A mí me parece horrible. Conozco dos casos de personas que nacieron después de fallecer algún hermano mayor, y ambos tienen traumas gordos, no porque les hayan puesto el mismo nombre, si no porque sienten que no tuvieron una infancia normal y como que nacieron para ser los "sustitutos" del hermano fallecido. En el caso de una, su madre nunca superó la muerte de su primer hijo y siempre sintió que nunca la quisieron igual que como quisieron al primero. Eso tiene que ser muy duro, ahora imagínate si encima le niegas a ese hijo el derecho a su propia identidad. Menos mal que esa costumbre se quedó en el pasado.
Conozco un caso de chico que lleva el nombre del padre, Ricardo, quien tuvo un hijo que murió a las horas de nacer y le llamaron Ricardo, osea, que lleva el nombre del hermano muerto y del padre. Un horror, y sí, parece que como la vida del hermano mayor se truncó el que la tiene que continuar es "el sustituto". Si ya no me gusta poner nombres por familiares, ya por uno muerto ni os cuento, sobre todo cuando es un hermano.
Yo tengo el nombre de una persona fallecida de mi familia en muy trágicas circunstancias cuando la pobre era sólo una niña, sucedió en tiempos de postguerra. Tuve la paranoia de pensar que mi nombre estaría asociado a la tragedia cuando repasando mi vida, me di cuenta de que joder, había asistido a mi primer funeral con sólo ocho años, luego vino otro con 14, y venga tanatorios de familiares y parientes, y venga misas, y venga muerte y más rollo de esto. Curiosamente a mis hermanos no se los ve por esos sitios, pero yo en serio, llegué a acabar hasta el chichi ya y me rayé: la que se comía esos marrones siempre era yo. Cogí le recé a mi pobre pariente que alcanzara la luz y llegase en paz a su destino y que se cortara todo vínculo kármico en ese sentido tan funesto, con lo bonita que era la chiquilla y con lo bonito que es nuestro nombre (no sus lo voy a decir lo siento primas) pero que tenga esa asociación a la nena fallecida, buff. Yo llegué a tener una racha de decirle a muchos de mi entorno cuando estábamos en un tanatorio acompañando "pues ya nos veremos en alguna mierda de estas otra vez", ahí estaba yo siempre. Acabé hasta el moño, ¿quién era la que me terminaba llevando siempre a esas mierdas para acompañarla y demás porque es que yo "tenía" que estar allí"?, mi madre, la que me puso el nombre, que ni de coña me disgusta y creo que es destinado a mi (significado bonito) pero coj*nes con los tanatorios y funerales de los huevos desde tan pequeña. Pura saturación.
Joder, que mi madre me pone ese nombre (bonito pero con relación a dramas familiares) y es curiosamente la que siempre me está obligando a ir a esos lugares, he ido a mierdas de estas incluso de gente que no conozco o si no estaba nadie de mi familia, a modo de "representación familiar" (mi madre y sus protocolos de tanatorio), mira se acabó ya.
Mi nombre está asociado curiosamente, con la vida, la luz, la alegría.