sábado, 21 de mayo de 2016
60 casos de manipulación mediática sobre Venezuela, por parte de opositores o de diferentes medios de comunicación afines a la oposición venezolana.
En esta ocasión, a instancias y con la colaboración de @CervantesFAQs vamos a hacer un recopilatorio de algunos casos de manipulación, informaciones tendenciosas, inexactas o errores fruto de no contrastar la información, que son por todo el mundo conocidos ya que han sido ampliamente comentados en los últimos años en relación a diversos temas.
Antes de comenzar, nos gustaría recordar, que no hace mucho, un estudio de la Universidad de Oxford, publicado por el Instituto Reuters para el estudio del periodismo, concluyó que los medios de comunicación de España son los menos creíbles de los 11 países consultados en Europa.
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Vamos a comenzar con algunos casos de utilización malintencionada o directamente manipuladora del Photoshop.
El 9 de enero de 2014, el diario ABC, publicaba una portada a todo color, como suele ser habitual en este periódico, anunciando la detención de varios abogados vascos que tenían como labor profesional la defensa de presos de ETA.
Esta operación lanzada en pleno proceso de paz fue denunciada como una redada con evidente fin propagandista, como demostró la actitud del Ministerio de Interior que anunció la operación incluso antes de que esta se produjese, posibilitando que las cámaras y los objetivos estuviesen perfectamente dispuestas para grabar las detenciones.
Pues bien, ABC, habituado a hacer portadas sensacionalistas y lo más impactantes posibles, se dedicó a jugar con las sobras de una fotografía en la que aparece la abogada Ainhoa Baglietto, resaltando sus ojeras y facciones para darle un aire tenebroso a su rostro. Además señala que "Baglietto lanza una mirada retadora a un Guardia Civil". Una libre interpretación del periodista, ya que la abogada perfectamente podría estar mirando a través de la puerta a la nube de periodistas que le hacen fotos.
A la izquierda portada de ABC. A la derecha fotografía original.
No es la única vez que el ABC se ha pasado con el Photoshop. El 17 de diciembre, tras la agresión de un joven a Mariano Rajoy en Pontevedra en plena campaña electoral, el ABC publicaba la siguiente portada.
En ella resalta desmesuradamente la marca dejada por la agresión en el rostro de Rajoy, enrojeciéndola deliberadamente o, como ellos afirman, por error. Quien sabe a qué responde esta práctica, pero podríamos pensar en un intento de ablandar a la opinión pública ante la imagen de un Presidente del Gobierno con una fea herida en la cara, de cara a inclinar el voto en las inminentes elecciones.
Izquierda foto original. Derecha portada ABC
Como hemos podido leer en algún comentario, el diario ABC se excusó aduciendo que el contraste había sido fruto de un error en el formato de impresión y visualización de imágenes y que por eso el rojo de la cara de Rajoy se había vuelto más fuerte. Sin embargo, personas que trabajan con ese tipo de herramientas de edición digital, aseguran que "eso no explica el cambio de tonalidad de la camisa blanca del hombre de atrás, que se vuelve rosa, la desaparición de los brillos en la cara de Rajoy, y que el resto de la foto gane contraste mientras el traje gana brillo y pierde saturación".
Nosotros no entendemos de ese tipo de herramientas, sin embargo, sabiendo que esas herramientas de edición pueden ocasionar este tipo de errores, estamos seguros de que existe el modo de corregirlos. Sino, ¿Por qué en el resto de medios la foto apareció sin esos cambios?
Y seguimos con ABC, ya que este diario parece estar abonado al retoque de fotografías. En esta ocasión el periódico ha recortado deliberadamente una fotografía con la intención de atacar a la alcaldesa madrileña, Manuela Carmena.
El titular fabricado para la ocasión en consonancia con la foto recortada, evidencia la intención del diario. Pero una vez más, la red enseguida facilita la foto original, en la que se ve que Esperanza Aguirre no se está dirigiendo a Carmena como quiere hacer ver el titular, sino que se dirige a una tercera persona que queda fuera de plano tras la manipulación fotográfica. En la escena original, Carmena solamente es una mera espectadora.