Uff ¡Como se de que hablas! Yo también tengo un "trasto", el mío de 7 meses, mezcla de cazador. Está en plena adolescencia canina, es un buenazo, cero agresividad y muy cariñoso, pero uffff; si nos descuidamos, roba cosas de la encimera de la cocina y de la mesa; obedece solo cuando quiere, sigue persiguiendo a mis gatos -para jugar, pero no los deja tranquilos- cuando está animado, sus mordisquitos en modo juego son mas bien mordiscazos; en la calle tira de la correa como si fuese un husky en plena carrera de trineos y nuestro jardín parece un campo de minas, con todos los agujeros y destrozos que hace a la que le quitas el ojo de encima. A la que me desuido y dejo un mechero a su alcance, me lo encuentro hecho migas;(está claro... este quiere que deje de fumar ) he de guardar la almohada de mi cama en el armario cada día si no quiero que la coja y se la lleve por toda la casa, jardín incluido (es curiosa su fijación por los mecheros y mi almohada.) Está ya castrado pero eso no sirve para que se calme, así que no se ha calmado...en fin, no se, imagino que antes o después, cuando se haga mas adulto, aflojará un poco. Mientas tanto yo tengo ratos de todo; a veces de estar al limite otras veces, de pasar de todo y esperar resignadamente a que se le pase la edad del pavo perruna, aunque estoy considerando contactar con un etólogo/a. Hace muchos años, tuve una cachorrita que era una completa terminator, y realmente el etólogo que nos la visitó, hizo maravillas con unas pautas de conducta para nosotros y unas dosis bajas de prozac para la perrita... en fin, está visto que la adolescencia perruna es una etapa complicada, y nos toca tener pacienciaYo he adoptado un perro mezcla de boxer con pitbull o algo así que no sabemos por lo mismo, la vecina lo quería dejar en una perrera.
Tiene 8 meses y es cariñosísimo. Pura dulzura. Pero es un trasto. Se mea mucho en casa, siempre salta para subirse encima cuando estamos de pie (es enorme, lo recuerdo), no se acostumbra al bozal (lo lleva mayormente por su seguridad, se lo come todo).
Mentiría si dijera que no estamos al límite, pero estoy intentando leer y aprender cosas que nos ayuden porque lo quiero mucho y nos necesita. No quiero pegarle. No obedece muchas veces, pero no quiero pegarle. Espero dar la talla como dueña, ya tengo historia de perros a mis espaldas, pero este estaba solo la mayor parte del día, más abandonado que acompañado y es un caso especial.
Dadme fuerzas.
Saludos solidarios de una coticompi desesperada a otra
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