Esther Doña. Viuda del marqués de Griñón.

Bueno, el título sí que lo heredará, al,menos como Sra.Marquesa viuda De Griñón...como hacía la de Romanones, la de Cela y muchas otras. Y el usufructo de la casa también. Y como están casasos en separación de bienes, las deudas serán para los hijos, y mientras se buscará otro marido.
 
Bueno, el título sí que lo heredará, al,menos como Sra.Marquesa viuda De Griñón...como hacía la de Romanones, la de Cela y muchas otras. Y el usufructo de la casa también. Y como están casasos en separación de bienes, las deudas serán para los hijos, y mientras se buscará otro marido.
Con la separación de bienes el usufructo de la vivienda tambien es para el conyuge?e
 
Pues si quiere ayudarlo que eche mano de su antigua profesión para producir euros

No sé a quien le pilla por sorpresa. Ya lo veníamos anunciando. habla de una ampliación de capital de 2016, antes hubo otra, el señor marqués no perderá tanto, no creo que llegue ni al 49%. Todavía le quedan terrenos, el palacio, con los años que le quedan no se va a morir de hambre. Aqui Doña Doña ha aportado tanto como él, son los reportajes de ambos juntos los que están sacando la casa hacia delante.
Que se sepa, las mujeres no le han sacado nada al marqués. No se sabe si alguna vez le pagó a Isabel lo que le debía y esta está ganándose las lentejas en el Hola.
 
15/12/2018

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“No se controla. Está gastando más de la cuenta”, dicen sus allegados. Pero Carlos Falcó niega en LOC tener problemas de dinero POR ANTONIO DIÉGUEZ / CARLA VÁZQUEZ
A POCAS SEMANAS DE DESPEDIR 2018, Carlos Falcó (81) ultima sus planes para estas fiestas navideñas con Esther Doña, que cumplirá los 40 el próximo día 30. Así, el matrimonio continuará con su frenética agenda de viajes después de visitar la Costa Azul francesa y Perú en los últimos meses. También en agosto se dejaron ver en las carreras de caballos de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) junto a Carmen Martínez-Bordiú. Al poco de conocerse en septiembre de 2015, la pareja ya empezó con su trajín de maletas: Florencia, Berlín, Cannes, Ibiza, Moscú, Nueva York, México… En 2016, Falcó y Doña también hicieron un safari por Kenia y Tanzania, además de otras vacaciones en Marrakech, donde se alojaron en La Mamounia durante diez días. Tanto le gustó al matrimonio esta estancia marroquí que pasó esa Nochevieja en este exclusivo hotel. Ya en 2017 visitaron Grecia y, nada más casarse, se desplazaron a Puerto de Santa María (Cádiz) y Tánger –pagaron 500 euros la noche por una de las suites del lujoso Le Mirage– para luego continuar su luna de miel por varios destinos africanos.

Aunque algunos de estos viajes se debieron a sus negocios bodegueros y aceiteros, también es cierto que el marqués de Griñón no escatima en regalos a su cuarta esposa: a principios de 2016, le compró en Tiffany’s un anillo con un llamativo diamante engarzado. Aunque depende de la pureza y calidad del brillante, el precio de la joya no bajaría de los 20.000 euros y podría alcanzar los 100.000, según expertos consultados por LOC.

Pese a lo generoso que es el aristócrata, hay algo que se le resiste a Esther: “Ella quiere un piso en Madrid, para salir a actos sociales. Le cansa volver a El Rincón”, comentan desde su entorno. Esta fuente se refiere a la finca en la que reside la pareja, situada en Aldea del Fresno, a una hora en coche del centro de la capital. Este deseo sigue sin cumplirse. Doña ya se hizo con dos inmuebles en Majadahonda de su primer marido, valorados en un millón de euros cada uno, pero los tiene alquilados. Por otro lado, desde que empezó su romance con la malagueña, Carlos también viene invirtiendo dinero en sí mismo para rejuvenecerse. En junio de 2016, el doctor Ramón Vila-Rovira le realizó un transplante de pelo que le costó 8.000 euros. El aristócrata también se quitó las bolsas de los ojos ese mismo verano a cambio de otros 5.000 euros.

NIEGA PROBLEMAS DE LIQUIDEZ

La familia del marqués de Griñón se muestra preocupada por este elevado tren de vida y siente que no corresponde para nada con su economía. “No se controla. Creemos que está gastando más de la cuenta”, desliza su círculo a LOC. “Su palacio tampoco está tan conservado. No está bien pintado, algunas maderas están levantadas y los cables eléctricos están por fuera de las paredes”, afirma otra persona cercana a la pareja, que recuerda que El Rincón se construyó en el siglo XIX. “La depuradora de la piscina también lleva años rota”, apostilla la misma fuente, quien termina añadiendo que sólo unas habitaciones del palacio disponen de calefacción. No obstante, Falcó niega cualquier tipo de apuros económicos. “No sé si alguien de mi familia está alarmado, pero no tengo ningún problema de liquidez. De hecho, acabo de participar en una ampliación de capital de una de nuestras empresas para poder expandirnos en La Mancha y la región del Penedés”, explica en exclusiva a LOC.

Otra persona del entorno de Falcó manifiesta a este suplemento: “Carlos es un empresario romántico. Se propuso sacar adelante las bodegas cuando era joven y lleva muchos años luchando”. Según consta en el Registro de la Propiedad, el aristócrata solicitó en 2012 un préstamo hipotecario de 1,6 millones de euros a su hijo Manuel, uno de los dos que tuvo con Jeannine Girod, y puso como aval 123,4 hectáreas de El Rincón, tasadas en cinco millones de euros. Aunque estaba fijado que la cantidad estuviera devuelta en noviembre de 2015, lo cierto es que no consta que esté pagado el préstamo o cancelada la garantía hipotecaria de esta finca en el Registro de la Propiedad. A nombre de Carlos Falcó figura parte de otro terreno rústico de 34,44 hectáreas en el término de San Martín de Valdeiglesias, aunque tiene más inmuebles y parcelas a través de sociedades. Oleum Plus SL, la empresa que creó en 2016 para poner en marcha sus cosméticos a base de aceite de oliva y de la que él es administrador único, es titular de otra parte de la finca de El Rincón, que arrastró un préstamo hipotecario de 1.442.429,05 euros, aunque el mismo se canceló en octubre de 2017.

La Almazara 1657 S.L, que Falcó presidió hasta 2015 y de la que es ahora administrador mancomunado, cuenta con un terreno de 700 metros cuadrados sobre la que se asienta una edificación de 505 metros cuadrados. Otra de las empresas familiares, Pagos Familia Marqués Griñón S.A., dedicada a la comercialización de sus vinos y aceites, posee la mitad de una finca de 17 hectáreas en Quintanilla de Arriba (Valladolid) y parte de los viñedos de la Dehesa de Valdepusa, ubicados en la localidad manchega de Malpica del Tajo –concretamente,18 hectáreas, que fueron tasadas en medio millón de euros en 2016–.

Otra de sus sociedades vinícolas, Vinexco SL, es titular de una parcela de 51 hectáreas en la misma zona de Toledo, aunque este terreno valorado en casi cuatro millones de euros arrastra varias cargas, según figura en el Registro de la Propiedad: un préstamo hipotecario de dos millones de Caja de Ahorros y Pensiones de Barcelona formalizado el pasado de agosto y con fecha de vencimiento de octubre de 2019; otra cantidad de dos millones de euros concedida por la misma entidad bancaria en junio de 2011 y que debe ser devuelta antes de octubre de 2025; un tercer préstamo hipotecario de 285.000 euros del Banco Popular Español que se formalizó en agosto de 2013 y vence en agosto de 2023; y una última carga de 2.045.430 euros prestados por Caixabank S.A. en julio de 2014, que deben ser devueltos antes de octubre de 2014. “Todas esas cantidades están al día. Nosotros le prestamos dinero a la empresa para que puedan desarrollarse sus planes de expansión. La familia ha puesto uno de los dos millones de euros de la expansión de capital de la empresa y no hemos retirado ni un céntimo de dividendos”, explica Carlos Falcó, refiriéndose a las informaciones publicadas esta semana sobre un aumento de capital de Marqués de Griñón Family Estates S.A., que integra Vinexco S.L., tras arrastrar deudas millonarias. “La marca está valorada entre diez y 11 millones por una auditora externa. Cuando hablamos de que hay 4,5 millones de deuda, es una cantidad pequeña en relación a los activos”, sostiene el aristócrata, quien añade a este suplemento: “Ampliamos capital para reponer las cifras a niveles aceptables. Ahora estamos totalmente saneados y tenemos un plan de expansión fantástico, basado en desarrollar mucho los vinos de Valdepusa y el cava en el Penedés. No hay ninguna preocupación y la sociedad es completamente solvente”.

Recién nombrado presidente de ECCIA (European Cultural Creative Industries Alliance), Falcó explica: “Agrupa toda la excelencia europea. Marcas desde Louis Vuitton, Ferrari o Mercedes, y entidades culturales como el Museo Del Prado o el Louvre”. Carlos Falcó continúa expandiéndose. Actualmente, prepara el salto de su aceite de oliva a la cosmética, que esperaba desarrollar a lo largo del 2019.

Falcó contrajo matrimonio con Jeaninne Girod en 1963, cuando ambos completaban su formación académica en California. Allí llegó al mundo el primogénito, Manuel, al año de casarse, mientras que Xandra (en la foto con su padre), nació en 1967, cuando el marqués de Griñón regresó a España. La relación no duró mucho más, pues Jeaninne se enamoró de Ramón Mendoza, ex presidente del Real Madrid. El matrimonio obtuvo la nulidad en 1971 y Carlos consiguió la custodia de los dos hijos. Manuel acaba de ser nombrado codirector global de Citigroup y apoya a su padre en las inversiones, mientras que Xandra tiene un alto puesto en los negocios vinícolas familiares. Ambos fueron los primeros en transmitir su desaprobación al aristócrata cuando éste comenzó a salir con Esther Doña.

A los tres años de divorciarse de Girod, Carlos empezó a verse con Cristina Onassis, aunque él no quiso una relación con ella y la cosa no llegó a fraguar. La verdadera ilusión del marqués sería Isabel Preysler, con quien coincidió en una proyección privada de la película ‘Fiebre del sábado noche’. Al mes de salir, el marqués de Griñón le pidió boda a la filipina y se dieron el ‘sí, quiero’ en 1980. Aunque su hija Tamara nació al año siguiente, esta historia de amor no tardó en torcerse. Aburrida de la vida campestre, Isabel empezó a acudir sola a cenas en Madrid y en una conoció a Miguel Boyer. Carlos Falcó trató de zanjar especulaciones hablando para ‘Hola’ en 1985, pero a los pocos meses se separó de Preysler, que se casó con Miguel Boyer en 1988.

Pese a la dolorosa ruptura, Carlos volvió a enamorarse de Fátima de la Cierva, 22 años menor. La boda con esta bisnieta del duque del Infantado llegó en 1993. Ambos tuvieron dos hijos, Duarte (en la foto) y Aldara, que son los únicos que aceptaron inicialmente a Esther Doña. Pero, en febrero, Duarte decidió abandonar El Rincón por tensiones con ésta y se mudó con su abuela materna, Imelda Moreno. A finales de primavera, Aldara, que realiza sus estudios universitarios en Viena, regresó a España para pasar el verano con su padre. Ahí fue cuando se encontró con que la madre de Doña vivía en su habitación. “La niña discutió con su padre, pero Esther alteró mucho más la situación. Aldara decidió irse de allí”. cuentan a LOC.
 
Última edición por un moderador:
A mí me parece que él hace muy bien en gastarse SU dinero, porque es suyo, en lo que le haga feliz y si la herencia mengua pues que apechuguen los herederos.
Ella es otra más de las trepas que proliferan como setas, por cierto; ahora que en el pecado llevan la penitencia ¡no tendrán que pasar asco ni nada! ¡puaj!
 
A mí me parece que él hace muy bien en gastarse SU dinero, porque es suyo, en lo que le haga feliz y si la herencia mengua pues que apechuguen los herederos.
Ella es otra más de las trepas que proliferan como setas, por cierto; ahora que en el pecado llevan la penitencia ¡no tendrán que pasar asco ni nada! ¡puaj!

Yo también opino que su dinero se lo puede gastar él como le dé la gana, los carroñeros de hijos que se aguanten que estamos hasta la narices de hijos Holeros que en vida del padre hacen como si el dinero fuera suyo.
Y si ambos hijos mayores se ocupan también de la gestión, tan bien no lo harán cuando no salen de los números rojos.
En este caso sin embargo hay unos límites. Las herencias familiares de generación a generación si esposible habría que pasarlas a los hijos, estoy hablando de castillos, cuadros etc. que para ello se las entregaron otras generaciones.
 

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