Primero era colon irritable, luego intolerante a la lactosa y ahora es que no sabe comer si no se lo enseña un bundel.Es flipante que se tenga que comprar un bundle para comer sin ánsiedad como un animal .... pero lo más triste es que sabemos que sus propósitos siempre le duran nada y menos y mañana la veremos empujandose el queso con jamón dentro de la boca con los dedos otra vez. De verdad que das grima, muchacha.
Manda narices.