A este respecto me acabáis de recordar una cosa. Mis padres son dos personas muy pulcras, de ducha diaria y cepillarse los dientes varias veces al día. Mi madre es la típica ama de casa maniática de la limpieza. Pero recuerdo que cuando éramos pequeñas mi madre no nos inculcó una higiene muy estricta, recuerdo que solo nos bañábamos una vez por semana y yo recuerdo incluso haberme tirado épocas en la que me podía pasar meses sin cepillarme los dientes porque no tenía a nadie encima de mí para que lo hiciera. Luego según fuimos creciendo ya adoptamos medidas de higiene más normales como ducharnos y cepillarnos los dientes como mínimo todos los días. Mi hermana y yo hemos hablado de ello y no nos lo explicamos, porque en todo nuestra madre era muy estricta. La única explicación que le damos es que seguramente le pillara en una de las múltiples depresiones que tenía de aquella y se limitara a lo estrictamente necesario en nuestra educación, pasando olímpicamente del resto.
Esto también explicaría muchas otras cosas de mi niñez en las que pienso a veces en plan: "el día que tenga hijos pienso hacer esto de manera muy distinta".
El tema de bañarse o no de niño es mas o menos irrelevante, hasta puede ser que gracias a ello crezcas con unas buenas defensas.
Pero yo me arrepiento muchísimo de no haber puesto más cuidado con la limpieza bucal en mi niñez, que mi madre la pobre es muy sencilla e inculta y lo pasaba totalmente por alto, además de tener muy poco dinero en casa para gastarlo en dentífricos y enjuagues.
Como tengas cierta tendencia a la caries y te gusten los dulces llegas a la edad adulta con los dientes hechos papilla. Y luego gástate un pastizal en implantes. Es muy importante educar a los niños en cuidar su boca.