, para responsabilizarse sobre las políticas que se puedan llevar a cabo, pero también para las que no. Nada más honesto que arriesgarse a gobernar y jugarse el tipo manchándose en el barro que supone tener ministerios y trabajar por sacar adelante políticas públicas. Es un gesto que, frente a las lecturas infantilistas, convierte a Unidas Podemos en un partido maduro y responsable. Todos sabemos lo difícil que es en este país gobernar para las mayorías.





5- Es una oportunidad para que seamos punta de lanza para una nueva Europa.

Un gobierno en solitario del PSOE no sería capaz de garantizar ni estabilidad ni políticas progresistas. Lo que ellos llaman aritmética parlamentaria, el sentido común lo llama mirar a la derecha para las cuestiones económicas y a la izquierda para las cuestiones sociales. Nada distinto a lo que ya hay en la mayoría de países europeos.

Sin embargo, junto con Portugal, España podría ser cabeza de lanza de una nueva Europa que, frente a las políticas de la extremaderecha de Salvini, Abascal, Orban o Le Pen y las políticas ultraliberales de Merkel o Macron, pueda abrir la ventana a una Europa solidaria, fraterna, social, que garantice y blinde derechos y que haga frente a la precariedad con políticas públicas. Podríamos ser el primer gobierno de coalición enteramente progresista. Sería una oportunidad para decirle al resto de países que hay una alternativa y que tenemos una oportunidad para construir una nueva Europa.

En definitiva, ¿vamos a dejar pasar esta oportunidad para construir otra España y otra Europa? ¿Va Pedro Sánchez a desoír lo que le pidieron sus militantes en Ferraz? ¿Va a quebrar la confianza de sus votantes que le dijeron “Con Rivera no”? ¿Va a traicionar a los únicos que confiaron en él, cuando estaba solo contra todos los barones del PSOE y los grandes poderes? ¿De qué tiene miedo?

La única certeza es que se abre una nueva era política sin vetos, bloqueos ni mayorías absolutas, y que podemos elegir entre subirnos al barco del resto de países europeos o volver a quedarnos atrás añorando el bipartidismo perdido. Las élites aspiran a esto último (y parece que también PSOE y PP). Para el resto, lo conveniente sea seguramente subirnos a ese barco. Es más, no solo podemos subirnos al barco, podemos encabezar una nueva capitanía. No perdamos la oportunidad.

https://spanishrevolution.org/5-raz...Hag1II9BUB4JTE9LVtyRz4WmN3KNB_peyOc4Akp3uuoOM

Vuelvo a preguntar: ¿Que oculta el PXXE para no dejar que nadie de la izquierda pueda entrar en un gobierno de coalición?
 
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